PARTE 3 LOCURA

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Pov Jae

Existe una palabra para definir el momento en que la fantasía y realidad se mezclan: locura

Llevo exactamente quince minutos desde el momento en que Hanna comenzó hablar acerca de medidas que la empresa tomaría a partir de su cargo.

Pienso que si escucho quince minutos más a Hanna me volveré loco, como podría alguien tan loca como ella estar cargo de la vicepresidenta. Es que si alguien me lo contara me reiría a carcajadas limpias.

Un codazo en mis costillas me saca de mis cavilaciones, levanto mi mirada perdido.

¿Qué es lo que estaba pasando?

¿Porque todos estaban viéndome?

Me giro a verme a Min esperando una ayuda, pero el muy traidor solo esquivo la mirada.

–Señor Kim–dice Hanna. Se encuentra bien–una sonrisa se extiende en sus labios pero lo cubre con su mano ocultándolo.

Me alegraba saber que se divirtiera con mi desdicha.

–Si–conteste.

Después de ese corto intercambio de palabras, volvimos a reanudar la junta; no tenía la menor idea de lo que se dijo en aquella hora, mis pensamientos estaban en escapar de Hanna y buscar la carta.

Eso es exactamente lo que hice cuando la castaña dio por terminado todos los asuntos importantes; me escabullí a la salida, escuche a mi mejor amigo llamarme pero fingí que no escuche y casi corrí por el pasillo.

–Señor Kim–grito Dara cuando nos chocamos por accidente. La sujete en de la cintura ayudándole a pararse en sus propios pies.

Nuestras miradas se encontraron y la vi sonrojarse. Tierno pensé para mismo. Cuando la ayude a la enderezarse mis amigos estaban parados en el pasillo mirándonos. Junsu sorprendido, Yoochun y Min con una sonrisa divertida y Yunho tenía el ceño fruncido.

– ¿Estas bien, Dara?–pregunte.

–Sí. Si Jaejonngie–susurro arreglándose la falda. Cuando se dio cuenta que me había hablado cariñosamente sus mejillas se tiñeron de rosa. Avergonzaba muy avergonzada.

–Puedes llamarme como quieras–dije palmeando su espalda y sonriendo amigablemente. Nos conocemos desde hace bastante tiempo. Además teníamos la misma edad y la consideraba una amiga.

Yunho se aclaró la garganta y eso me saco de mi momento de ensoñación. Había estado viendo a Dara y ella me había estado viendo a mí.

–Deberías tener cuidado–exclama Hanna. Ella está a mi lado arreglando mi corbata y mi traje. Eres tan despistado–agrega con una sonrisa.

Ruedo los ojos y suspiro. Pensé que mantendríamos nuestra amistad pero ello no estaba por ocultarlo.

–Fue un accidente–gruñí exasperado

–Sí. Claro–soltó una pequeña risita no creyéndome.

–No me contaste nada acerca de ser la vicepresidente–demande. Se te olvido convenientemente.

–Oh. Lo olvide.

Cuando me di cuenta que todos estaban escuchándonos, decidí quedarme en silencio. Entonces recordé la carta.

–Dara–exclame. Si wan llego–pregunte.

–Oh. Si señor iba a decirle eso mismo.

Mi corazón comenzó a palpitar fuertemente dentro de mi pecho, tenía que ir  por la carta o sino jamás en la vida podría volver a Yunho a los ojos.

ENAMORADO DE MI MEJOR AMIGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora