C14: Segunda boda, segunda vida.

545 57 6
                                    

—Entonces simplemente apareció y le corté la cabeza—musitó Adrián jugueteando con una servilleta. Esteban soltó una risita divertida y observó a Sebastián que permanecía con la mirada fija en algún punto inexistente.

—¿Cuántas cabezas cortaste tú, Yatra?—cuestionó en voz baja el rubio.

—Muy cool—declaró y ambos rieron totalmente divertidos.—¿Qué?¿De qué se ríen?

—Sólo falta que te eches a llorar. Te contamos una película que vimos hace siglos y tú decías a todo que sí. ¿Qué demonios es lo que está pasando contigo? Parece como sí tu cabeza estuviera de viaje por algún lago demasiado lejano...estás retraído y todo lo demás ¿Qué pasa?—preguntó Esteban en medio de un largo suspiro.

—Creo que le está afectando demasiado esto de la paternidad...—se burló Adrián y el rubio rio divertido.

—No es eso...es que...bueno, creo que Leah quiere divorciarse de mi...—musitó y ambos lo miraron fijamente.

—¿Qué no se supone que se habían olvidado de esos planes?—masculló el castaño dándole un pequeño trago a su bebida.

—Me dijo que cree que nuestro matrimonio es un farsa—le espetó el pelinegro observándole fervientemente.—Encima creo que Sofía no fue más que un detonante en mi relación con Leah, desde el día que estúpidamente fuimos a su fiesta de cumpleaños está algo...distante, no entiendo por qué...

—Bueno, la verdad es que sí yo fuese Leah y hubiera visto que una chica rubia descerebrada como Sofía suele fingir que es te besa, entonces yo te hubiera mandando a la mierda desde el mismo momento en qué pasó—explicó lentamente.

—No lo ayudes más—replicó Adrián.—¿Qué se supone que piensas hacer ahora?—cuestionó el muchacho de manera lenta.

—No lo sé...se supone que para eso son mis mejores amigos. Me deberían estar ayudando a pensar en algo...quiero hacer algo lindo para Leah, ya sabes, algo que realmente le demuestre que para mí nuestro matrimonio no una farsa...que es algo real...—Esteban rio en voz baja y se limpió una lágrima imaginaria.

—Le diste un hijo. ¿Eso es tener una relación falsa?—cuestionó Adrián encogiéndose de hombros.

—Tomando en cuenta que nuestro bebé fue más bien un accidente...—replicó Sebastián y luego negó.—Deja de decir estupideces, por favor Yatra—demandó de mala gana.

—Como sea, más vale que pienses en algo y que sea rápido—lo presionó Esteban mirándolo fijamente.

—¡Tengo una idea!—anunció Sebastián poniéndose de pie en un salto con una enorme sonrisa en los labios.

—¿Qué nueva tontería se te ocurrió ahora?—cuestionó Esteban cruzándose de brazos.

—Le voy a pedir a mi mujer que se case conmigo...—decidió sonriéndoles.

—Una idea tan loca como él...

(...)

—¡Qué bonito departamento!—comentó Alanis apenas la pelinegra abrió la puerta de su nuevo departamento.

—Gracias—respondió Leah sonriéndole ampliamente.—¿Qué es eso?—cuestionó Leah observándola sostener en su mano derecha una pequeña maleta de metal. Alanis soltó una risita nerviosa y se encogió de hombros.

—He estado acudiendo a cursos de maquillaje así que como estaba en mi casa totalmente aburrida se me ocurrió la loca idea de que podría practicar un poco todo lo que he aprendido y que mejor que mi mejor amiga para que sea mi modelo—demandó sentándose en la sala. Leah la contempló un segundo sin comprender muy bien a qué demonios se refería su mejor amiga pero seguro no era nada bueno.

Lo que pasa en Las Vegas...|S.Y.|Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora