—¿Dónde están? Por favor, sólo necesito una ¡Tiene que haber sobrado una!— Decía desesperado el hermoso y femenino omega mientras sacaba y aventaba todo el contenido de su mochila buscando una sola pastilla para contener su celo. —¡No puede ser!— Exclamó, en un grito nada discreto al ver su mochila completamente vacía sin haber encontrado lo que necesitaba. Era un idiota, el dinero que había ganado en su trabajo como mesero después de clases lo había gastado en maquillaje y ropa, olvidándose completamente de guardar la mitad para sus costosas pastillas, las cuales necesitaba cada 3 meses. Su enojo consigo mismo pasó a miedo al darse cuenta que estaba en la escuela, rodeado de Alfas y su cuerpo pronto comenzaría a emitir las atrayentes feromonas. Quiso salir corriendo a su casa, si lograba evitar a todos los Alfas de la calle, entonces estaría a salvo; pero se detuvo a levantar todas las cosas que había dispersas en el salón de manera desordenada. Tardó varios minutos en recoger todo y cuando por fin iba a tomar su mochila para salir, recibió una llamada.
—¿Qué?— Contestó el omega de manera exaltada, nerviosa y apresurada asustando al otro joven en la línea.
—¿Qué te pasa Chul? ShinDong y yo te estamos esperando para empezar a ensayar ¿Dónde estás?— Contestó el chico, extrañado por la forma en que el mayor recibió la llamada.
—Ocupado ¿Sí? No puedo ir a ensayar— Y no podía, en primer lugar, por todos los alfas de la escuela y en segundo lugar, porque ShinDong era un Alfa. Con aquel enorme tamaño a comparación del tamaño del omega, no tendría problemas en someterlo, y peor aún, en morderlo.—¿Qué demonios? ¡Ya en una semana es la competición y no piensas venir! ¿Quién te crees? ¡Siempre quieres estar al medio y ni siquiera sabes bailar!— DongHae comenzaba a molestarse, no era la primera vez que el omega faltaba a los ensayos sin dar un motivo razonable. Esa fue la gota que derramó el vaso, el chico estaba tan furioso que podría haber ido por HeeChul en donde quiera que estuviese y arrastrarlo por su larga y cuidada cabellera para obligarlo a ensayar.
El omega estaba a punto de contestar al insulto de su dongsaeng, pero en ese momento sus pasos fueron detenidos de golpe al chocar con el fuerte pecho de otro joven vestido con un arrugado uniforme de judo. Sintió que el alma se le cayó a los pies, su ser entero se petrificó olvidando por completo los gritos, quejas e insultos que DongHae continuaba escupiendo en la llamada. Tragó saliva con miedo y cuando por fin su cuerpo respondió, levantó la mirada encontrando los severos ojos amenazantes de un Alfa más grande que él.
—Ay no...— Susurró el omega antes de emitir un quejido de dolor cuando las fuertes manos del más alto lo tomaron por los hombros y lo empujaron hacia la pared. La espalda del omega chocó con fuerza provocando que una mueca de dolor tomara lugar en su delicado rostro, sintió un nudo formarse en su garganta al estar atrapado entre el cuerpo del Alfa y la pared. Su tez palideció por completo cuando los ojos llenos de deseo del más alto se dirigieron de manera amenazante a sus labios y su cuello. —N...No... ¡Déjame!— Recobró la fuerza de sus brazos e intentó empujarlo inútilmente por el pecho pero el Alfa no se movió ni un centímetro, en cambio, acercó sus labios rozando el cuello del mayor con sus colmillos. En sus ojos ardía la lujuria, las feromonas del omega eran irresistibles... Después de tanto tiempo, aquel precioso cuerpo con el que había fantaseado durante sus noches de deseo, sería totalmente suyo para siempre.
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MI JUGUETE (KangSiChul)
Fanfiction-¿Dónde están? Por favor, sólo necesito una ¡Tiene que haber sobrado una!- Decía desesperado el hermoso y femenino omega mientras sacaba y aventaba todo el contenido de su mochila buscando una sola pastilla para contener su celo. -¡No puede ser!- Ex...