ENAMORADO DE MI MEJOR AMIGO

PARTE 18 QUIERO SER LA ÚLTIMA PERSONA DE LA QUE TE ENAMORES...

Pov Jae

¿Cómo le explico a las lágrimas que ya no me duele? ¿Me estarán explicando ellas que me estoy mintiendo?

Tengo un problema con el amor. Lo doy todo. De manera ciega, sin medida, sin limitación. Idiota sí. De los grandes. Golpeo mi pecho para que deje doler tanto y contengo las lágrimas que quieren salir.

No entiendo por qué me vuelvo a sentir así. Joder, se suponía que ya estaba "bien", se suponía que todo estaba de maravilla, se suponía que lo había superado, que iba a seguir con mi vida.

Pero me dice algunas palabras bonitas y me vuelvo a sentirme triste, ¿Por qué? No puedo dejarlo ir cuando sé que solo nos estamos haciendo daño.

—Oppa. —dice mi hermana girándome para que la enfrente. Ella envuelve sus brazos en mi cuello y palmea mi espalda. Es lo único que necesito para dejar que mis lágrimas se deslicen por mi mejilla.

—No sé lo que paso entre ustedes. —susurro ella. Pero sé que podrán solucionarlo.

Me aleje de ella limpiando mis lágrimas. — Me voy a Seúl. —declare. No dejes que Yunho se vaya en ese estado.

Ella asintió suavemente. —Lo cuidare. —agrego ella.

—Gracias. —Intente sonreír. —Despídeme de la abuela y todos ahí adentro.

Subí a mi auto y conduje de regreso a Seúl, mi mente seguía reproduciendo cada palabra que Yunho había dicho en aquella carta. Podía sentir el dolor en sus palabras y el arrepentimiento. Pero no quería que por un ataque de compasión mis sentimientos fueran lastimados otra vez.

Abrí la puerta de mi apartamento y me tumbe en la cama, cerrando los ojos. Mire el techo por unos segundos. Dicen que tardamos 7 minutos en dormirnos y que en los primeros seis minutos y cincuenta y nueve segundos, nuestra cabeza, automáticamente, reproduce todos y cada uno de los momentos vividos a lo largo de ese día; y que en el último segundo, aparece la persona que te ha hecho feliz hoy. Finalmente, el cerebro se queda con lo más importante, con lo que más le ha gustado y lo transmite en forma de película, una película llamada «sueños»

Es por eso que cuando desperté de aquel sueño, quería que fuera real. Que Yunho estuviera a mi lado. Me deslice de la cama con pesadez y camine al baño para una ducha rápida.

Tan pronto como salí de la ducha el timbre sonó. Abrí la puerta y Hanna me sonrió.

— ¿Qué paso?—pregunto. ¿Estuviste llorando? Tus ojos están rojos.

No tenía caso mentir así que solo asentí con la cabeza en respuesta. Ella suspiro y cerró la puerta.

— ¿Quieres contarme que paso?

Le conté lo que había pasado con Yunho y sobre la carta. Ella sonrió pero estaba nerviosa. —No puedo creer que el haya escrito eso. —dije. Estoy un poco molesto por aquella parte en la que quiere dejarme ir. Aunque sé que sería lo mejor porque me siento molesto.

—Por qué lo amas. —dijo ella dejando aquella caja en el centro de mesa. Suspire y  solo hasta ese momento me había dado cuenta del paquete en sus manos.

— ¿Qué es eso? —pregunte.

—Oh, —exclamo ella. Liu me envió tu teléfono, al parecer lograron arreglarlo. —Dara me lo entrego  ayer y olvide por completo dártelo.

Corte la cinta y saque el aparato, yo me había olvidado por completo de eso, pensé que estaba perdido para siempre.

Cuando encendí el teléfono el aparato colapso. Comenzó a entrarme un montón de mensajes y notificaciones de llamadas.