De milagro la maestra no ha llegado, lo cual agradezco.
Voy directo a mi lugar y puedo sentir por primera vez lo que es ser parte de un salón como tal, sin que nadie me preste atención mas que la necesaria al pasar, esto de llegar temprano no esta tan mal.
Me siento en mi asiento desde el cual puedo ver todo el salón por estar hasta atrás y en ese momento me doy cuenta de que... Daniel, el muchacho de la puerta se sienta a 2 filas a la derecha de mi.
-¿COMO ES POSIBLE QUE JAMAS LO VI?- pense
Aprovecho que Daniel esta distraído platicando y lo observo un poco... solo para ver bien como es... no hay otra razón para mirarlo.
Tiene un lindo cabello castaño con rulos, el esta de perfil y puedo notar unos lindos labios carnosos...
-¡ÁMBAR!, DEJA DE PENSAR ESAS COSAS, SOLO TE HABLO UNA VEZ- me reprocho mi mente
Cuando vuelvo a posar la mirada en Daniel me doy cuenta que el esta volteando, trato de apartar la vista lo mas rapido posible pero no lo logro y me sonrie de nuevo, lo siguiente que hace definitivamente no lo esperaba, se para de su asiento y se dirige al que esta en medio de nosotros.
-Hola Ámbar es la primera vez que veo que nos pelas- dice riendo
Que tiene de gracioso eso, ellos son los que no me pelan.
-No entiendo que quieres decir, normalmente nadie me habla- respondo agachando la mirada hacia mis manos.
La sonrisa desaparece de Daniel.
-Bueno tal vez tienes razón, siempre llegas tarde así que cuando estas aquí esta la maestra y no da tiempo de poder platicar contigo, pero quiero que sepas que la intención siempre la tuve- dice así sin mas como si hablara del clima o al menos eso pienso hasta que se empieza a sonrojar... Dios.
-Oh claro, debería llegar temprano he- como si yo tuviera la culpa de llegar tarde.
-Jajajaja no temprano temprano pero si al menos antes de que llegue la maestra, pero en fin ahora se pudo, asi que me presento formalmente, me llamo Daniel Wood, tengo 15 años y te ofrezco mi mas sincera amistad- dice mientras extiende su mano hacia ami, ofreciendola en un saludo.
-Mucho gusto Daniel Wood, yo acepto tu amistad- acepto su saludo y fijo mi mirada en nuestras manos.
-¿Y cual es tu nombre completo?- pregunta, que chismoso
-Ámbar Rose Anderson, debes a ver escuchado esos apellidos muy seguido en la boca de la maestra- respondi
-Tomen asiento, disculpen la demora- Grita la maestra al entrar interrumpiendo lo que diría Daniel.
El se va a su asiento haciendo una seña dando a entender que después continuamos hablando.
La clase comienza y la maestra empieza a anotar algo en el pizarron, lo cual debo anotar en mi libreta si quiero pasar los examenes, al ser el ultimo año de la Zona C las clases se ponían un poco mas pesadas.
...
Las horas se fueron rápido y cuando menos lo espero faltan 5 min para las 3 de la tarde.
¡LA HORA DE SALIDA!
Empiezo a guardar mis cosas y cuando suena el timbre del gran reloj de la pared me paro inmediatamente y salgo del salón, la mayoría a esa hora apenas comienza a guardar sus cosas asi que que a la única que me encuentro a la salida es a la maestra que me mira con cara de pocos amigos.
-Impuntual para llegar pero puntual para irse señorita Rose- dice en voz baja la maestra para que solo yo la escuche al pasar por mi lado y se va.
Me recargo un momento en la pared alado de la puerta pensando en lo que acaba de pasar.
De verdad la maestra me odia, todo por culpa de Malia.
Cuando me dispongo para caminar hacia la salida choco con un pecho y provoco que el dueño suelte el libro que llevaba en las manos.
-Disculpa disculpa no me di cuenta- digo mientras recojo el libro y levanto la mirada para darle el libro a su dueño cuando veo a Daniel.
-No te preocupes, crei que me estabas esperando- tomo su libro.
-Amm ¿esperarte?- respondi
-Te dije que luego seguíamos platicando, ¿acaso se te olvido?, bueno vamos yendo a la salida antes de que se sature-
-Creo que si, perdón y claro te apoyo en la idea- empece a caminar por primera vez en 3 años con alguien a la salida, creo que no era tan malo empezar a tener amigos.
Tengo que aceptar que era raro, mientras caminamos a la salida me entero que como la mayoría de los alumnos, Daniel vive para el contrario de donde vivo, sus padres trabajan en una fabrica de textiles y tiene 2 pequeños hermanos los cuales son cuates y como sus dos papas trabajan si logran tener la comida suficiente para los 5, lo regresaron a la misma edad que yo y le toco la suerte de que sus hermanos aun no habían nacido asi que no vivieron la pesadilla de vivir lejos de sus padres.
Sinceramente me sorprendió el hecho de que se acuerde cuando lo llevaron y lo que vivió, yo contra penas me acuerdo de cuando me regresaron, como llegaron ese dia por mi y me dijeron iras con tu familia tu misión ha empezado... ¿oh terminado?, no recuerdo bien.
Daniel es un buen chico, tiene varios amigos, pero al parecer soy su primera amiga, no puedo negar que eso me hace preguntarme si buscara algo mas conmigo, no lo hace eres demasiado débil como para gustarle a alguien, nadie quiere estar protegiendo ah alguien todo el tiempo de todo.
-Nos vemos mañana Daniel- me despido y me dirijo a mi casa.
-Hasta mañana- responde y se queda viéndome mientras me voy, eso es raro.
Lo que me agrada del camino de regreso a casa es que no me encuentro con Malia, ya que los alumnos de la Zona D salen 2 horas mas temprano, lo se es injusto pero a muchos los comienzan a obligar a trabajar para que se acostumbren, así que tienen que salir temprano para ir a las fabricas, al menos medio tiempo.
Solo uno que otro estudiante va para el mismo lado que yo, el cielo se ha tornado un amarillo mas intenso, casi llegando al naranja lo cual indica que ya es tarde, el calor es mas intenso así que busco la mayor sombra posible que me puedan brindar los edificios y casas de las cuadras.
...
-¡Ya llegue ma... Eva!- grito dejando la mochila encima de un banco.
Mi madre entra en la sala, me mira de abajo a arriba y pone una cara de compasion.
-¿Otra vez te caiste?, ten mas cuidado siempre es lo mismo, vamos cambiate- dice, lo se es raro notar esa preocupación en ella, no aceptara que soy su hija pero no es desconsiderada.
Cuando me llevaron mi madre trabajaba en una fabrica textil, lo cual ayudo para que tuviera varios cambios de uniforme, al menos para salir de casa limpia todos los días.
Subo las escaleras hacia mi cuarto y me detengo en el espejo.
Observo mi cabello sucio, para nada negro, se ve mas como un gris, enredado y mis cachetes llenos de polvo.
Esto es horrible, debes empezar a defenderte, eres mejor que ella, ve en lo que te has convertido una debilucha que humillan a su antojo- ¿pensé?
¡Gracias amigos por leer!
¿Que les ha parecido la historia?, espero les este gustando como a mi <3
Montse MC :3
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Perdidos
Genç KurguHan pasado años desde el termino de la cuarta guerra mundial, un tiempo muy duro para la mayoría de las personas, los niños fueron separados de sus padres con la razón de protegerlos algunos regresaron, otros solamente se les dejo de esperar, el tie...