La lista de los deseos

-Final-

30 de diciembre. Mi cumpleaños. Jimin se levantó dando saltos y besándome como un loco, mientras cantaba.

Luego llegaron todos, Yoongi, Hoseok, Jin, Namjoon y Jungkook. Me raptaron y me llevaron a un restaurante a celebrarlo, aunque por la tarde ya estaban todos borrachos. Jimin y yo éramos los únicos sobrios, contemplando cómo Jin y Namjoon casi están teniendo sexo encima de una mesa.

Jimin estaba entre mis brazos, feliz. Habíamos pasado unos meses algo difíciles por su trauma, pero ya está casi recuperado. Digo casi porque todavía puedo ver su miedo cuando le veo desnudo, o aquella vez que casi lo hacemos. No podía acostarme con él cuando veo lágrimas de desesperación y puro terror. No puedo.

Siento que alguien me tira del brazo y me lleva al baño. Yoongi.

Este me mira serio para luego abrazarme con fuerza.

-Deberías decírselo.

-¿De qué hablas?

Se separó y alzó una ceja.

-¿En serio creías que no me daría cuenta? Te conozco tanto que hasta da miedo. Tae, sé tu último deseo.

Mis ojos se abrieron, observando al peli celeste que me observaba aburrido. De pronto me invadió la tristeza.

-N-no le quiero obligar a nada Yoongi... no sé qué hacer...

-Oye oye mocoso, no llores, es tu cumpleaños- suspiró mientras acariciaba mi cabello- si te digo lo que te voy a decir es porque estoy borracho.

-No estás borracho, hyung.

Arrugó su nariz.

-¿Cómo sabes eso?

-Si estuvieras bebido ya estarías quitándote la ropa sobre la barra y violando a Hobi hyung.

-Tienes razón, pero bueno ese no es el caso- cogió mi cara entre sus blancas manos y me miró atentamente.

Parecía ayer cuando ambos éramos unos adolescentes huérfanos, que sólo se tenían el uno al otro. Hubo una época en la que fuimos amantes, buscando placer en el cuerpo del otro. Pero nunca hubo ese amor. Ese amor que tengo yo con mi Jiminie.

-Sabes perfectamente que eres la segunda persona más importante para mi en este mundo.

Fruncí el ceño e hice un puchero.

-¿El segundo?

-Cállate, el primero es mi caballo. Lo que quiero decir es que tu historia de amor con el enano es especial. No tanto como la mía y la de Hobi, no no, nuestra historia es digna de un fanfic en Wattpad. Pero es muy auténtica, y para que siga siendo así tienes que ser sincero con él. Díselo, Taehyung.

Asentí, pensando cómo iba a hablar con Jimin. Seguía pensando en ello cuando conducía de camino a casa. Eran las 22:50. Suspiré, cansado.

-¿Qué pasa?- me preguntó Jimin con voz baja.

Aparqué el coche en el garage y me dirigí a él.

-Jimin... tú sabes que te amo, ¿verdad?

Frunció el ceño.

-¿Vas a dejarme?

-¿¡Qué?!- pregunté confundido.

-Vi cómo te ibas al baño con Yoongi, tardaron bastante en volver. Creía que eran sólo amigos...

-¡No! Jimin no es eso, amor. Yo nunca te engañaría.

El peli gris abrió con rapidez la puerta y salió corriendo en dirección a nuestro hogar. Mierda.