Había pasado un mes y Jeon Somi venía todos los martes y jueves a venderme galletas con una sonrisa y un carrito rojo.
— Buenos días, señor amigo Ong Seongwu. Mi nombre es Somi Douma Jeon, soy parte del grupo de exploradoras avejitas del conocimiento, brigada 101. Estoy en mi busqueda de mi insignia de vendedora de galletas — Somi repetía eso de conocimiento, decía que era parte del protocolo que le enseñaban a las niñas explotadoras, en mi humilde opinión parecía que están entrenando un ejército con faldas y trencitas — Tengo galletas de vainilla, galletas de coco, galletas de avena, galletas de limón, galletas de maní, galletas de ciruelas y galletas de chocovainilla.
— Dejeme adivinar joven Dama Somi, las galletas de ciruela saben a remedio — dijé con una sonrisa, siempre había una galleta que sabía a remedio.
— En realidad no, saben a la comida de mi abuela — hizo una mueca de disgusto — con tantas frutas y eligen a la ciruela para hacer galletas — se quejaba de manera infantil — la gente no tiene mente para los negocios o tal vez las galletas de pizza son muy perfectas para ser creadas.
— Si las galletas fueran de pizza, no hubieran llegado a ni al portón de mi casa — comenté seguro, esas mejillas gorditas lo decian todo.
— Si las galletas fueran de pizza, la industria del pastel se acabaría. Nadie compraría pasteles por comprar galletas de pizza — era una niña con una forma de ver la vida un tanto diferente a los demás de su edad, ella prometia ser una excelente mujer de negocios.
— No lo creo, los pasteles de de red velvet son muy buenos — salí y cerré la puerta para sentarme en uno de los sillones que deje afuera de la mansión.
Así Somi agarró su silla y como dos los martes y jueves compartimos galletas y historias.
— Soprendentemente a Canoli, no le gustan los canolis — dijó mientras se apoderaba de las galletas de chocovainilla — Ese gato es todo un caso señor amigo Ong Seongwu, le gustan los vegetales con queso fundido, pero ni se acerca a un canoli ¿Puede creer eso? — fruncia el ceño y metía una galleta a su boca.
— Realmente pensé que los gatos solo comían pescado — nunca había tenido una mascota así que no sabia que decirle.
— No, a canoli lo entrene yo bien. Los peces son amigos, no comida señor amigo Ong Seongwu — no entendía a lo que se refería con esa sonrisa. — Canoli puede ser un gato glotón, pero es bueno escuchando, más que mi familia. Mi papá prefiere a mi hermana menor, supongo que ella es más linda y más interesante que yo al parecer; a pesar, que tengo 123 insignias no me dijo nada nunca y mi hermana tiene 3 apenas porque se la pasa haciendo cosas para Margaret y él la felicitado por todas.
— Supongo que él está seguro que usted puede con todas y como su hermana no puede la alienta — trate de animarla un poco.
— En realidad a pesar que tengo 9 no soy tan tonta para notar la preferencia de mi padre hacia mi hermana, le dije que venía a la casa más alejada del pueblo que tiene un cementerio y un vecino que nunca ha visto que siempre compra mis galletas y le dio igual, solo dijo que no traíga a mi hermana para acá — metió más galletas a se boca — no lo culpa realmente ella es más bonita y encantadora.
Cada vez que veía a la señorita Somi siempre era el mismo pensamiento, debía cuidar bien de su mente tan pura para el amo. Él al verla la amaría y tal vez la llevaría a la paz alejando la de todo el mal de este mundo.
— ¿Y su madre, señorita? — no la mencionaba mucho, casi nunca a decir verdad.
— Ella hace todo lo que dice papá, no hay mucho que hablar de ella — miró al portón gris haciendo una mueca — Una vez me dijo que fui un error, pero sencillamente no la entiendo a que se refiere con eso. Tal vez es que no le gusta que sea mestiza, pero mi hermana menor también lo es.
No fue planeada, la mire con cierta tristeza y la entendía perfectamente. Yo nunca fui planeado y mi padre siempre quiso más a mi joven hermana, sentia exactamente lo que ella sentía y sabía lo doloroso que era aunque no llorará.
— Mi amo dice que todos tenemos una razón de ser, hasta los errores como nosotros. Dicen que las personas no ven la pureza de nuestros corazones— comenté con una sonrisa y eso también la hizo sonrier.
Cuando se fue yo fui al estacionamiento y me monte en la vieja camioneta de colores psicodelicos que siempre me acompañaba, fue al pueblo, a una ferretería para ser exactos, había cosas que me parecieron tan nuevas y curiosas pero las ignore para comprar y hacer lo que debía. Tal vez fue el deseo mio de siempre tener un lugar y cuando encontré uno al lado del amo me hizo muy feliz, así que yo también quería darle un lugar a la señorita Somi para que no se sintiera sola o como un animal. Compre madera, pintura morada, clavos, pega, entre otras cosas para construir una pequeña casa afuera de la mansión a la joven señorita donde podría jugar y ser el centro de atención que ella quería.
Cuando la termine después de un mes justo el día que cumplía año y se la regale y de la emoción lloro. Parecía que nunca había recibido algo de ese tipo en su vida, ordene pizza y le coloqué 10 velas, en la casa adentro cabía una mesa y exactamente nuestros dos sillones, un pequeña cama para canoli y los pocos juguetes de la señorita.
— Pida un deseo joven señorita Somi — dije con emoción, nunca había estado en la fiesta de cumpleaños de un amigo.
Ella cerró los ojos y soplo las velas, para después abrir sus ojos aguantando las lágrimas, decía que ya había llorado mucho.
— Muchas gracias Seongwu — dijó ella mientras miraba todo con tanta emoción y no quería parpadear — estoy parece un bonito sueño, nunca pensé tener un amigo o una fiesta de cumpleaños así. Hasta Canoli tiene su gorro de fiestas.
Su gato estaba dormido con su gorro de fiestas, era un gato naranja demasiado gordo y con patas muy cortas, realmente era muy gracioso verlo caminar.
— Todos nos merecemos un lugar y ser tratados como lo que somos, si eres pura de corazón — le dije con una sonrisa desde mi sillón y ella me pasaba una rebanada de pizza.
Así comenzó una linda amistad que duraría años.
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DEVOCIÓN »»»» Ongniel (Wanna One)
FanfictionDevoción: Sentimiento mediante el cual se expresa el amor a Dios. Es también la irresistible atracción hacia una idea, una persona, un rey, un santo, un dios, una persona amada o un ser vivo. Ong Seongwu es devoto a su único Dios, lo ama con fervor...