Mil estrellas un solo cielo

Ansiedad de media noche

No espero que me tiente lo prohibido
Espero que lo permitido me prive
Espero expandirme dentro en lo consumido
O que me consuma lo que a mi me exprime.

Vista abajo y cayendo en picada
Nota tosca y masca mi moscada
Treta astuta y tiza mi cascada
Casco débil viste mi cáscara.

Tonto por conveniencia y listo en inconvenientes
Lágrimas que corren y sonrisas que reposan
Golpes repentinos y caricias esperadas
Amable a la fuerza y coraje de ser fuerte.

Bajo nuestros pies el cielo azul de fondo nuevo
Y sobre nosotros el camino de la noche antigua
Una vez más cerca el uno de nuestros ceros
Y cada vez nos encontramos más lejos de no ser ninguno.

Por cierto se tiene cuenta lo que ya se encontró
Y se encuentra incierto lo que no se tiene
Atento busco mi razonamiento
Y si se pierde me veo ir a mi razón o me miento.

Una estrofa que me vuela la vida y un verso me encamina la muerte
Un secreto que me esconde un poco más de una respuesta
Un trasfondo de profundidades que se hunde en lo hondo
Y un ruiseñor en silencio que espera cantar la suma de su resta.

Un soñador que multiplica lo que divide
Y un realista que realza lo que desviste
Declina lo que afirmó y luego se va en declive
Y se olvida de apagar la luz de lo que para el existe.

Hice mal de ojo a mi ojo bueno y pereció
Y de mi vista me volví asesino
Juzgué e hice mi juego a vistas del rey
Pensando que ganaría con las aces pero no.

Estruendo de cataclismo y paz de pandemónium
A mí indefenso susurró a robarme el alma
Aguijón de mis tormentos despellejando mi calma
Apocalíptico ser de luz repartiendo mi pan a sus demonios.

Esperando a que vuelva mi primavera
Invierno busco entre todas mis estaciones
Mido mis tiempos y de primas a primeras
Encuentro sintonía de todos mis buscadores.

Busco como ahogarme pero siempre encuentro un desahogo
Trasciendo en mis verdades y trasfundo mis trastornos
Basto de mis penas y dolores que me embisten
Brota de mis gotas y mi mano un verso triste.