Encuentro Oportuno

8.

Al tercer sonido de la llamada entrante, se dió cuenta de que nunca hasta ahora le había pesado contestarle el teléfono a ella, había pasado muy poco tiempo para que eso estuviera pasando, pero así era. Miró a Alexa por un segundo quien también tenía su mirada fija en ella, entonces tomó su celular y contestó.

- Hola - Dijo Clarke al iniciar la llamada.

- ¿Estabas ocupada? ¿Porqué tardaste tanto? - Contestó Nylah con un tono un poco demandante. 

- No, sólo, bueno, no es nada. ¿Cómo estás? No has contestado mis mensajes. - Respondió la rubia un poco nerviosa al sentir la mirada curiosa de Alexa sobre ella.

- Sí, lo siento, he estado bastante ocupada en el hospital. Mi auto se ha descompuesto y quería ver si podía usar el tuyo. - Dijo Nylah llendo directamente al grano.

- Ah, era eso. - Contestó la rubia con tono desganado. - Sí, está bien. Pídele las llaves a Octavia o a Raven.

- Gracias bebé. Nos vemos pronto, cuídate.

Y colgó, sin que Clarke pudiera responderle nada. La verdad es que las actitudes de Nylah comenzaban a ya no sorprenderle mucho, había comenzado ya a acostumbrarse a ello después de varios meses, pero ésta vez lo necesitaba, necesitaba que pasara algo, que Nylah hiciera algo que la ayudara a aferrarse a lo que fuera que tenía con ella, porque aquella castaña de ojos verdes comenzaba a llamarle demasiado la atención, y era como poner un automóvil en automático, funcionaba sin tener que hacer cambios.

- ¿Seguimos jugando? - Preguntó algo dubitativa la castaña.

- Sí si. - Respondió Clarke mientras dejaba su celular de lado y regresaba la vista al juego que tenia frente a ella.

Miró cómo la ojiverde luchaba contra su duda de decir o no algo, y al final sólo soltó un "¿Todo bien?", al cual la rubia sólo asintió para luego enfocarse a sacar su pieza ilesa del JENGA.

Así pasaron 2 o 3 horas, Clarke podía sentir la curiosidad de Alexa, pero la ojiverde nunca se atrevió a preguntar nada, lo extraño es que aún así aquel rato juntas no dejaba de sentirse bien y sus ganas de querer seguir conociéndola no se detenían.

XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX

Esa noche le costó quedarse dormida, se habían ido a dormir cerca de la 1:30am, eran 2:48am y ella seguía sin cerrar los ojos. Giró su cabeza para comprobar que las casi inaudibles respiraciones que alcanzaba a escuchar en el silencio absoluto eran de la rubia que dormía al otro lado del cuarto y también porque el pequeño rayito de luz de luna que se metía por una muy delgada ranura del ventanal cubierto la apuntaba a ella y hacía que sus cabellos dorados parecieran de plata.

Pensó que hacía mucho no se sentía así de tranquila, que hacía mucho que no se sentía presionada por nada, llevaba muchos días sin poder disfrutar de algo y lo estaba haciendo ahora, incluso sonreía y ni una pizca de ello era forzado, se sentía muy bien, tanto que en ese mismo segundo sonrió, así mirando al techo.
Una sonrisa casi fugaz que comenzó a opacarse cuando su mente le trajo el momento en el que Clarke había recibido aquella llamada que le causó mucha curiosidad.

Clarke no había dicho nada que revelara mucha información sobre la llamada o sobre quién le había llamado, mencionó a Raven y a Octavia, pero ella ya sabía que eran los nombres de sus mejores amigas, la rubia se lo había contado. Y pues no entendía nada, pero las expresiones de la ojiazul le habían dicho mucho, aquella llamada en cuestión de segundos le cambió el semblante a Clarke y supo que entonces se trataba de alguien importante para ella. ¿Será que Clarke estaba enamorada de alguien o sufriendo por alguien?