Una soleada mañana timaba con fulgor la habitación, los rayos atravesaban el gran ventanal iluminando hasta el último rincón, observaba las palomas de color blanco revolotear de un lado a otro la vista de desde este lugar era increíble podías ver toda la ciudad de los Ángeles incluido el cartel de Hollywood. Sentado en una mesa de madera y un sillón blanco revisaba unos documentos, mire el reloj observando que era las once en punto ya podía oír sonar agudamente las campanadas de la iglesia que estaba muy cerca de donde residía, esperaba el momento de llegar a mi casa y escucharlas era relajante. Esto es la ciudad y es indudablemente ruidosa por eso vivo en una modesta casita que compre a las afuera está rodeada vegetación y muy cerca de los viñedos del abuelo.
-Presidente con su permiso, oír decir saliendo de mis pensamientos mire a un trabajador que me entregaba un sobre de correspondencia en su interior contenía le informe que esperaba junto con fotografías, este se marchaba dejando la puerta entre abierta fue cuando vi entrar a mi secretario.
–Está de buen humor Takaba, exclamo acercándose para recoger los informes que me estaba leyendo –No me digas tu hijo Takeshi se salió con la suya, exclamo tomando los documentos yo solo pude sonreír ya que mi hijo era obstinado y tenía buenos argumento que no podías rebatirle, observe al hombre que tenía ante mí era un poco más bajo que yo tenía una larga cabellera rubia que se recogía elegantemente con una cola alta siempre le caía dos mechones cerca de su rostro, sus ojos eran azules agua y era atractivo.
- Aunque no sé porque insistió tanto cuando de primera le dije que sí, conteste riendo mientras mi mano estaba posada en mi boca y la otra en el escritorio.
-Supongo porque no se lo esperaba, de todas formas tiene que coordinar la sección de foto esta tarde además te recuerdo que tendrás que ver los diseños antes del catalogo después se dispondrán para su venta, me comunico mi secretario quien sacaba su agenda para decirme las citas y reuniones que tenía pero aunque tenga buena memoria puede olvidárseme.
-Ah sí Arman quiere diseñar algo escandalosamente fabuloso, tu y yo Alexy sabemos que acabara en desastre si no le viene la inspiración, lo que será un agobio cuando tenga que realizar las fotos.
-Y que lo digas...., digo refutando mirándome de forma incisiva – Solo espero que tengas cuidado cuando vayas por una primicia como presidente debes mantener tu estatus aunque en esta empresa parece sacado del libro del "país de las maravillas", enunció sonriendo sarcásticamente dirigiéndonos para salir de la oficina, observe el interior de mi empresa, te podías encontrar a los trabajadores llevando coplay, otros con ropa deportiva, se veía pasar de pronto dron revolotear a tu alrededor incluso algún que otro avión de papel incluso un dragón paseando cruzando el pasillo ( claramente era de mentira).
-Bueno ya sabes me gusta las personas diferente que sean única no me gustaba ver como la sociedad juzga a las personas, por eso construí esta empresa donde todos pueden ser ellos mismo y ser esporádicos, este lugar es nuestro hogar por eso nos esforzamos por que crezca.
-Si no fuera por ti creo que nadie incluido yo seguiríamos perdidos, Takaba todos te consideran un dios así que lo menos que poder hacer es hacer que te eleves al cielo, me dijo sonriendo agradablemente dirigiéndonos al ascensor que era transparenta transparente lo más raro era escuchar la música normalmente hay una relajante pero en este lugar hay de todo tipo y en este mismo momento era música metaliza, visualizábamos lo locamente maravilloso que se había convertido mi decisión en aquel tiempo en el cual no tuve más remedio que marcharme.
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Lazos del destino, Tú a Japón y Yo a Los Ángeles
RomanceAkihito Takaba un joven fotógrafo con un misterioso poder (puede ver el hilo del destino) mantiene una relación desde hace mucho tiempo con Asami Ryuichi un empresario y también líder de la mafia de Japón, el problema de la relación entre ambos es...