Luthor y Super

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Solo sentía como mis piernas me temblaban, no respiraba, Lena lo sabía todo, literal todo.

—Kara estás bien

—Yo necesito sentarme un momento

Lena me ayudó a llegar hasta el sofá, me desabroché los primeros botones de mi camisa, me recosté en el respaldo, me quite los lentes y puse mis manos en mis ojos, lo único que pasaba por mi cabeza era que fui tan descuidada. Lena se sentó a mi lado y me dio un vaso de agua.

—Kara ten toma un poco de agua, respira todo va a estar bien, no le diré a nadie sobre tu secreto, déjame hablar por favor.

Solo pude asentir, me enderece en mi lugar para ver a Lena a los ojos.

—El día que me hiciste la entrevista sobre los alienígenas y te pedí que probaras el dispositivo, después de que te marchaste, el dispositivo comenzó a emitir una luz roja, lo revise, por dentro estaba quemado, como si se le hubiera aplicado mucho calor, con los días puse más atención en tí, no te pequeñas cosas como que desaparecias poniendo excusas tontas, y cada que te ibas aparecía Supergirl, pero eso no evitó que pudiera conocer tus dos personalidades, la dulce Kara, tímida, torpe y a Supergirl, segura de si misma, fuerte y un poco altanera.

Lena se acercó poco a poco, con una de sus manos me acarició mi mejilla, hasta que terminó la distancia entre las dos, comenzó con un roce de labios, para pasar a un beso tierno que se volvió desenfrenado, hambriento, Lena paso su lengua por mi labio superior pidiendo permiso para acceder a mi boca, le permiti el acceso a mi boca, nuestras lenguas se encontraron y comenzó una batalla para ver quién tendría el control.

Caímos acostadas en el sofá, Lena quedó sobre de mi, terminando de abrir mi camisa, pasó sus dedos por el escudo de la casa de El.

—Esperanza es lo que siempre siento cuando veo esta S en tu pecho, eres tan sexy con tu traje de Supergirl

No pude contenerme más, la levante de las piernas, Lena las enredó en mi cintura, mientras caminaba a mi habitación, ella me besaba, sus manos las tenía en mi cabello, yo trataba de bajar el cierre de su vestido, al no poder bajar el cierre desgarre su vestido, al llegar a mi habitación baje a Lena de forma lenta, besaba su cuello con devoción, acariciaba sus piernas sin detenerme, su piel es tan suave.

Lena se separó de mi ayudándome a quitarme la ropa, su vestido se lo termine de quitar aventandolo por algún lado de la habitación, caímos en la cama, Lena estaba sentada a horcajadas en mi cadera, nos vimos por un a los ojos, Lena paso una de sus manos por mi mejilla.

—Lena quiero decirte que soy virgen, nunca he estado con nadie

—shhhh tranquila cariño, seré delicada

Lena me volvió a besar de forma delicada, fue bajando sus besos por mi mandíbula, pasando por mi cuello hasta llegas a mis pechos donde quitó mi brasier, paso su dedo índice por el medio de mis pechos, para luego pasarlo por el contorno de ellos, beso el inicio de mi pecho derecho para pasar su lengua por mi pezón, lo succionó y jalo un poco con sus dientes provocando que emitiera un gemido, su otra mano acariciaba mi otro seno, fue bajando su mano por mi abdomen acariciándolo, como si quiera recordar este momento por el resto de su vida, pasó sus labios por mi abdomen bajando lento hasta llegar al borde de mi bragas, beso uno de mis muslos y luego paso su nariz por mi entrada, tomo los lados de mis bragas y las bajo hasta sacarlas, fue subiendo por mis piernas besandolas y lamiendolas para después pasar sus manos, llego hasta mi intimidad pasando sus dedos haciendo que gimiera fuerte, levantó su mirada que se encontró con la mía para darle con ella la aprobación de que siguiera.

Bajo se boca hasta mi entrada, separó mis labios para dar paso con mi clítoris, paso su lengua desgustando mi botón, lo succionó, lamió y soplo en el causando que por mi cuerpo pasará una descarga eléctrica, no pude contener otro gemido más, paso su lengua por mi entrada metiéndola lentamente, esto se sentía tan bien, pase una de mis manos por su cabello, Lena sacó su lengua para sustituirla por sus dedos pasándolos por mi entrada ya bastante húmeda, me penetro con un dedo, sentí un poco de dolor para después empezar a sentir placer, comenzó con un lento vaivén que se fue intensificando, luego metió otro dedo en mi y las penetraciones se volvieron más rápidas, duras y contundentes, mis gemidos eran cada vez más fuertes.

—Lena estoy apunto ahhhhh, más rápido amor

Lena subió por mi cuerpo y me besó en el momento en que yo llegaba a mi primer orgasmo. Lena se separó de mi, viendo con su penetrante mirada me dijo

—Kara te amo, eres lo mejor que me ha paso en mi vida no me alejes de tí

Pase mis brazos por el cuello de Lena atrayéndola a mi para besarla

—Yo también te amo Lena

Nos volvimos a fundir en un beso que decía todo lo que sentíamos y que con palabras no podíamos decir.

(SUPERCORP) HUMANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora