Harry despertó al día siguiente sintiéndose un poco adolorido, pero nada que no pudiera soportar. Comenzó a rebuscar en la cama con su brazo izquierdo pero no sintió ningún cuerpo. Abrió los ojos rápidamente y en efecto no había nadie. Dió un largo suspiro y se puso de pie para ir en busca de Hanzen. Cuando iba bajando las escaleras pudo sentir el olor de comida llegando a sus fosas nasales. Al ingresar a la cocina vió que ahí se encontraba Hanzen sirviendo huevos revueltos en dos platos diferentes sin percatarse de su presencia en el lugar.
Harry carraspeó riendo cuando Hanzen casi cae al girarse para verlo.
-Hola pequeño, que bueno que despiertas, son casi las 11 de la mañana y necesito que desayunes para poder llevarte a casa. - dijo colocando ambos platos en el mesón que ahí se encontraba, sentándose.
Harry tomó asiento a un lado de Hanzen y comenzó a comer a un ritmo rápido al igual que Hanzen.
-¿Y bien?- preguntó Harry
-¿Y bien qué?
-¿Cómo estuve anoche?
-Pues bien querido, ¿por qué? ¿acaso era tu primera vez?- Harry se sonrojó ante tal pregunta negando efusivamente pues no quería quedar en ridículo aunque así fuera.
- No, por nada, sólo quería saber si estuve bien, es todo. ¿Ya nos vamos? - dijo bajando sus cubiertos pues ya había acabado.
-Dios si, ¿cómo puedes comer tan rápido?- Hanzen le miró asombrado a lo que Harry respondió encogiendose de hombros.
Ambos se pusieron de pie a la vez y comenzaron a dirigirse hacia el auto de Hanzen. Esta vez no le abrió la puerta así que simplemente se introdujo en el. Apenas estuvieron ambos adentro, Hanzen encendió el auto y arrancó. Estaba a unos 12 minutos de su casa así que solamente se dedicó a escuchar la radio que comenzó a sonar sin que ninguno de los dos la tocara. "Tal vez es el destino leyendo la situacion- pensó Harry.
Cuando por fin llegaron a su casa esperó a que Hanzen le diera un beso, beso que nunca llegó. Se bajó rápidamente del automóvil sin despedirse y entró agresivamente a su casa. Era domingo así que lo más probable es que sus padres y su hermana hubieran ido a la playa, era algo así como una tradición. Subió a su habitación y se tiró en su cama para seguir durmiendo, sentía que todo iba a cambiar, pero no sabía si a bien o a mal.
💚💙
Louis había pasado prácticamente toda la noche en vela pensando en cuál puede ser ese trabajo que le estaban ofreciendo. "Puede ser trabajar en un supermercado rellenando bolsas" -pensó. Siendo automáticamente descartado puesto que debe ser un trabajo que dé bastante dinero debido a la manera en la que se encontraba vestido el Sr.Garret. Así duró pensando hasta las 2 am que por fin cayó dormido.
Al siguiente día despertó con un mensaje de Zayn en su inbox -pues sí, no tenía whatsapp ya que su teléfono era de aquellos que apenas servían para llamar y mandar mensajes-.
Zayn:
-Hola Lucho, deberíamos salir hoy, tal vez así logres despejar la mente, necesito sacarte de ese hoyo al que llamas casa. Llámame cuando leas este mensaje xx.
Rió al leer el apodo "Lucho" que Zayn usaba solamente para hacerlo sonreír, y siempre lo lograba afortunadamente. Negó aún con una sonrisa en su rostro y se dispuso a marcar cuando escuchó un llanto provenir de una de sus dos hermanitas. Giró los ojos y salió de su habitación para dirigirse a la habitación de las gemelas. Eran las 12 del mediodía y lo más probable es que nadie se haya preocupado por alimentarlas. Apenas tenía un par de días en esto y ya se estaba hartando.
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No sabía que te tenía || L.S
FanfictionLouis Tomlinson tenía sólo 15 años de edad cuando su madre murió. Harry Styles tenía 16 años de edad cuando descubrió que era homosexual pero se resignaba a aceptarlo. Louis Tomlinson tenía sólo 16 años de edad cuando su primera vez le fue arrebatad...