La Criminal. Tercera Parte.

Capítulo 8. Aún hay esperanza.

—¿¡Dónde está mi hermano!? -Grito como desquiciada mientras me trata de calmar el doctor que ha entrado de volada al cuarto al ver por el vidrio que tomé de rehén a una de las enfermeras, la tengo agarrada del cuello con una fuerza que ni yo creí que tenía, apunto una jeringa a su cuello- ¿Dónde está Jonathan? ¿Por qué no me dejan verlo?

—________ por favor. -Me dice con temor el doctor al alzar sus manos con cautela- Por favor baja esa jeringa, por favor. -Hago caso omiso con mi respiración profunda- _______ no querrás que traiga refuerzos.

—¡Refuerzos mis polainas! -Grito aún más fuerte estando de pie junto a mi cama agarrando a la enfermera, no sé porque me siento tan fuerte, siento como si pudiera pelear como una profesional, digo, mi cuerpo no está tan marcado en vano, en fin, me quito de golpe los cables y todo a lo que estoy conectada, aún con la enferma en mis brazos, el doctor se trata de acercar y acerco más la jeringa a su cuello, la enferma suelta un grito- Ni un maldito paso más.

—_______ por favor, te juro que tendrás respuestas, ahora estás así por el medicamento, es normal que te ponga agresiva y haya cambios de humor radicales en tu personalidad. -Me explica algo que me importa una mierda, de repente entran más doctores a la habitación y me altero de inmediato, incluso entran dos policías- ¡Esperen! -Les ordena el doctor en mando, todos paran de inmediato al verme tan decidida con la aguja en mi posición- Señorita Miller por favor. -Me ruega-

—¡No! -Grito molesta- ¡Déjenme ver a mi maldito hermano maldita sea!

—________. -Me llama una voz nueva en la habitación, todos inclusive el doctor volteamos a la puerta a esa ronca proveniente voz, es mi doctor Harry, quien ve aterrado la situación, comienza a caminar hacia mi, yo pongo presión en la enfermera haciendo que se queje, lo hago parar de inmediato y alza sus manos con temor- _________ por favor, te lo estoy pidiendo yo, Harry. -Me dice con temor y amabilidad, por alguna razón Harry es el único que me inspira confianza, confío en él por la forma en la que me ha tratado las últimas semanas, lo veo dudosa- Por favor querida, yo sé que estás desesperada pero créeme que no hay personas que más te queramos ayudar que los que estamos en ésta habitación ahora mismo. -Me dice, yo bufo incrédula- ¿Confías en mi? -Me pregunta, joder si lo hago pero no quiero aceptarlo- Te juro que si la sueltas, obtendrás respuestas, solo tienes que confiar en mi, nadie te quiere hacer daño linda. -¿Linda? Es la primera vez que mi doctor me habla así, siempre fue muy propio y profesional conmigo, me hace ablandarme por dentro la forma en la que me habla, lentamente voy dejando a la enfermera ir, Harry sonríe con ternura- Eso es. -Dejo ir por completo a la enferma y ella corre de inmediato con los demás, yo continúo viendo los ojos verdes del doctor Harry, lo veo mover sus labios y decirme algo.. "Gracias" y algo más, no entendí bien, pero me ha dicho gracias y algo más, ¿Algún apodo? ¿Por mi nombre? No tengo idea, pero en cuanto me pierdo en esos ojos verdes tan bellos que hasta ahora los he apreciado, siento una inyección en mi brazo, estaba tan distraída que el otro doctor me ha inyectado un sedante al parecer, la última imagen que tengo es ver a Harry volteando a ver al otro doctor muy molesto, yo me desvanezco por completo.

Narrador.

—Harry tranquilízate por favor. -Le pide John mientras lo detiene de querer decirle o hacerle algo al doctor-

—Oficial, no me haga arrepentir de haberlo dejado participar en la recuperación de la señorita Miller. -Defiende el doctor-

—¿No ha visto lo que ha hecho joder? -Le pregunta Harry bufando- Le he dicho a _______ que puede confiar en mi y la ha inyectado. -Reclama al señalar de nuevo el cuarto de su dulzura, donde ya la han puesto en su cama-