Capítulo 62: Cosas Fáciles

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- P O C H É

- Ay querida, será mía, ya sea a la buena o a la mala - mordió su labio inferior

- Pero por supuesto que no, estás loca si crees que voy a permitir que eso pase - la pegue contra la pared mirando como se dibuja una sonrisa en su cara, aggg que arrogante

- Dicen que un tornillo me falta asi que cuidado Pochesita - sonrió dándome una pequeña palmada en la cara

- A mi no me toque y mucho menos me amenaces - le aventé el brazo provocando que se golpeara con el mesón

- Aggg, tú a mí no me vas a decir que hacer y cuidado con lo que dices ¿Okay? - me tomo del blusón y me puso contra la pared aplicando fuerza

- No! Matu sueltala!! - Calle se puso detrás de ella tomándola de los hombros pero seguía sin soltarme

- Que le sueltes!!! - intento jalarla pero le dio un fuerte golpe en el rostro con el codo haciendo que Calle cayera al piso provocando que comenzará a sangrar

- Calle!! - le di una patada en el vientre sacándole el aire y alejandola, sin importarme la estatura me lancé contra ella tirándola y empezando a darle bofetadas

- Poché detente - escuché a Camila pero la ignore

- María José! - sentí los brazos de Lauren alejándome de ella

- Que hacen? - las mire mal

- No lo hagas peor -

- Ya dejen de tenerle miedo y sueltenme - me safe de su agarre

- Tus amigas tienen razón Poché, lo has....hecho peor - se quejo levantándose del suelo con dificultad

- Lo dudo mucho - bufe y fui a donde Calle levantándola y ayudándola a ir al sofá, fui a la cocina por hielos y regrese con ella colocándoselos en la nariz

- Calle disculpame, sabes que te amo y lo que menos quiero es hacerte daño - Matu se acercó

- Matu, lárgate y porfavor ya dejamos en paz, nada de lo que hagas me alejara de Poché ¿Okay? Ahora vete - dijo Calle sosteniendo los hielos mientras Ramón comenzaba a gruñirle

- Perro estupido, pues ya veremos - se alejó, miró a Lauren y a Camila comenzando a reír

- Y ustedes, ni crean que se han librado de mi porque aún tengo toda esa información a mi poder - les dedico un guiño

- Se acabó, ya no tienes nada contra ellas - acomode a Calle y me levanté acercándome a ellas

- Enserio crees eso? Por dios María José, ¿Acaso no escucharon lo que dije al llegar?, La memoria que tienen no contiene absolutamente nada - soltó una carcajada

- Si, lo escuché pero algo me dice que tú no eres muy lista como para haber traído la memoria real contigo - sonreí torciendo la mirada

- Que? - comenzó a revisar todos su bolsillos

- Como dije, algo me dice que tú no eres muy lista - le mostré la memoria la cual había sacado durante el forcejeo, era obvio que la traería pues ya no confiaba en nadie y todo este tiempo ella la cargaba

Mi Mala Adicción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora