Capítulo 23

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Había pasado ya tres días desde que habíamos llegado a la base de Gibraltar. No teníamos relación con Overwatch, pero nos recibieron como si fuéramos uno de los suyos. A pesar que ya todos sabían la relación que tenía con Hanzo, a nadie pareció molestarle, de hecho, Hana parecía encantada con ello, haciendo bromas y comentarios cada vez que tenía oportunidad.

Hanzo había vuelto a su papel como entrenador, sin embargo, ahora tenía también a Lena intentando sostener el arco y la flecha al mismo tiempo sin que se cayeran. Aunque no lo demostrara, y siguiera con su habitual semblante taciturno, la verdad es que parecía que Hanzo disfrutaba hacerlo, escuchaba que ellas se reían cada vez que fallaban un tiro, y él de vez en cuando curvaba la comisura de su boca en una sonrisa.

Yo simplemente me dedicaba a contemplarlo desde lejos, mientras fumaba en uno de los balcones.

"Es bueno verlo así" comentó Genji, que estaba a mi lado, sin su casco.

Habíamos hablado sobre lo que pasó en los meses que me fui, era al único que podría confiarle la información de Reyes, pero él no pareció bastante impresionado, se limitó a escucharme y asentir de vez en cuando. Parecía que tenía algo más en la cabeza, no era la forma normal en la que él se comportaba. O tal vez yo lo estaba pensando de más.

"Cualquier cosa es mejor que ver al malhumorado Hanzo" respondí masticando el puro en mi boca.

El menor de los Shimadas suspiró, y nos quedamos en silencio por un rato. Volteé a verlo y recordé la foto de Hanamura. Aún quedaba rastros de aquel joven debajo de las cicatrices, con sus ojos cafés ligeramente rasgados, igual que los de su hermano, pero ahora con un cabello color azabache. 

Sin darme cuenta había empezado a acariciar su cabeza y él me miraba con extrañeza.

"No sabía que te gustaba el verde" comenté para romper el incómodo silencio que se estaba formando.

"¿Viste cuando era joven?" preguntó con asombro en sus ojos y yo asentí "No fue mi mejor época"

"Te veías bastante bien, en mi opinión" dije sonriéndole.

Genji se limitó a mirarme con curiosidad.

"No parece real, el que ustedes estén juntos" comentó después de un rato.

"Si, es extraño incluso para mi" respondí soplando el humo que se había acumulado en mi boca.

"Nunca pensé que el seductor y mujeriego Jesse McCree pudiera caer por un hombre, mucho menos por mi hermano" dijo en broma, pero por alguna razón, sus ojos reflejaban tristeza.

"¿No crees que estás exagerando?" pregunté en retórica, y puse los ojos en blanco.

"No" contestó un poco cortante, algo muy poco común en él.

Hace unos días habia dicho que le parecía bien que nosotros estuviéramos juntos, pero cuando hablábamos o nos reuníamos, el ambiente cambiaba. No quería que fuera incómodo para él, menos aun siendo yo el culpable de todo.

"No debí haberte escondido lo que pasaba" me disculpé "Sé que cuando dijiste que estabas feliz por nosotros solo fue por cortesía ¿Acaso te molesta?"

Él no respondió de inmediato, había empezado a mirar al cielo cuando dio un largo suspiro.

"¿Y qué si lo hiciera? ¿Dejarías de estar con él?" preguntó con una voz casi perceptible.

Esa respuesta me había dejado desconcertado. La verdad es que si él decía que le molestaba, no tenía idea de que podría hacer, dejar a Hanzo no era una opción.

Just Don't [McHanzo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora