Estaré siempre a tu lado

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-¡Oye!

Sintió todo su cuerpo sin fuerzas.

-¡Oye chica despierta!

Apretó los ojos y trató de abrirlos poco a poco.

-¡Demonios no tenemos tiempo, despierta ya chica de las armas!

Su mirada se aclaró y pensó que estaba soñando cuando vió un pequeño animal frente a ella, los ojos completamente negros, una panza que sobresalía del tamaño de sus piernas y brazos y una cola más grande que su cuerpo que parecía hechas de espinas unidas una con la otra.

Se apartó rápidamente un poco asustada, después observó el bosque alrededor de ella, su cabeza dolió cuando recordó todo poco a poco.

-¿Qué es lo que esperas? el chico está en problemas debemos irnos- la pequeña criatura le volvió a hablar a Tenten y está vez ella notó lo lindo que era pero lo reconoció después de unos segundos mirándolo, recordó haberlo visto en un tamaño más enorme y atemorizante.

-Tú... tú eres el Bijū de Gaara- habló sorprendida sin entenderlo- imposible ¿que haces aquí?, tu fuiste liberado...

-En realidad es una larga historia, no estoy aquí en mi totalidad sólo una parte de mí acompaña al chico desde hace tiempo, por eso estoy pequeño ahora- Shukaku se rascó la cabeza incómodo explicando- en realidad... todo fue por qué Gaara se sentía sólo sin mi compañía, así que decidí quedarme un rato con él, bueno una parte de mí la otra disfruta de su libertad en aquel cómodo banco de arena.

A Tenten le sonó que tanta explicación en una sola historia tal vez la mitad era cierta, sonrió de lado, alzó la ceja hacía él y él comprendió un poco sonrojándose.

-Bueno...tal vez fui yo el que lo buscó a él- se río nervioso y luego cambio su expresión a una alarmada- pero ahora no hay tiempo para eso chica de las armas, tienes que ir a salvar al chico.

"Gaara" pensó alarmada, recordó la expresión sin piedad.

-¿Qué es lo que pasó?, por qué él... en su rostro no había ni el más mínimo conocimiento de quien era yo- expresó preocupada.

-Es la habilidad de las piedras cuando están juntas- Shukaku dijo con seriedad- viste a la del sol actuando, esa saca a la luz tus mayores miedos y hasta puede manipular algunos de tus recuerdos en base a eso creando una clase de pesadilla que vives despierto, en cuanto a la piedra de la luna refleja lo que eres en tu interior en el momento y lo saca a la luz, ambas combinadas te dejan en un trance, piensa en un Tsukuyomi Infinito pero al revés, te muestra el peor escenarios de tus inseguridades y quedas atrapados en ellas y sólo puedes controlar a una persona a la vez.

- Gaara...- vio en su mente de nuevo la expresión en su rostro y de inmediato recordó haberla visto en los exámenes chūnin, aquel vacío del que le había hablado a ella- tengo que sacarlo de ahí.

-Asi es niña y sólo tú puedes.

-¿Yo?- preguntó sorprendida.

-Es por qué en este momento tu eres la mayor inseguridad de Gaara- Shukaku cruzó sus manos viéndola con seriedad- hay una debilidad en esa piedra y es que alguien seguro de lo que es por dentro no puede caer en su efecto, cuando le entregó la piedra al enemigo Gaara pensó que aún si la usaba hacía él no tendría efecto pero se equivocó, en este momento Gaara sólo piensa en una cosa y es el miedo a quedarse sólo después de haberte conocido a tí, pensó que lo controlaría pero se equivocó ahora está en el trance donde él se ve en ese vacío, yo mismo traté de poseer su cuerpo antes de que eso le afectará pero me rechazó y es que con esta forma no conservo todo mi poder conmigo en ese momento y sus inseguridades, sus miedos eran demasiado grandes después de aquella pelea contigo.

Por un alma equivocada (GaaTen) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora