𝙏𝘼𝙇 𝘾𝙊𝙈𝙊 𝙎𝙊𝙔 𝘼𝙈𝘼𝙈𝙀 ─ joohyuk.

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—¿Ya hablaste con Minhyunnie hyung de eso? son pareja ahora, se lo has dicho ya ¿no?.— El castaño negó.—¿Y qué espera?.

—No quiero preocuparlo, él se ve tan feliz... no quiero arruinarlo.— Miró al azabache.— Pase lo que pase, no voy a aceptar.

—Hyung, seria mejor que se lo dijeras. Sabes que hyung es muy sensible y si...

—No pasará nada Changkyun, no dejaré por nada del mundo a Minhyuk.— Suspiró y sonrió a su mejor amigo.—Mejor dime ¿como estas tu?

El azabache le miró confuso.— Yo estoy bien hyung ¿porque la pregunta?.

—Pues... ya sabes, diciembre llega.— Se arrepintió de haber dicho eso, pues los ojos oscuros del menor decayeron con tristeza. Con resignación se escabulló hasta quedar a un lado del menor y abrazarle por los hombros.— No lo dije para que estés tristes, Chang.

—Lo extraño, Honey.— Dijo encogiéndose más contra el castaño.

—El debe estar orgulloso de ti Chang, deja de sentirte mal.—Acarició esos cabellos azabaches los cuales Changkyun había teñido, regresando a su color natural. Cuanto amaba ese color.

—Desearia regresar el tiempo, estoy seguro que papá te amaría igual y-y mamá... — Bajó su voz. Por dios, había pasado algunos años desde ese incidente y Changkyun seguía herido como si hubiese pasado el día anterior. Lucia alegre, reía a su lado, pero sabia que ese dolor seguiría estando en él ¿quien no?. Habían pasado ya varios años, y Changkyun seguía siendo ese pequeño niño de doce años con mirada seria y triste. Que buena mascara, Changkyunnie.

—Ella esta bien.— Le consoló dándole leves palmadas a su hombro.

—Estaria feliz de que yo-de que yo te tenga como amigo, ella igual te amaría.— Sintió su delgado cuerpo temblar, oh, pero que triste. Lo abrazó con fuerza, rodeando aquel delgado cuerpo y dándole caricias a sus cabellos azabaches "No quisiera seguir con el color negro, mamá siempre decía que me parecía a papá, y aunque no esté, le haré caso, lo teñire". ¿Quien sería capaz de decir algo así? Changkyun era hermoso, que importaba que se pareciera a su padre, él ahora era libre de hacer lo que quisiese.

—Pues claro, todo mundo quisiese tenerme como amigo, soy Lee JooHeon.— Rió.

—Mamá jamas fue ambisosa, ella estaría feliz porque alguien genial y bondadoso como tu es mi mejor amigo.— Alzó su delicado rostro y sonrió al castaño.— Y yo igual estoy feliz de ser tu mejor amigo, hyung. Gracias por haber llegado a mi vida.

"Hey, hoy es un buen día. Tienes que olvidarte del ayer".

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—¿Te gusto el postre cariño?.—

—Claro que si, señora Lee. ¡Como siempre haciendo los mejores postres, gracias!.— El castaño inclino su cabeza con agradecimiento y sonrió.