EL HEREDERO

11. El infierno ha declarado la guerra.

No sabía que hacer, así que me levanté de la cama. Encendí la mesa de noche, el reloj marcaba las tres de la mañana. Vestí el albornoz y mis pantuflas, saliendo de la habitación real. No podía quedarme en ese lugar, cuando el sueño pareció real, las alas, la mirada de mi hermana, sus mejillas, ella embarazada. ¿En verdad estaba viva? Bajé las escaleras corriendo, los guardias del turno de la noche no dijeron nada. Solo me observaron en silencio. 

Así que llegué a la habitación de Alexander, la cuál golpeé con fuerza. Todavía sudaba y mi corazón se volcaría en cualquier momento. Alexander abrió la puerta aturdido, se sorprendió al verme y encendió la luz.

-Su majestad.

Entré a su habitación. Él miró a ambos lados y después cerró la puerta sin comprender.

-¿Alguien te vio venir?

-Supongo que sí, pero tuve un sueño... una pesadilla, no lo sé -le narré mi sueño de principio a fin, esa utopía en mi corazón dónde los dos podíamos quedarnos juntos y al final mi hermana, sus palabras, hablarme del Ángel Ithurriel y pidiéndome que hable con mi madre-. Ella está viva, ella y mi hijo están vivos.

-Jonathan trata de calmarte -respondió sentándose-, había escuchado que a los Consejeros Reales les hacen beber sangre del Ángel Ithurriel para tener conocimiento y contacto directo con él.

-Mi abuelo, fue Consejero de mi otro abuelo, si bebió sangre de ese Ángel significa que mi madre y nosotros...

Alexander asintió con la cabeza -Eso quiere decir que ustedes tienen más sangre de Ángel que los nefilims ordinarios y si hablamos que ustedes son descendientes directos de Jonathan Cazador de Sombras.

-Entonces Clary pudo pedirle al Ángel que ella entrara en mi sueño...

-El Ángel Ithurriel se comunica en los sueños mayormente, es posible que los sueños que has tenido también sean mensajes de él, pero es difícil determinar cual lo es y cual es un deseo de tú corazón.

Sujeté su mano -Te refieres al sueño dónde eras mi Consorte.

-Si Clary dice que su majestad, la Reina, tuvo conocimiento de su romance y que es peligrosa. Tal vez deba investigarla.

-Lucian me dio el expediente, no hay nada muy espectacular, su madre falleció al darle a luz. Al parecer hubieron problemas.

Alexander sonrío -Yo soy tú guardaespaldas, pero puedo encargar a Jace y a mi hermana investigar sobre la Reina, si tú me lo autorizas.

-Claro, eso nos hará sentir más tranquilos a los dos.

-Es muy temprano como para despertar a su majestad, la Reina Madre en estos momentos. Así que le recomiendo vuelva a su habitación y la iremos a visitar a primera hora.

-No voy a volver a conciliar el sueño y no quiero regresar a la habitación que comparto con mi esposa. 

Alexander me miró con reprobación, sabía que no era correcto responder eso. No cuando mi hija viene en camino. Pero me encontraba sumamente excitado con toda la situación, por el sueño y pensar que Clary estaba viva, quería correr detrás de ella y era un tema un poco complicado. Alexander se mantuvo en silencio junto a la pared. 

-Alexander...

-Si tú hermana está viva, entonces regresarás con ella. Mis pensamientos me murmuraban que solo estabas conmigo para olvidarla.

Desvíe la mirada, yo quería a Alexander. Tan siquiera eso le dije a mi hermana en el sueño. Ahora despierto, no sabía en que bando ponerme. El día que nos besamos fue cuando ella entró según a la realización del aborto. Yo me sentí devastado, pero lo que he vivido estos meses con Alexander. Sacudí mi cabeza, estaba confundido.