¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¡Oppa! ¡Oppa! —la pelirrosa corría y corría hacia TaeHyung, de vez en cuando, acomodándose los lentes—, le tengo que decir algo muy importante...
—¿Qué pasa, pequeña? —dijo sin mirarla—. No tengo mucho tiempo, pero adelante. Yo también tengo algo muy importante que decirte.
—Oh, dígalo usted primero, Oppa —sonrió nerviosa. Ella pensaba que TaeHyung tal vez se le quería declarar.
Pero qué equivocada estaba.
—No, adelante. Tú primero. Trata de que sea rápido —la miró por unos segundos y le regaló una sonrisa, para luego volver a la vista a su locker y seguir buscando el anillo.
—Bien.... Oppa —tomó las manos de este, llamando su atención y confundiéndolo—, me gustas.
TaeHyung abrió los ojos como platos, definitivamente no se esperaba eso. Desde siempre había visto a Hyun Hee como una hermana menor, y pensaba que Hyun Hee le veía de la misma forma.
—Oh, pequeña, yo... —se soltó del agarre en sus manos, retrocediendo mientras negaba con la cabeza, no sabía qué decir—. Yo-...
—Oh, no, eso sí que no te lo voy a aceptar —dijo una pelinaranja, saliendo por detrás de los lockers—. Con mi novio no te metes.
Esas palabras hicieron que Hyun Hee se sintiera destrozada, ¿novio? Definitivamente no se esperaba eso, y es que TaeHyung no era de tener novias, siempre le había dicho que no le gustaban las cosas serias.
—¿Novio? TaeHyung, ¿qué pasa? —miró al mayor, el cual mordía su labio inferior nerviosamente.
La pelirrosa sintió cómo su corazón se partía en mil pedazos y, aunque no quería que TaeHyung le dijera la verdad, lo necesitaba.
—Sí. Lisa es mi novia... Eso, eso quería decirte —miró a Hyun Hee—. No te molesta eso, ¿verdad? —abrazó a Lisa por la cintura.
¿En serio me lo preguntas, idiota?
Y es que era ridículo, obviamente le molestaba, debería estar feliz por TaeHyung, pero le dolía no ser correspondida, y también le dolía que el morocho le mintiera al decirle que nunca buscaría algo serio.
Cuando estaba decidida a declararse, supo que quizá TaeHyung le diría que no quería nada serio, y admitía que eso le hubiera dolido menos que saber que TaeHyung estaba con Lisa.
—Claro que no —mintó, apretando su mandíbula—. Yo mejor me voy —sonrió falsamente, apuntando a la salida de la mini sala de lockers.
—Adiós —dijo Lisa—, fue un gusto —sonrió falsamente y estrechó la mano con Hyun Hee.
—Ajá —dijo cortante y miró a TaeHyung—. Adiós —dio media vuelta, dispuesta a salir por esa pequeña apertura.
—Pequeña —murmuró el morocho, a lo que la pelirrosa dio la vuelta, mirándolo fijamente—, ¿no me darás un abrazo? —soltó la cintura de Lisa y abrió sus brazos.
