Capítulo 28. Nuevos integrantes.

1.1K 71 16
                                    

—Sigo sin poder creerlo. -Digo sonrojada al verlo de frente- ¿Cómo lo hiciste?
—Un buen mago nunca revela sus secretos.
—Algún día me lo dirás. -Digo juguetona, al acomodarme en su pecho y continuar viendo la serie desde su cama, estamos abrazaos mientras él acaricia mi cintura con su pulgar-
Después de la cafetería nos vinimos a su casa y hemos estado aquí desde entonces, abrazados en su cama viendo How I Met Your Mother. Tanto café me dan ganas de hacer pipí, pasé a su baño, me estoy lavando las manos hasta darme cuenta de ver unas pastillas a un lado de sus lociones y desodorantes. Tomo el envase y leo "antidepresivos", la piel se me enchina y lo coloco de nuevo en su lugar, salgo al cuarto.
—¿Quieres ordenar comida china para cenar, amor? -Dice al ponerle pausa a la serie y verme salir de su baño-
—Harry. -Pronuncio su nombre con delicadeza- Creo que vi algo que no debía.
—¿Qué cosa?
—Vi unas pastillas. -Digo un poco tensa al irme acercando a él, se pone un poco tenso y agacha su cabeza- Harry...
—Ya no las tomo. -Dice de inmediato-
—¿Las tomabas? -Pregunto con temor al sentarme en la orilla de la cama frente a él-
—Fue muy difícil seguir con todo lo que sucedía. -Admite con un poco de vergüenza, lo tomo de la mano-
—Lo lamento tanto, no merecías pasar por eso. -Digo al verle a los ojos- Y no volverás a pasar por eso.
—Espero que no. -Dice al estrujar de mi mano- ¿Entonces sí a la comida china?
—Comida china será. -Digo al sonreírle-
Esperamos una media hora hasta que llegara, comimos exquisitamente, nos subimos a duchar y cepillar los dientes, todo lo básico antes de irnos a dormir, que claramente Harry no tenía esos planes. Me termino de poner mi camisón cuando siento su tibia presencia detrás mío, me abraza por detrás con sus fuertes brazos y comienza a besar mi cuello lentamente, cierro mis ojos al placer sentido.
—Te extrañé tanto. -Me susurra al oído, baja sus manos al final de mi camisón que es ligeramente debajo de mis glúteos y comienza a subirlo, no lo detengo en lo absoluto-
Extiendo mis brazos para que me lo quite sin problema alguno dejándome solo en bragas, me volteo para verlo de frente, sonríe como pocas veces al ver mi cuerpo de nuevo después de tanto tiempo, me acerco a sus labios al no querer esperar más. El beso es lento y conciso, sus labios son unos de los placeres de probar en esta vida, él ya está sin playera, así que comienzo a bajarle su bóxer. Al él estar desnudo frente a mi, me carga a su cintura para dejarme caer en la cama, baja sus manos a mis bragas para deshacerse de ellas con cierta agilidad.
—¿Sigues tomando las pastillas anticonceptivas? -Pregunta agitado antes de pararse a buscar un condón, yo asiento segura y sonríe satisfecho-
Volvemos a esa guerra de lenguas con pasión y más excitación, rodeo con mis piernas su cintura para solo esperar a que lo haga. Siento toda su electricidad y su vibra recorrer por mi cuerpo, me siento conectada por fin después de tanto tiempo. Baja su mano a jugar con mi clítoris y hacerme gemir, besa mi cuello mientras lo hace y me derrito. Lo siento adentrarse lentamente hasta que lo logra con fuerza, suelto otro gemido fuerte, comienza a moverse entrando y saliendo con fuerza mientras yo gimo, él lo hace por igual.
—Te amo. -Le susurro al oído, alza su mirada a la mía-
—Te amo. -Me repite agitado-
Continuamos cogiendo, es exquisita la manera en la que se mueve, lo gozo con placer. Ambos llegamos al orgasmo soltando un último gemido y caer rendidos en la cama.
Mi alarma suena fuertemente muy temprano, ¿Es mi alarma? No, es mi celular sonando, suelto un quejido y escucho a Harry reír, abro un ojo con esfuerzo y visualizo la hora, ¿7:00 a.m? Joder, ¿Quién marca a esta puta hora? Observo a Harry con sus rizos mojados saliendo del baño antes de irse a trabajar, yo con molestia como mi celular y contesto.
