Capítulo 14.

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Se Hun sujetó las manos de Lu Han entre las suyas y le sonrió como si quisiera decirle que todo estaba bien, que no tenía por qué llorar. Aún se encontraban en la parte más alta que podía alcanzar la noria, así que aprovechó el momento y se acercó más al contrario, hasta que pudo unir sus labios en un dulce beso, que si bien era el segundo que le daba, se sentía más especial por el hecho de que ahora Lu Han estaba despierto y correspondiendo lo mejor que podía.

Los labios de Lu Han eran bastante suaves, Se Hun se estaba volviendo adicto a ellos en tan sólo unos segundos.

Cuando se apartaron, el rubio soltó las manos de Lu Han y buscó acariciar sus mejillas de manera suave. Susurró un "Te amo" prácticamente encima de los labios ajenos y dejó que su sonrisa se extendiera.

—Por fin lo dije.

—See un...

—Eso estuvo bien, ¿no crees? Lamento que no haya sido precisamente tu primer beso, Lu —le permitió al castaño leer sus labios, ganándose una mirada cargada de confusión de su parte poco después—. Ah... Puedo explicarlo, en serio —dijo acompañado de una risa nerviosa.

Sólo esperaba que Lu Han no se enojara con él después de enterarse de la verdad.

Mientras tomaba lugar aquella escena entre preciosa y un poco incómoda, los demás salían de la casa del terror. Del grupo, Kyung Soo y Jong In eran los que se encontraban más tranquilos, después estaba Chan Yeol, pero Baek Hyun y Yi Xing hasta se veían un tanto pálidos y no podían dejar de temblar.

—Voy a morir. Necesito algo con azúcar, me urge... —Murmuró Baek Hyun, apoyándose contra la primera pared que tuvo a su alcance.

—¿Qué tal si vamos por unos refrescos? —Sugirió Chan Yeol, mirando con algo de pena tanto a Baek Hyun como a Yi Xing, lamentando que ambos hubieran tenido que pasar por una atracción tan aterradora sólo porque él lo había pedido.

—¿No deberíamos buscar a Se Hun y a Lu Han antes de eso? —Cuestionó Kyung Soo, sacando su teléfono celular—. Tal vez no estén muy lejos de aquí. Si ellos también tienen sed, entonces querrán acompañarnos.

—¡Espera! —Chan Yeol prácticamente se lanzó encima de él para quitarle el teléfono—. ¿Qué estás haciendo? No olvides nuestro plan, tonto, ellos tienen que quedarse solos y por fin decirse lo que sienten. Podríamos arruinar todo si los buscamos ahora.

—¿Eh? ¿Ustedes dos tienen un plan? —Preguntó Baek Hyun sin entender.

—¡Oh, sí! Es el mejor plan de todos —contestó el más alto con cierto orgullo—. Dejar solos a Se Hun y a Lu Han es la mejor idea que hemos tenido en semanas. ¿Verdad, Kyung Soo?

—Vamos a darles quince minutos más, a ver qué pasa —suspiró, y sin agregar nada, sujetó la mano de Jong In antes de empezar a caminar hacia el puesto de comida más cercano, sabiendo que ahí podrían conseguir las bebidas.

Incluso Jong In se sorprendió, pero no se quejó para nada. Tenía miedo de perder el agradable momento si hacía algún comentario, así que prefirió quedarse callado y simplemente disfrutarlo, sonriendo un poco.

Baek Hyun, Chan Yeol y Yi Xing voltearon a verse entre sí, también sonriendo de lado ante ese acto. El corazón de Kyung Soo se estaba abriendo poco a poco al de Jong In, era obvio, y aunque eso también podía llegar a ser preocupante, sabían que jamás iban a dejar de apoyar al más bajo.

Se Hun y Lu Han bajaron de la noria después de unos cuantos minutos, dedicándose miradas tiernas y sonrisas algo tímidas. Ni siquiera estaban preocupados por encontrar a los demás.

—¡Qué tonto soy! Olvidé preguntarte una cosa muy importante cuando estábamos allá arriba, no puedo creerlo... —Dijo Se Hun de repente.

Volteó a ver a Lu Han y abrió su boca, pero al final no le hizo ninguna pregunta. Ver a Lu Han sonriéndole así, como sonreía el pequeño niño al que había conocido a sus diez años, era suficiente para sentir que no era necesario decir nada más.

—¿See un?

—Olvídalo —entrelazó sus dedos con los de Lu Han—. Todo está perfecto, mi amor.

Ambos sentían lo mismo, se habían dicho lo que necesitaban saber, lo habían sellado con un beso y a partir de ese punto el resto quedaría en sus acciones, mismas que nacían desde lo más profundo de sus corazones. Nada gritaba más fuerte que un sentimiento sincero. Podían seguir demostrándose su amor sin palabras, estaban seguros de eso.

Fin.

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Y así termina este fanfic.

Muchas gracias a todos los que tomaron algo de su valioso tiempo para pasar a leer, votar y comentar.

Sin palabras [HUNHAN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora