No permitiría que nadie dañara a su omega, era por eso que tendría que confesarle lo que había ocurrido hace ya 5 años, algo que había marcado su vida por completo y que no podría revertir, tampoco podría revertir las cosas que pasarían en un futuro cercano.
—Ren, necesitó que me ayudes a ganar tiempo, debo confesarle a Narey todo pero, no puedo dejar que lo encuentren y lo maten, ayúdame, porfavor...— El alfa le suplicaba a su hermano que lo apoyara, el bien sabía que su vida estaba en riesgo pero no le quedaba otra opción, además, era su única familia, no podía negarle nada.
—Te prometo, que los ayudare a salir de esto como tu me has apoyado en todo Misa, nunca lo olviden, porfavor confían en...— El mayor no pudo terminar lo que estaba apunto de decir por ser interrumpido.
—Yo también los ayudare.— Dijo Zelaya frente a los dos alfas, si se trataba de su familia ella no estaba dispuesta a perder, por más que quisieran detenerla su determinación era inmensa como para hacerlo.
Ambos alfas la miraron sorprendidos pero el que más fijaba su mirada en ella era Ren, notaba algo llamativo en su forma de ser, no era la primera vez que trataba con ella y desde ese momento sintió una extraña conexión.
—Nadie debe enterarse de lo que esta pasando, yo hablare con Narey..—
—Yo se que no fuiste tu quien mató a mi padre, no eres esa clase de persona y lo se, pero no será fácil que mi hermano lo crea, así que, es mejor que yo te ayude a limpiar tu nombre y aunque muchas cosas cambien después de esto, nunca dejaré de creer en ti.—
La beta sabía en quien confiar y en quien no, su vida no era del todo tranquila como la mayoría creía, su pasado la había hecho la persona que es y lo fuerte en lo que se ha convertido, pero, la razón es la que ella nunca ha contado pero que pronto tendrá que decir.
Ren no tardo mucho en retirarse después de estar con su hermano, el no se atrevió a confesar nada de lo que pensaba de Zelaya en ese momento ya que no era el indicado pero pronto tendría que hacerlo, mientras tanto Misa estaba frente a la puerta de la habitación del omega decidido a confesarle todo lo que había sucedido.
El alfa se repetía en su mente las mismas palabras desde que decidió decírselo "No lo perderé, no de nuevo" quería creer que aunque todo eso sucediera, el omega no lo abandonaría, pero, posiblemente eso no sería como el esperaba, o al menos no por mucho.
Misa se decidió finalmente por tocar la puerta, cuando Narey le autorizó entrar, se adentro en la habitación mientras lo saludaba con una sonrisa, se sentó a su lado y lo abrazó, el omega se sorprendió con esa muestra de afecto repentina pero se la correspondió ya que sabía que no se la podría negar nunca.
—¿Te sucede algo Misa?— Preguntó Narey al verlo más pálido de lo normal, en su interior los nervios lo estaban consumiendo, sabía que con repetir esas palabras posiblemente no conseguiría nada pero, tendría que intentarlo.
—Narey, hace tiempo que, he tenido que decirte algo...— Misa no estaba preparado tanto mental como emocionalmente para lo que tenía que decirle a su omega, el simplemente no quería dañarlo, no quería causarle más daño del que ya le había hecho, pero tampoco quería y nunca lo dejaría, jamás.
—¿Qué sucede?— Le respondió el omega con el corazón acelerado, no sabía que podría decirle Misa pero por alguna razón lo consideraba malo, era la primera vez que dudaba de el y eso no le agradaba, solo esperaba que no fuera así.
—Yo...— Pero como era de costumbre, siempre había algo que los interrumpía y esta vez no hubo excepción, Zelaya pidió permiso para entrar a la habitación y decirle algo a Misa.
—Hay alguien que te busca.— Dijo para después salir de la habitación seguida por el mayor, el no se esperaba más visitas esa noche pero no fue así tampoco.
Al llegar a la entrada Misa se quedo helado al ver a esa persona en la puerta, tenía meses sin hablar con ella y ni quería debido a todo lo que estaba ocurriendo, pero al igual que el, esa persona tenía cosas que confesarle.
—Milenea ¿Qué estas haciendo aquí a estas horas de la noche?— Dijo el alfa manteniendo un poco su distancia de aquella chica la cual le había traído muchos problemas en el pasado pero, era una de las pocas personas que estaba de su lado.
—Debemos hablar, urgentemente...— Le dijo la beta reflejando su preocupación y nerviosismo ante sus palabras, no estaba lista para lo que a continuación le confesaría.
Ambos prefirieron hablar fuera de la casa para no ser escuchados por nadie, el tema que la beta estaba a punto de tocar era bastante delicado y un poco incomprensible en ese momento para el alfa pero era importante que el lo supiera antes de que pasaran más cosas.
—Ahora ¿Qué quieres decirme?— La beta suspiró y miró fijamente a Misa para luego confesárselo.
—Tu y yo... Somos hermanos...— Esas palabras fueron un golpe muy fuerte para el alfa ya que jamás pensó en escuchar algo como eso, lo cual causaba que empezara a crear conclusiones sobre como eso era posible y sobre el porque nunca lo supo antes.
—¿H-hermanos?— Repitió Misa con su voz temblorosa por la sorpresa, el nunca en su vida se imaginó algo tan grande como eso, algo que le partió el corazón en dos al pensar de lo que había sido capaz su padre todo este tiempo aunque ya supiera como era el.
—Tu padre no solo estuvo enamorado de tu madre, el tuvo una aventura hace mucho tiempo y.. Mi hermano y yo nacimos, nunca supimos sobre todo lo que había pasado pero, al igual que tu, sufrimos mucho, tu padre también nos abandonó a nosotros ya que para el solo éramos un desperdicio de tiempo aunque nos usara como su negocio, al igual que lo hizo contigo y.. Hay algo más que debes saber.. El verdadero asesino de....—
Esa noche estuvo llena de muchos secretos, unos que pondrían fin a muchas cosas en un futuro, incluyendo la relación de Misa y Narey después de una tragedia que los marcaría a ambos, como dicen muchas veces.. Amar, es dar la vida por las personas que aprecias aunque eso te cueste la tuya.
¿Ya no habrían más secretos? ¿Quién de los dos sobrevivirá?
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Hecho a la Perfección [Omegaverse/BL] [EDITANDO]
Roman d'amour[ACTUALMENTE EDITANDO] El amor es un largo camino, que no todos están dispuestos a recorrer. Un omega que se enamoró de un modelo, no imaginó el destino que le esperaba y sin desearlo, consigue un viaje rumbo a su nueva vida, enfrentando un pasado...