—¿Sí? -Digo brusca al pegar el móvil a mi oreja-
—Miller. -Reconozco la voz de Mark al otro lado- Buenos días.
—¿Qué es? -Pregunto un poco molesta-
—¿Ni unos buenos días para tu jefe? -Pregunta sorprendido- Bueno, ni modo. Quiero que vengas a Magnium dentro de dos horas, a las nueve en punto.
—¿Puedo saber por qué tan temprano? -Me quejo-
—¿Estás desobedeciéndome? -Pregunta un poco rudo y yo bufo sin palabra alguna- Eso pensé querida, aquí te veo. -Me cuelga-
Suelto un gruñido y lanzó mi celular a la alfombra, me estiro y siento en la orilla de la cama, Harry me observa.
—¿Todo bien? -Pregunta al estar abrochándose su camisa-
—No lo sé. -Digo un poco fastidiada- Buenos días. -Le sonrío tratando de quitar esta apatía, se acerca hasta mi para darme un beso-
—Buenos días, dulzura. -Dice tratando de sonar normal tras mi llamada- ¿Saldrás?
—Al parecer sí. -Digo al alzarme de hombros disgustada a la idea y ponerme de pie- ¿Ya desayunaste? -Pregunto y niega- Te acompaño.
Bajamos para desayunar algo ligero, platicamos sobre lo que sea, porque cualquier tema con Harry no es lo que sea. Me cambio a algo de ropa que tenía Harry mía en su casa. Nos despedimos de un plasmado beso en los labios, se siente tan irreal decir que somos novios, o tan solo pensarlo me pone nerviosa. Se retira a trabajar y yo me subo a mi carro para manear rápido al trabajo.
—Creí que a mi había sido el único que me había despertado tan temprano. -Me dice Henrie al llegar por detrás de mi y esperar también el ascensor-
—Hola. -Le sonrío y nos abrazamos fugazmente- Ya ni me digas.
—¿Tienes idea de qué se trata? -Pregunta y niego, las puerta se abren y nos adentramos-
Subimos hasta el piso donde se encuentra la oficina de Mark y nos dirigimos ahí, ya están todos; Jacob, Max, Louis, Liam y Chad. Nos voltean a ver al entrar para saludarnos, falta Mark.
—¿Ya están todos? -Pregunta nuestro jefe al asomarse por la puerta, volteamos a verlo y asentimos- Perfecto, síganme.
Salimos bajo sus ordenes a seguirlo por el edificio, nos está guiando a la sala de conferencias que es más grande que su oficina, se adentra y nosotros después. Pero nos damos con la sorpresa de ver a tres personas ya dentro, de pie viéndonos por igual. Mark espera a que nos adentremos y cierre la puerta el último.
—Bien. -Habla Mark, por alguna razón no tengo un buen presentimiento, y al parecer los demás tampoco debido a sus rostros- Iré directo al punto, ella es Agnes Allamand. -Señala con respeto a la primera mujer en la fila con peculiar nombre, de tes morena, afroamericana podría decir, tiene su afro agarrado en un chongo y viene con un atuendo adidas como si hubiera estado ejercitando, ella nos sonríe- Nate Wells. -Señala al siguiente hombre en la fila, nuevamente de tes morena como Agnes, o inclusive como Max y Chad, viste de una playera negra y jeans, él solo asiente con su cabeza- Y Elle Colligan. -Una mujer rubia de tes blanca, con cabello más corto que Harry por seguro, inclusive trae la parte de atrás rapada y lo de arriba un poco despeinado. Viste de una chamarra de cuero y unos jeans ajustados, desde ahora me atrevo a decir lo guapa que es, un rostro exageradamente bello para mi parecer, su nariz fina al igual que sus labios y sus tremendos ojos azules- Ellos serán sus nuevos compañeros o como ustedes quieran llamarle. -Dice Mark con una sonrisa satisfecha, oh no, no me gusta por dónde va esto- Debido a que se fueron cinco crimínales de este equipo, decidí compensarlo con tres. -Dice al señalarlos- Así que denles la cordial bienvenida a los nuevos integrantes del equipo.

La Criminal. Tercera Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora