Mil Vidas (Kinktober 2018 Thorki)

5. Masoquismo

Un latigazo enrojeció la piel morena del rubio, ahogando un gemido entre la mordaza y la posición se su cuello.

—Te dije que no te movieras— sentenció Loki, relamiéndose al ver tan hermoso cuerpo a su merced— Sabes que debes obedecer para recibir tu premio ¿Cierto?— Thor asintió entre espasmos de placer y la incómoda posición en la que se encontraba: atado con los brazos en la espalda y los muslos completamente abiertos, dejando ver su endurecido miembro necesitado de atención— Bien, sé que te encanta complacerme ¿Verdad? —de nuevo asintió con dificultad— Entonces...— tomó una venda y la colocó en los hermosos ojos celestes del rubio.

En cuanto se aseguró de que Thor no podía ver nada, desató la soga de sus piernas liberándolas de tanta tensión. Tomó la cadena que abrazaba el cuello del mayor y tiró levemente de ella para indicarle que podía moverse para ponerse de pie.

—Ahora quiero que camines hacia mí— obedeció sin objetar con pasos lentos previniendo una caída pero no lo suficiente como para que Loki lo obligara a avanzar con la cadena. Unos cuantos pasos más y el ojiverde le ordenó parar. No dio un paso más— Bien, ahora, delante de ti, hay una silla. Siéntate— giró su cuerpo y un escalofrío lo recorrió al sentir el asiento tan helado chocar contra su piel caliente, ardiente en deseo.

En cuando se acomodó, Loki volvió a aprisionar sus piernas con una soga contra las patas de la silla para después quitarle la mordaza y regalarle un suave beso en la comisura de sus labios.

—Lo estás haciendo bien, cariño. Mereces una recompensa— Thor pudo escuchar cómo su amo removía varias cosas hasta sentir un pellizco frío sobre sus pezones. El Dios de las mentiras había puesto sobre ellos unas pinzas que se unían por un cable delgado— ¿Cómo se dice?.

—G-Gracias, amo— sonrió y le dio un beso apasionado en los labios, provocando que el portador de Mjölnir se estremeciera y su miembro goteara.

—Me siento complacido, te haré sentir bien— bajó una de sus manos hasta el falo duro de Thor y comenzó a masajearlo arrancándole gemidos sonoros y roncos— No vas a correrte hasta que yo te lo permita ¿De acuerdo?.

—S-Si... amo— Las caricias comenzaron suaves, lentas y tortuosas. La piel de la palma del azabache se humedecía con el líquido preseminal que arrojaba el miembro del Dios del trueno.

El rubio intentaba contenerse pero los gemidos escapaban de su garganta por el placer.

Divertido por sus intentos fallidos, Loki terminó por silenciarlo con un profundo y largo beso en donde recorrió la cavidad con su lengua. Cuando sentía el temblor inminente del orgasmo de su sumiso paraba las caricias, provocándole más pero retrasando el clímax.

Después de realizar ese juego varias veces, Thor ya no podía contenerlo más.

—A-Amo... P-Por favor... quiero venirme.

—Aún no te lo he permitido.

—¡Ah! P-Por favor, no p-puedo más... ¡Amo!.

—Muy bien, termina para mí— unos cuantos roces rápidos y su semilla de esparcía con fuerza sobre su vientre y pecho, así como en la mano de su amo.

—G-Gracias, amo... gracias— el menor se llevó la mano a la boca y lamió los restos de semen que resbalaban entre sus dedos.

—Lo has hecho de maravilla. Es hora de darte lo que prometí— el rubio sonrió aún con la respiración agitada.

De nuevo desató las piernas del sumiso y lo llevó a la cama— Ponte en cuatro— obedeció inmediatamente y recibió la lengua caliente y húmeda del menor en su entrada.

—¡Ngh!— por algunos minutos se dedicó a dilatar la entrada escuchando los renovados gemidos y jadeos.

—¿Lo quieres dentro?— bajó sus pantalones con todo y ropa interior y se restregó contra el trasero firme frente a él— ¿Cuánto lo quieres?.

— ¡Demasiado! Amo, p-por favor. Te quiero dentro— de una estocada certera se introdujo dentro del mayor comenzando el vaivén desenfrenado mientras le tomaba del cabello con fuerza.

Con lágrimas en los ojos, el rubio gritaba de placer al sentirlo tan duro y profundo.

Loki llegaba con cada movimiento al punto dulce de Thor haciéndolo temblar contra las sábanas de la cama.

El placer que ambos experimentaban no se comparaba en absoluto con nada, tan concentrados en aquel vórtice que incitaba a la locura al que Thor no pudo resistirse. Movía sus caderas al ritmo de las de su amo para que lo penetrara más a pisa, más adentro y éste mordía su espalda cada cierto tiempo para obligarle a arquearse más de lo que lo hacía.

Tener ese poderoso cuerpo a su merced le producía una satisfacción increíble. Le provocaba romperlo y armarlo a voluntad y sabía que el rubio se lo permitiría sin poner resistencia.

Él, el Dios del engaño y la travesura había podido someter al Dios del trueno.

Se relamió los labios al pensarlo y tomó las muñecas del mayor, aún atadas a su espalda, para penetrarlo aún más profundo.

—¿Q-Qué pensarían al ver al poderoso Señor del Trueno de esta manera?— susurró en el oído del sumiso haciéndolo jadear— ¿Qué dirás si alguien te encuentra así conmigo?.

—Q-Que... ¡ngh! ¡Que sólo soy de mi amo!.

—¿Y quien es tu amo?.

—L-Loki...

—Repítelo.

—S-Sólo soy de... ¡M-Mi amo, Loki!.

—¡Ah! G-Ganaste tu premio... ¿En dónde lo quieres?.

—¡A-Adentro! Lléname, a-amo— un gruñido y Loki derramó su esencia dentro de Thor mientras apretaba sus caderas disfrutando de las contracciones internas del orgasmo del mayor.

—B-Bien. Has sido un buen chico.

—G-Gracias, amo— un beso suave y tierno fue la señal de que su juego había terminado por hoy.

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Me costó mucho trabajo escribir este drabble. Nunca había puesto a Thor como uke y jamás había escrito sobre el tema así que fue un reto doble. Hice lo mejor que pude, espero si haya cumplido con la expectativa XD.