No soy una Lunática

Atrevimiento o verdad

Canción ambiente: Just the way you are- Bruno Mars
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Ojalá te pudiera decir todo lo que se me pasa por la cabeza cuando te veo”

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Habitación de las chicas

- ¡Te juro que no me creo que por fin hayas admitido que te guste James! Sois tal para cual.- Emily sonreía ampliamente mientras hablaba

Las chicas habían montado una enorme fiesta de pijamas, con sacos de dormir en él suelo y charlaban en pequeños y grandes grupos, o incluso en parejas como ellas dos.

- Supongo que se puede decir que es algo así como un alma destinada.

- ¿Te refieres a un alma gemela?

- No exactamente. Me gusta pensar que hay almas que están destinadas para conocerse. Quizá no se queden para siempre, y no son gemelas por que pueden ser complemente distintas, o incluso no llevarse bien , pero están destinadas a cruzarse, enredarse, tropezarse, amarse, discutir o lo que toque. Son esas personas que te marcan en la vida, por eso un alma destinada también puede ser un alma gemela.

Emily la miró, con la boca un poco abierta y la cabeza ladeada.

- Es una idea muy bonita, Ella... Coincido, James es tu alma destinada

- Todos lo sois. Todos sois almas destinadas para mi.

- Lo mismo digo. No sería la misma persona si no nos hubiéramos sentado juntas en el tren.

Se quedaron calladas un rato, cuando Emily rompió el silencio

- Estoy segura de que a James le gustas, y los chicos acabarán por convencerle para que te lo diga y te pida salir.

- Es posible.

- ¿Posible? - su amiga le dió un suave empujón en el hombro- Es seguro. Se pone Colorado cuando está contigo, solo habla de ti y te mira todo el tiempo. Esta lo que se diría "enamorado"

- Enamorado es una palabra muy grande y muy comprometida. Le gusto, como a mí me gusta ver el cielo, y tanto le puedo gustar para siempre como solo hasta mañana.

- Vaya, ¡hoy estas poética! No lo pienses tanto. Disfruta de las mariposas y olvídate del resto.

Siguieron hablando hasta tarde, pero no lo suficiente tarde como para darse cuenta de la incursión que ocurrió luego

Habitación de los chicos

Era tardísimo. Llevaban horas haciendo el tonto, y habían acabado todos juntos en un gran grupo, jugando a atrevimiento o verdad con una botella vacía de Whisky de Fuego que habían traído los de último curso.

- Quizá deberíamos dormir...- Dijo un alumno de primero

- ¡Mañana no hay clase! Aprovechemosló- los mayores no tenían intención de acabar aun

- ¡Una última, aun no ha pasado nada interesante!

- ¡Que alguien la gire!