PARTE 16 PORQUE SI TENGO QUE PEDÍRTELO, YA NO LO QUIERO

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Pov Jae

Yo creí que todo iba a resultar para nosotros... Pero no. No lo fue. No paso. No se pudo. 

No te voy a pedir que me des un beso. Ni que me pidas perdón cuando creo que lo has hecho mal o que te has equivocado. Tampoco voy a pedirte que me abraces cuando más lo necesito.

Tampoco te voy a pedir que me llames para contarme qué tal te fue en el día. Ni que me digas que me echas de menos. No te voy a pedir que des las gracias por todo lo que hago por ti.

Ni que te preocupes por mí cuando mis ánimos están por los suelos. Y por supuesto, no te pediré que me apoyes en mis decisiones. Tampoco te voy a pedir que me escuches cuando tengo mil historias que contarte. No te voy a pedir que hagas nada, ni siquiera que te quedes a mí lado para siempre.

Porque si tengo que pedírtelo, ya no lo quiero...

Mis ojos se llenaron de lágrimas cuando termine de leer aquel último párrafo, era la peor forma de superar un corazón roto. Sentarte en tu cama y leer frases que solo te desgarran el corazón.

Mi teléfono sonó y deslice mi mano por la mesa de noche. Lleve mi teléfono a mi oído para escuchar a la castaña.

— ¿Es mejor que saques tú trasero de la cama?— grito. Tuve que alejar el teléfono un poco por tremendo grito que me pego la castaña.

—Hanna, deja de ser una gritona. —me aclare la garganta. ¿Qué está pasando? Pensé que tenía libre hasta el viernes.

Después de hablar con Hanna y contarle la desastrosa pelea que tuve con Yunho la otra noche. En donde prácticamente dejo mi corazón destrozado otra vez,  ya que había perdido la cuenta del número de veces que lo había hecho. Mi amiga me dio unos días libres.

—Necesito tu ayuda. —suspiro. Hay unos socios importantes que están viendo a la empresa. Quieren hablar del nuevo proyecto de Seúl. Lo olvide por completo. Puedes dejar tu depresión para después y venir.

Mi reloj de la mesa de noche y daba nueve y treinta. —Dame treinta minutos. —suspire.

—Ok. —la castaña colgó y yo volví a suspirar. Deslice mis pies de la cama y entre la ducha. Me arregle lo mejor que pude y sonreí al espejo como si el mundo no se estuviera viniendo abajo.

Tan pronto como entre a la empresa me inundaron los nervios, pero con pasos firmes camine hacia el elevador. Había estado evitando a Yunho con éxito; en realidad no era muy difícil ya que no estaba yendo a trabajar. Pero trabajar en la misma empresa era una desventaja para mi plan. Esconderse hasta superar totalmente a Yunho, hasta que mi corazón se entumeciera y dejara de sentir.

Ding.

Me mordí los labios cuando el ascensor se detuvo. Mis ojos se encontraron con la última persona que quería ver, fue el primero en desviar la mirada hacia otro lado antes de sentirme expuesto. Me sentí tan orgulloso de mi mismo, porque no tenía idea de cómo me las ingenie para fingir indiferencia a pesar del estado de agitación interna. Por lo menos había otra persona en el interior para que fuera menos incómodo. Entre y me deslice a lado de la persona que estaba dentro conteniendo la respiración.

Podía sentir la persistente mirada de Yunho sobre mí, pero ni siquiera le di una mirada. Él no se merecía nada más de mí, había sido suficiente todas las lágrimas derramadas durante los últimos diez años.

Puedes hacer esto Jaejoong me dije a mi mismo...

Tan pronto como el ascensor sonó y se detuvo al llegar a mi nivel. Las puertas se abrieron, me deslice fuera sin mirar atrás.

ENAMORADO DE MI MEJOR AMIGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora