Ignoró el como había llegado ahí en primer lugar, tal vez era un día común de entrenamiento y al darse cuenta se encontraba seleccionando dentro de su bolsa de entrenamiento el pergamino que usaría.
―¿Todavía no te decides?
La voz irritada por esperar de Neji la hizo sonreír, no lo miró siguió rebuscando el pergamino indicado, no hacía falta hacerlo ya tenia la imagen en su cabeza, él recargado en uno de los árboles alrededor del campo de entrenamiento, cuando lo encontró, volteo victoriosa hacia el Hyuga sonriendo.
Pero no vio a Neji.
Ni al campo de entrenamiento.
Su pecho pesó, lo recordaba con exactitud como oprimía aquel chaleco verde que vistió ese día, su boca estaba seca y notó el sudor cubriéndola de pies a cabeza, sentía suciedad por todo su cuerpo, su respiración se empezó a agitarse reconocía aquel paisaje rocoso y destruido sin un rayo de sol iluminando lo que veía.
―Date prisa Tenten― detrás de ella resonó en el silencio de nuevo la voz de Neji, cuando volteo abrió los ojos y sus labios temblaron.
Neji no tenía ninguna apariencia agradable, su banda ninja no estaba y su sello en la frente podía notarse rápidamente llamando la atención, de su boca salía un rastro de sangre de cada lado, sus ojos no tenían el mismo brillo de vida de siempre, su uniforme estaba destrozado justo en el medio donde tres dagas lo atravesaban dejando ver mucha sangre.
―No estaré esperándote por siempre...
Una bocanada de aire fue tomada por la chica en cuanto se despertó sudando, sus ojos buscaron a su alrededor, pero solo había tela blanca cubriendo cada pared de la tienda de campaña.
Una pesadilla.
Tomó sus manos y las colocó en su pecho con respiración acelerada, había parecido tan real que cuando cerró los ojos la imagen de la apariencia de Neji se presentó de nuevo en una imagen nítida.
Negó con la cabeza varias veces, debía concentrarse y descansar, se encontraba en una misión de rango S en ese momento, miró con curiosidad la entrada de la tienda, se levantó y abriéndola miró hacia afuera, la fogata ya se encontraba apagada y observó al Kazekage recargado en uno de los árboles, su máscara miraba ligeramente hacia el cielo y de costado, Tenten notó como su pecho subía y bajaba respirando tranquilamente, se encontraba dormido, tomó una frazada del interior de la tienda donde dormía y salió con ella acercándose al chico.
Cuando estuvo apunto de acercarse a ponerla cubriendo al chico del frio, una barrera de arena se levantó justo pocos centímetros de la cara de la chica acercando asustada sus manos junto con la frazada en ellas a su pecho.
Lo había olvidado por completo, aquella barrera de arena que siempre protegía al pelirrojo sin que pudiera evitarlo.
―Será tu culpa si enferma...― intentó de nuevo, estiró las manos hacía arriba esta vez desde cierta distancia sin acercarse al chico dejó caer la frazada cubriéndolo, Tenten sonrió satisfecha― bien, me alegro de que lo hayas entendido.
Caminó lejos de él y observó la luna brillando en el cielo con nubes alrededor de ella, no sabía si podía volver a conciliar el sueño pero lo haría después de dar una vuelta por los alrededores, de su bolso de viaje sacó un hilo ninja que le avisaría de intrusos en la zona para que el Kazekage y ella pudieran descansar con tranquilidad.
A la mañana siguiente y después de dormir unas cuantas horas más de lo que esperaba se sentía más que fresca para continuar con su misión, no sabía exactamente a dónde se dirigían pero debía ser paciente.
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Por un alma equivocada (GaaTen)
FanfictionÉl, siempre había estado solo, nunca había conocido el amor, tan sólo vivía rodeado de el que sus hermanos le ofrecían y el que su madre había dejado en la arena que lo protegía siempre. Ella, había conocido el amor correspondido desde jóven, pero u...