Concéntrate en mí |SasuSaku|

Capítulo 5; no lo permitiré

Es por la mañana, Sakura va caminando para la universidad. El clima no parece favorecedor, ya que está lloviendo, por suerte lleva con ella su pequeño paraguas para evitar las pequeñas gotitas de agua.
En cuestión de minutos llega, inmediatamente se dirige a su casillero, lo abre rápidamente y al mismo tiempo escucha como se estrella contra algo, o alguien.

—¡Lee! —exclama mientras lo mira aterrada.

Es a él a quién ha golpeado con la pequeña puerta, éste se restriega el rostro con la palma de su mano mientras se queja por la sensación de dolor.

—¡Cómo lo siento! ¡Discúlpame!

Lee hace la misma acción una vez más, para después retirar su mano, tiene un golpe en la frente y se le está hinchando rápidamente, por lo que Sakura se preocupa de inmediato.

—No importa, Sakura —sonríe con dificultad—. Estoy bien.

—No es cierto, déjame ayudarte.

Saca de su casillero una venda y un poco de alcohol, junto con una pequeña bola de algodón, empapa con rapidez el algodón y lo coloca sobre la frente de Lee, quien la mira con curiosidad.

—No está sangrando, pero quiero asegurarme de que no se infecte —sonríe levemente y coloca la venda con sumo cuidado para no lastimarlo más—. Ya esta.

—No te hubieras molestado Saku, fue un accidente —dice avergonzado—. Muchas gracias —la pelirrosa se limita a sonreír como respuesta—. Quiero preguntarte algo.

—¿Qué sucede? —pregunta, mientras guarda las cosas que ha utilizado.

—¿Leíste la carta?

—Oh si, aquí mismo la traigo —señala la mochila, ésta se encuentra en el suelo—. Muchas gracias, fue un gran detalle y lo aprecio mucho.

—¿De verdad? —pregunta sorprendido—. No tienes nada que agradecer, gracias a ti por apreciar un pequeño papel con letras —sonríe ampliamente—. Tengo que irme, ya casi es hora de entrar y tengo clase con el profesor Gai, nos vemos.

—De acuerdo, nos vemos después —agita su mano mientras Lee se aleja.

Enseguida toma los libros que necesita para sus primeras clases, se encuentra guardando con calma los libros en su mochila, cuando se percata que por el pasillo pasa su novio, ignorándola, pues ni siquiera voltea a verla, lo sigue con la mirada hasta que da vuelta en el pasillo y lo pierde de vista. Su mente atina a formularse la misma pregunta de siempre: ¿Ahora qué ha hecho para que se moleste?

—Te vio con Lee —escucha de repente, Naruto se posiciona a su lado y la mira—, dijo que no hablará contigo por ahora —alza los hombros en señal de desinterés.

Sakura cierra con brusquedad su casillero y mira a Naruto.

—No puedo creerlo —dice entre triste y enfadada, ¿después de lo que hablaron ayer? ¿Por qué le pide perdón por algo que va a seguir haciendo?—. Tengo que ir a clase, Naruto, nos vemos.

—Sí, adiós.

Más que triste, se siente molesta. Él no confía en ella, no importa lo que diga.
Entra al aula arrastrando sus pies, su ánimo ha decaído, saluda a sus amigas tan pronto como entran en su campo de visión y toma asiento en su pupitre, poco después llega el profesor e inicia la clase.

Ni siquiera puede poner atención, cosa que le frustra demasiado.

—Sakura, ¿estás bien? —le pregunta Hinata cuando el profesor abandona el aula, ya es hora del almuerzo.

La pelirrosa duda, pero después de unos segundos responde.

—Estoy molesta con Sasuke, esta mañana Naruto me dijo que no quiere hablar conmigo porque me vio hablando con Lee.

—Oh, ahora entiendo —Hinata no quiere entrometerse, pero no le parece mal recordarle que la comunicación es importante, por lo que le dedica una mirada comprensiva—. Debes hablar con él.

—Esta vez no, Hinata —dice cansada—. Estoy segura que no hice nada malo, no tengo porqué hablar con él, ayer lo discutimos y parece que no le ha importado.

—Entiendo. Cualquier decisión que tomes, sabes que Ino y yo te apoyamos.

—Gracias.

Las tres salen del aula, dirigiéndonos a la cafetería; dentro de ésta se encuentran Naruto y Sai tomando asiento en una de las mesas, es obvio que Sasuke no irá a almorzar con ellos, la pelirrosa trata de ignorar ese hecho, aunque en el fondo le duele que haga ese tipo de berrinches. Cada una pide su comida y toman asiento con los antes mencionados.

—Sakura —la llama Sai—, Sasuke me pidió que te dijera que estará esperándote en nuestra aula, al parecer quiere hablar contigo.

—Gracias Sai —se limita a agradecerle y sigue comiendo.

Por supuesto que no irá, no perderá su almuerzo por discutir algo que no tiene ningún sentido.

—Sasuke ha estado algo malhumorado —comenta Naruto.

—Siempre —bromea Ino.

Sakura ríe levemente ante el comentario de la rubia, nadie más en la mesa lo hace, por lo que ambas logran ponerse nerviosas.

—Tranquilos chicos —dice al notar a ambos hombres tan serios, la tensión repentinamente se siente en el aire—. Ino no lo dice en serio, ¿verdad?

La rubia los observa y niega con la cabeza. Ambas saben que lo dice en serio, pero es mejor mentir. Sakura puede asegurar que Ino está riéndose internamente.

Tan pronto como terminan de almorzar regresan a su aula. Las clases pasan rápidamente, dando por fin el término de las mismas, sus amigas se marchan con sus respectivas parejas, no sin antes insistirle en acompañarla, pero se niega, no le molesta para nada irse sola.
Regresa a su casillero y acomoda sus libros sin prisa alguna, sale del edificio, pasando por el estacionamiento, recorre algunas filas de autos e inevitablemente se topa con Sasuke, quien se mantiene recargado sobre su auto, claramente se ve molesto. Sigue su camino como si no lo hubiera visto, restándole importancia a su presencia, cuando ha dado unos pasos escucha como le sigue rápidamente, para después posicionarse frente a ella, impidiéndole seguir. Sakura cruza sus brazos, quedando éstos sobre su pecho y su ceño se frunce, mostrándole su molestia.

—Sakura.

—Déjame pasar, Sasuke.

Ella intenta rodearlo, pero él se acerca más y la toma de los brazos, acción que inmediatamente la pone nerviosa.

—Necesito hablar contigo.

Él está conteniendo su enojo, tan solo su tono de voz lo delata.

—No lo parecía cuando me ignoraste en la mañana —su voz quebradiza revela como es que se encuentra ahora.

—Estabas con Lee, por eso no hablé contigo.

—Creo que ayer hablamos de la confianza que debes tenerme —le recuerda, tratando de hacerlo razonar.

—Pero estabas muy cerca de él, además, no creas que no noté la cara de idiota que hizo cuando le hablabas.

—Creo que debemos hablar de esto cuando estés calmado —dice, intentando sonar más segura.

Sasuke la mira frunciendo el ceño, pues parece querer evadir el tema. Ella toma sus manos para liberar sus brazos, le resulta fácil hacerlo.

—Tengo que irme.

—Pero... —pronuncia, totalmente desconcertado.

—No Sasuke, sé que esto aún no se resuelve, pero si no confías en mi ahora, dudo mucho que hablando de nuevo lo hagas.

Sakura termina por rodearlo y esta vez él no se interpone, por lo que sigue caminando, sin despedirse. Es la primera vez que no le permite hacer su típica escena de celos.