Por un alma equivocada (GaaTen)

La mitad de mi alma

Los dedos de Gaara acariciaron con delicadeza el estómago de Tenten, está estaba abrazada a él, ambos sin decir ningúna palabra desde hace horas y es que desde que se habían besado no había pasado a más.

Para Gaara era suficiente el saber que su amor unilateral era correspondido en ese momento y esa noche, tampoco era tan experto como para saber lo que debía de hacer exactamente con las curvas pronunciadas de la cadera de Tenten, sin cometer errores.

Ella lo abrazaba del pecho recargandose en el, pudo escuchar con exactitud cada latido del corazón del chico, lenta y pausadamente, un latir qué fue del resalto a estar tranquilo como ahora dándole paz, deseando que nunca acabara.

Sintió de nuevo el contacto de los dedos fríos del chico, que ya desde hace rato habían recorrido algunas partes de su cuerpo, pero no con lujuria, era un simple y delicado toque, como si Gaara necesitará hacerlo para comprobar si ella estaba ahí, si ella era real.

Su mano viajó hacía la mano izquierda de ella tocando primero las puntas de los dedos de ella, sin dejar de ver con detenimiento el roce sin dejar de sentirlo, después unió su mano a la altura de la suya, su mano por supuesto por ser de hombre era ligeramente más grande mientras que la de ella era más chica, notó y sintió las imperfecciones en ella, pequeñas callosidades que Gaara imaginó como consecuencia del uso de sus armas ninjas.

Tenten observó de igual manera la mano haciendo contacto con la de ella, para después por inercia entrelazarse sin tanta presión, después Tenten solo volteó a verlo, él acercó su rostro besándola de nuevo.
Cuando se separaron ella se volvió a acomodar en su pecho, sintió como su respiración se había agitado, Gaara acarició su cabello castaño con su mano libre.

-Tú...¿desde cuando?- habló Tenten mordiéndose el labio inferior, no quería arruinar el momento pero su curiosidad siempre le ganaba.

-No lo sé con exactitud- respondió casi de inmediato y jugó con su pulgar y el de ella en sus manos entrelazadas.

-Oh

-Pero puedo decirte el momento en que te noté de verdad por primera vez- Gaara observó los ojos castaños que le miraban con pura curiosidad esperando más de esa respuesta- Cuando mis hermanos y yo llegamos a esa reunión de Kages antes de la boda de Naruto el Hokage preguntó si requeríamos de alguna persona en especial para nuestra escolta, de inmediato pensé en Rock Lee, quería preguntarle sobre el regalo de la boda de Naruto, y entonces estabas junto a él cuando se presentaron en nuestras habitaciones, había escuchado antes a Temari y a Kankuro hablando de tí pero nada que llamara mi atención de manera anormal- Gaara apretó un poco la mano entrelazada sonriendo, pensando en como era irónica la vida, había ignorado a Naruto y a Rock Lee de esa manera y sin embargo ahora eran sus preciados amigos- y entonces después de regañarlo a él por ser informal al hablarme sonreiste y algo dentro de mi se sorprendió al ver esa sonrisa, no había visto una parecida, durante todo el transcurso de esa larga caminata y aunque estaba metido en mi preocupación del regalo, una pequeña curiosidad me molestaba cada vez que te veía sonreír, me pregunté si esa sonrisa podía haber sido la mía si no hubiese tenido una infancia tan dura como la que tuve.

-Vaya, eso es realmente...lindo...- Tenten pensó en que no podía decir nada parecido a eso ya que en esos momentos solo había pensado en su dolor por la muerte de Neji.

-Cuando llegué a Konoha a pedir ayuda para esta misión ya te tenía en mente- tomó la trenza de su cabello castaño y la besó sin dejar de verla- al principio pensé que era porque me di cuenta de que cumplias con el requisito de discreción pero ahora no puedo dejar de pensar que algo dentro de mi todos estos años quiso ver esa curiosa sonrisa de nuevo.

-Es impensable...- Tenten bajó la mirada algo desalentada- tú y yo... jamás me lo hubiera imaginado- Tenten presionó más su mano contra la suya- pero de alguna forma me alegro de que pasara...