Una vez un niño llamado Luis estaba ansioso por cumplir siete años, para realizar actividades de un niño mayor, así lo expresaba. Decía seré mayor, un niño grande y podré realizar muchas cosas que hasta ahora no me dejan, por ser muy chico.
Al aproximarse la fecha de cumpleaños su emoción crecía. Estaba muy contento y planificaba quienes serían los invitados. Con su forma particular de ser expresaba serán algunos amiguitos y mis primos. Bueno y toda la familia.
Finalmente llegó la fecha esperada, el 29 de agosto, el gran día: el cumpleaños de Luis.
¡Felicidades! expresaron los padre de Luis al despertarlo e igualmente los abuelos (Reina y Luis). Él aun medio dormido respondió Gracias, gracias y los abrazó.
En la tarde sería la fiesta de cumpleaños. Su familia, los amiguitos y primos estarían acompañándolo a cortar el pastel y a tumbar la piñata.
Al caer la tarde empezaron a llegar los invitados, Luis contento los recibía y cada vez que le entregaban un regalo ponía cara de satisfacción y expresaba con mucha alegría "Guao, justamente era lo que yo quería, gracias" Junto con sus palabras daba un efusivo abrazo.
Los niños bailaron, jugaron, compartieron dulces , refrescos y Luis no dejó de agradecer a todos que estuvieran allí con él.
Al llegar el momento de cortar la torta sus ojos brillaban de emoción y posaba para las fotos con todos los invitados. Se cantó el cumpleaños feliz sopló las velitas y al picar la torta, Luis expresó "Ya tengo siete años, soy mayor y puedo cumplir mi sueño, entrar a la Cueva del Guácharo" ya soy mayor...
De manera que sus padres tenían el compromiso de llevarlo a la Cueva del guácharo. Estaba feliz de pensar que entraría a ese lugar. Luego jugaron y compartieron un rato más. Fue un lindo cumpleaños.
Estaba muy contento y agradeció a sus padres y abuelos por su fiesta de cumpleaños.
"Para disfrutar un cumpleaños, lo mejor es compartir" Colorín colorado.-...
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Cuentos y Algo Más
FantasySe tiene la creencia que los avances tecnológicos, la virtualidad del mundo ha terminado con la inocencia, la creatividad, la magia. Pudiera ser. Mientras escribo estas líneas mis nietos, los más pequeños, ya no están en el país. Forman parte de la...