Las semanas habían pasado y ninguno de los 2 se encontraba dispuestos para hablar pues la vergüenza y el miedo les ganaba, después de ese beso sus mentes se llenaron de dudas.
por un tiempo decidieron no dirigirse la palabra, necesitaban pensar y aclarar todo tipo de duda,en especial Laurens quien se encontraba con un revoltijo en su cabeza pero no era momento de pensar en ello pues George Washington lo había nombrado Ayudante de campo debía cambiar de lugar (por órdenes de Washington) ahora se encontraba guardando sus cosas,debía despejar su mente,debía dejar de pensar en Alexander.
-Ahora tendrás el lugar para ti solo Marcus. —— hablo john.
-Estaré muy solo sin tu fría presencia Laurens —— Marcus ironizó golpeando la espalda de John cómo despedida —— y a todo esto ¿quién será tu compañero?
-no lo sé pero espero no sea tan desastroso y ruidoso como tú —— sonrió
-oh vamos no soy tan escandaloso — Marcus río.
-dicelo a mis noches de desvelo por tus ronquidos. —— ambos soldados rieron.
-oye podemos almorzar juntos? Estoy harto de charlees y sus estúpidos insultos hacia Washington.
-claro, a veces me dan ganas de darle un disparo.
-pues ya somos 2....
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No muy lejos del campamento se encontraba un caribeño discutiendo con su buen amigo Francés,no es que no le guste estar con todos los soldados pero a veces lo sacaban de sus casillas.
-pero Hamilton...
-Lafayette sabes que me gustaría ir pero tengo trabajo por entregar y cartas que terminar. —— Alex dio media vuelta para seguir con su ya no relajada caminata ahora se dirigía a su carpa asignada.
-si cambias de opinión ya sabes dónde encontrarme —— sin decir más salió de la vista de Alexander.
Alexander por su parte no se sentía tan mal de echo pensaba en besar de nuevo a John,repetía ese suceso las veces que quisiera podía incluso pensarlo de una manera más.... íntima,más encendida,más provocativa,pero también le invadía la culpa de a ver echo tal acto,era un milagro que John no lo allá acusado de homosexual, eso le hacía sentir menos miserable.
-Maletas? —— una vez dentro de su cuarto pudo visualizar una maleta justo alado de su catre. —— debe ser mi compañero —— sin darle más vuelta al asunto movió sus hombros de arriba hacia abajo dirigiéndose a la mesa en donde se encontraba su trabajo.
