CHRISTIAN

¿Celoso?

01:30 am
Martes 11 de septiembre.

No podía dormir.

Hacía dos horas que me había metido en la cama con la intención de descansar . Cosa que no había logrado.

Estoy segura de que ya sabéis lo que viene ahora. Os estaréis preguntando ¿es por èl verdad? por que no puedes parar de pensar en lo guapo y sexy que es.

Bueno, mal encaminados no vais. Y con eso me refiero... a que es justo lo que me pasa.

No podía dejar de pensar en él. Miles de preguntas pasaban por mi mente en este momento y todas y cada una de ellas tenían que ver con Christian. ¿A qué clase iba? ¿Qué hacía un chico así en mi instituto? Para que entendáis: es el instituto más caro de todo Nueva York, la mayoría de los que asistimos somos todos hijos de empresarios o gente con dinero. Y la verdad, no me parece que un chico así pueda haber sido educado por alguien con poder y pasta. O quizás ni siquiera asistía a él. Pero eso no tiene lógica. Si no va a mi instituto ¿que hacía en los baños? Nada de esto tenía sentido.

Cambie de posición por enésima vez.

Tenía que alejar mi mente de ese chico. Pero no podía. ¿O no quería?

¿Que era lo que me llamaba la atención? Quiza su pelo y sus ojos, dignos del Ken de la Barbie. O su irresistible piercing en el labio. O a lo mejor el hecho de ser algo prohibido. Algo que mi madre jamás me dejaría tener. 

Y eso lo hacía aun más irresistible.

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8:10 am

-¡Levántate Evie!-Gritó mi querida hermana en mi oído.

-¿No podías haberlo dicho con más delicadeza?- Dije claramente enfadada.

-Ev, son las ocho y diez, entramos a clase en veinte minutos y yo tardo diez en llevarte en coche. O te mueves o te quedas aquí.

-Ya voy, Berly.- Dije. Sabia que llamarla así la joderia mucho. Esa era mi pequeña venganza.

Si os preguntáis de dónde sale es por que su nombre completo es Kimberly. Y de ahí puedo sacar dos apodos kim o Berly. Este último no lo usaba con frecuencia ya que podía sacar el demonio que mi hermana llevaba dentro.Pero no se porque la molesta tanto. Yo solo la llame así hace un par de años y tuve que correr por toda mi casa para que no me pegara. Por suerte apareció mi madre y se lo impidió.

-¡No me llames así!-Grito antes de salir de mi habitación dando un portazo.

Me vestí a la velocidad del rayo. Entre en el baño, me hice lo mismo que ayer en el pelo. Mis pendientes, esta vez eran unas estrellas de Luxenter en oro rosa. Mi collar a juego con los pendientes y un poco de brillo. Cogí mi mochila y una manzana para el camino. En menos de veinte minutos ya estaba frente a la entrada del instituto.

-¡Ev! -Oí el grito de mi mejor amiga la cual venia corriendo como siempre hace cuando me va a contar algo importante.

-¿Qué ha pasado? -Pregunte una vez estuvo frente a mi.

-¿Has visto al chico nuevo de la clase de Kim?

-La verdad es que no he hablado mucho con ella.-Dije.

-Ven.-Dijo cogiéndome del brazo- A ver si sigue en la entrada.

Izzy me arrastro contra mi voluntad a la entrada del Avenues New York High School. Vale quizás exagerara, contra mi voluntad no fue.
Una vez allí, en las escaleras no vi a nadie. Bueno, estaban unas cuantas chicas hablando en una de las esquinas en las tres primeras escaleras. Y arriba un grupo de chicos veía algo en el móvil de uno de ellos. Parecia que el móvil les hubiera abducido.

-Genial, se ha ido-Dijo Izzy decepcionada.

Yo solo me limite a observar el edificio en el que llevaba estudiando tres años. El primero, el que se encontraba frente a mi era de color gris. Tenía un montón de ventanas, la mayoría pertenecían a las clases y algunas a los pasillos, lo que hacía que no necesitáramos mucha iluminación eléctrica, aunque la teníamos todo el día funcionando. Contradictorio, lo se.

Isabelle  me saco de mis pensamientos cuando me hizo subir corriendo por las escaleras lo que provoco que casi me de con uno de los chicos abducidos por el móvil.

-A lo mejor está dentro.-

Esa fue la única respuesta de mi mejor amiga que me hacía correr a las ocho y media de la mañana. Aún no entendía como la podía querer tanto.

Vi un grupo de chicas más alante mirando algo muy fijamente. Iba a seguir su mirada cuando la figura de mi novio llamándome apareció en mi campo de visión.

-Ev, siento no haberte avisado ayer-Dijo cuando estuvo frente a mi.

-No te preocupes- Dije un poco cortante- Entiendo que tuvieras cosas más importantes que hacer.

Ups. Aquello sonó más borde de lo que pretendía.

-Cariño-Dijo cogiendo mi mano.- Lo siento de veras. Mi padre me llamo y se me olvidó por completo avisarte.

Vi como Izzy,  que se había alejado para dejarnos más espacio, me hacía un movimiento con la cabeza indicándome que lo que me quería enseñar estaba ahí mismo y que me diera prisa.

-Perdóname tú a mi- Dije- No pretendía soñar tan borde. Kim me ha levantado a gritos esta mañana.

Cam sonrío ante mi comentario y me dio un beso corto pero tierno en los labios. Y acto seguido me abrazo. Sus brazos descansaban en mi cintura. Y mi cabeza en su hombro.

Fue entonces cuando lo vi. Apoyado contra una de las taquillas. La chaqueta de cuero negro era lo que más resaltaba de todo el. Tenía los brazos cruzados y miraba la escena con  ¿tristeza? ¿Furia? Quizás ambas a la vez. Su ceño estaba fruncido. Y en su mirada se podía ver el odio que sentía. La idea de que sirviera celoso paso fugazmente por mi mente.

Su mirada se encontró con la mia. Sonrió divertido. Y se fue de allí. Sin más se dio la vuelta y se fue. Y eso me dejo todavía más confundida pero si había algo de lo que no tenía duda era de que cuando la idea de que estuviera celoso paso por mi cabeza sentí alegria.