Mejor cuando es audaz. #1 [Jikook]

Veinticinco [Final] 🌸

JUNGKOOK

Seis meses después...

Tenía un montón de trabajo escolar extendido sobre la mesa delante de mí, Taehyung estaba sentado en el sofá junto a mí, y estábamos hablando sobre el nuevo novio de Yugyeom. Había recortado un poco mi horario de clases, así que obtener mi título iba a tomar un poco más de lo que había planeado, pero había conseguido un turno extra en el restaurante con el fin de juntar dinero para cuando tuviera que transferirme a la universidad real con el fin de terminar mi carrera. Jimin me decía repetidamente que financiaría el resto de mis estudios, tenía dinero de sobra de los juegos de carrera y al garaje le estaba yendo muy bien. Pero comenzar la escuela y obtener mi título era algo que siempre había planeado por mí mismo y quería lograrlo por mi cuenta, por lo que finalmente renunció a su oferta. Él pagaba todas las cuentas de la casa y me daba el dinero de todos modos, así que pensé que no lo mataría que me permitiera tener una cosa por mí mismo.

Todavía trabajaba en la casa hogar. De hecho, después de la salida rápida de Hyolyn, me habían ofrecido una promoción. Tuve la tentación de tomarlo, pero cada fin de semana lejos de Jimin ya estaba presionando, así que lo había rechazado. Me dolió un poco decir que no, pero cada vez que volvía a casa después de no verlo durante unos días seguidos, lucía un nuevo moretón o nudillos reventados, lo que significaba que estaba metiéndose en problemas mientras yo estaba fuera. No vino directo a decir que todavía estaba dejando a Namjoon establecerle peleas, al igual que no admitió abiertamente que todos los autos que entraban y salían de la tienda no estaban allí por petición de sus propietarios, pero en su mayor parte mantenía su nariz limpia. Bueno, tan limpia como un tipo como Jimin podía.

Jongin estaba manteniendo un ojo de águila en él y estaba bastante involucrado en asegurarse que permaneciera lejos de la cárcel por mi causa, así que no me entrometía y no estaba realmente muy preocupado por ese tipo de reductores de velocidad.

Hablando del diablo, él llegó merodeando de la trastienda tirando de su camiseta sobre su cabeza. No estaba tan delgado como lo había estado cuando lo conocí. Estaba con un poco más de kilos ahora, menos intimidante, pero eso no significaba que hubiera perdido algo de su irritante arrogancia. No me perdí el pequeño suspiro de satisfacción que dejó los labios entreabiertos de Taehyung mientras Jimin se inclinaba sobre el respaldo del sofá y colocaba un abrasador y fuerte beso en mí boca.

—Acabo de terminar la parte trasera de un nuevo coche. El garaje está vacío esta noche y Hoseok tiene planes. Vuelvo en un rato.

Corrí mi pulgar sobre la cicatriz de su rostro y le di un beso suave.

—Nos vemos más tarde.

Se pasó una mano por el cabello y se tiró encima una de sus mil sudaderas mientras se dirigía hacia la puerta.

—¿Está bien que te diga que él es a partes iguales aterrador y caliente? —preguntó Taehyung.

Me reí y arrojé la pluma que sostenía sobre uno de mis libros.

—Sí, porque es la verdad.

—No sé cómo lo haces. Él es tan. . . oscuro. Es como si solo saliera de él.

No era siempre oscuro, de hecho últimamente él era el único arrastrándome hacia la luz. No me sentía mal por disparar a Yoongi, era una persona horrible y después de todo por lo que hizo pasar a Jimin y a mi hermano estaba contento de que se hubiera ido, pero ser el que había apretado el gatillo había cambiado algo en mí, me hizo tener un toque de oscuridad, y sin Jimin alrededor, había una buena probabilidad de que pudiera haber acabado metido allí.