JIMIN
Luces terrible, hijo.
No podía discutir con la vieja y canosa mecánica. Mi cara era todavía un desastre, mi costado estaba sanando, pero poco a poco, y no había ninguna refutación de que había conseguido mi culo pateado en los últimos días en varias ocasiones.
Gruñí y extendí la mano para estrechar la mano de Sohyun. Todo lo que había aprendido sobre los autos lo había aprendido de esta vieja. Ella tenía una tienda que era el frente legal para el desguace que manejaba todos los calientes autos de Yoongi. El Runner no sería ni la mitad de la bestia que era, si no fuera por Sohyun. Bueno, por Sohyun y por Jongin arrastrándome con él a la tienda después de la escuela durante años, antes de que me diera cuenta de que odiaba las tripas de mi medio hermano. Jongin era casi tan bueno con los autos como yo. Era realmente lo único que teníamos en común; eso y que ambos siempre elevábamos la vista hacia Sohyun.
—Me alegro de que estés fuera. Aquí nadie aprecia el músculo clásico de la manera que tú lo haces. No puedo dejar a la mitad de los idiotas que trabajan para mí tocar las cosas del pre-'76 viniendo. Ellos no saben lo que están haciendo con ello.
Me reí un poco y tomé una calada de humo que estaba colgando de mi boca. Había pasado todo el domingo corriendo alrededor, tratando de poner una cara al elusivo chico rico con el que Hoseok parecía tan obsesionado. No había tenido suerte, y estaba tan irritado que quería tocar base con Jungkook, así que no lo hice a propósito. No necesitaba al chico flotando en mi cabeza, no con todas las trampas explosivas y cosas desagradables que ya estaban constantemente allí. Él solo se suponía que sería una diversión, una manera fácil de conseguir mis necesidades cubiertas hasta que pusiera mis manos sobre Hoseok. Por desgracia, esa no era una mentira que podría venderme a mí mismo y era más que mi pene que quería verlo esta noche.
—Me encontré con Jongin, me dijo que diera una vuelta. Dijo que es posible que necesites mi ayuda.
Sohyun frotó sus manos grasientas en su overol y levantó una espesa ceja hacia mí.
—¿Escuchaste a tu hermano?
—Medio hermano, y no, iba a dejarme caer y verte cuando consiguiera un minuto de todos modos. He estado muy ocupado tratando de encontrar a Hoseok. ¿Has oído de él en lo más mínimo?
Sohyun gruñó y apoyó los pies calzados con botas sobre el escritorio de metal en la pequeña oficina. Sus ojos se apartaron de los míos.
—Necesitas darle a Jongin cierta holgura. El hombre tiene que trabajar, y solo porque lo hace en el lado correcto de la ley no hace de tu hermano un mal tipo.
Solté una nube de humo y crucé los brazos sobre mi pecho.
—Dices eso hasta que te encierra por correr los autos. No importa si tenemos una historia a largo plazo y que estés atado a su familia o no… va a poner tu culo en la cárcel.
—Hago funcionar un negocio legítimo, hijo, y nadie puede demostrar lo contrario. Si Jongin pudiera demostrarlo, estaría dentro de su derecho a encerrarme, como hizo contigo. Además, salvó tu culo de ir a contracorriente por el resto de tus veintes. Tal vez le debes agradecer en vez de lanzarte a él.
Solté un bufido.
—¿Él me delató?
—Tengo ojos, Jimin. Jongin es un monstruo, no iría a conseguir un ojo morado como ese por alguien a quien no dejaría ponerlo allí. ¿Quieres conseguir tus manos sucias? Tengo una Stang, un Nova, un Chevelle, y un Playmouth Barracuda; todos en busca de ser reconstruidos y pulidos hasta arriba. No tienen nada que ver con Yoongi. Es el cielo de los autos y te pagaré bien para que consigas tus estándares. Además, va a ser un cheque de pago más fácil que dejar que Namjoon te use como un saco de boxeo.
ESTÁS LEYENDO
Mejor cuando es audaz. #1 [Jikook]
Ngẫu nhiênBienvenido a Busan. Hay una diferencia entre un chico malo y un chico que es malo... conoce a Park Jimin. Sexy, oscuro y peligroso, Jimin no está solo del lado equivocado del camino, él es el lado equivocado del camino. Un criminal, y un matón, él e...