No soy una Lunática

Amorentia y Nuggets

Canción ambiente: Crush Culture- Conan Gray

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“Envejece con Tu mejor amigo para así  poder hacer luchas de bastones y carreras de sillas de ruedas”

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El siguiente mes pasó sin ningún sobresalto y casi sin darse cuenta ya estaban en Febrero.

La segunda clase que tenían juntos los Gryffindor y los Hufflepuff era pociones. Estaban bastante avanzados en el temario, pero iban a repasar la amorentia. A todos les gustaba esa clase. Era cuando se descubría a quien le gustaba quien, y nunca se podía negar. Slughorn daba esa clase todos los años por que (muy en el fondo) a el también le entretenía.

- ¡Está bien! - Comenzó el profesor- Todos tenéis hecha la poción, así que hagamos una actividad. Quiero que cada uno de vosotros me diga a que huele la suya, ¡y luego discutiremos por qué es así! Si alguien no quiere decirlo en alto, lo comprendo. Pero si podéis decirlo... Mejor. Todo es por bienes educativos.

Todos empezaron a murmurar y a hablar al oído. Miradas nerviosas y algunas cómplices entre los alumnos, algunos roces de mano y gente que ya se preparaba para negarse a responder.

Amorentia de Emily

- ¿Señorita Butcher, empieza usted?

Emily, sin ninguna vergüenza, miró a su novio y olió la botella mientras lo hacía.

- Chocolate, la tienda Honeydukes, la casa de mi abuela y... Otra cosa.

Absolutamente todos en la clase, inclusive el profesor, sabían que era la otra cosa que la chica no quería nombrar, así que no se insistió.

Pasaron unas cuantas personas más. Tommy olía a Ryan, Ryan olía a Tommy. A una chica de Gryffindor le olía a otro chico de su misma casa y los dos se emocionaron, pero él chico de Hufflepuff que se sentaba al lado de ella se llevó una gran desilusión.

Amorentia de James

- ¿Potter? Su turno

No tenía nada que perder. Es decir, lo sabía todo el mundo. Hasta Fred. No había problema, había estado a punto de besarla, así esto lo podía hacer sin problema ¿No?

- Tarta de Melaza, cera para las escobas, el campo de Quidditch por la mañana y...

Lavanda. Lavanda por todos lados. Era lo primero y lo último que olía en ese frasco.

- Lavanda.

¡Hecho! Le temblaban las piernas y agradeció estar sentado. Miró a Will y Oliver, luego a Emily y por último a Stella. Por Merlín, que ojos tan bonitos tenía la chica.

Amorentia de Stella

Solían decir que ella olía a Lavanda. Entonces, ¿James la olía a ella en su amorentia? Esperaba que si. Es decir, ella definitivamente le olía a el, así que estaría bien ser correspondida por una vez. A ver, no podía forzar los sentimientos de nadie, pero sin duda le gustaría.