Mi Mala Adicción

Capítulo 40: Mi vida entera te daré

- C A L L E

(+18)

- A quién no le puedes corresponder? - al terminar la llamada me gire y Poché estaba ahí, recargada en el marco de la puerta

- Amor cuanto tiempo llevas ahí? - le pregunte un poco nerviosa

- Lo suficiente como para haber escuchado que alguien te está pretendiendo - me miró mal y camino hacia mi tomándome del rostro

- Aún estas desnuda Poché - reí leve

- Alguien te está pretendiendo? - pasó los mechones de mi cabello atrás de mí oreja

- Puedo explicártelo amor ¿Me dejas? - la tome de la cintura

- No hace falta amor, confío en ti y sé lo mucho que me amas - depósito un corto y suave beso en mi frente

- Vaya....pensé que te pondrías como una loca - reí mirándola a los ojos

- Ush no estoy tan loca pero como no ponerme así si quieren robarme al amor de mi vida? - hizo un puchero, al "amor de su vida" sentía como mis latidos se aceleraron al escuchar esas palabras

- Y no lo harán - la pegue a mí y bese su abdomen pues yo estaba sentada y ella de pie, mis labios quedaban a esa altura

- Mejor demuestrame lo mucho que me amas - se sentó en mi regazo enredando sus brazos en mi cuello y sus piernas en mi cintura

- Pero de verdad quiero que me dejes explicarte, quiero que confíes - roce mis labios con su cuello haciendo que sintiera mi respiración provocando que su piel se erizara

- Me....mejor hablamos después y ahora solo....- inclinó su cabeza hacia atrás cerrando sus ojos

- Ahora solo...que? - pase la punta de mi lengua sobre su cuello

- Hazme tuya Calle, a...ahora - enrede uno de mis brazos en su cintura cargandola para luego acostarla quedando yo arriba de ella

Una de mis manos bajo a su intimidad mientras la otra seguía en su cintura, separé sus piernas e introduje dos dedos comenzando a moverlos por dentro haciendo que ella se arqueara, solto un suspiro enterrando sus uñas en mi espalda. El ritmo en el que entraba y salía de ella era cada vez más contaste, comenzaba a sentir su sudor, el calor de nuestros cuerpos provocando el sudor, ella comenzó a moverse aumentando su satisfacción, sus movimientos cordinados con los de mis dedos.
Me acerqué a ella y nos besamos con frenesí, estábamos realmente prendidas, ambas nos deseábamos ya desde hace tiempo, nos necesitábamos.
Me separé de ella sintiendo como ella había atrapado mi labio inferior entre sus dientes, saque mis dedos de ella y baje mis labios a su pelvis hasta encontrarme con su intimidad, mi lengua jugaba en ella provocando que tomara mi cabello acercándome más a ella adentrando mi lengua aún más, tome sus piernas y las levanté colocándolas en mis hombros mientras que mis manos subieron a sus senos a frotarlos.

- Ahhh...Calle!! - me encantaba que se dejará llevar por mi, me satisfacía verla así, gritando mi nombre con placer, ella de vino, sonreí y volví a incorporarme con ella besándola cortamente

- Me encanta la manera en la que me haces el amor - sonrió con la mirada encendida

- Toda una vida soñe contigo - acaricié su suave rostro