– Muy bien. ¿Qué es lo que quiere saber?
El chico cruzó sus manos y recargó su barbilla sobre ellas, mientras sus codos estaban apoyados sobre la mesa.
– ¿Por qué un ángel trabaja de maid?
– La familia Dahl es muy devota, en especial Madame Bonnet, ella...era considerada un ángel, era una mujer muy bondadosa, desde niña lo fue. Ella...tenía un alma pura, sin maldad ni dolor, y toda su vida fue cuidada por un ángel también. Cuando la señorita Tn nació...tuvo problemas, casi muere, era un bebé muy débil, pero la mujer que siempre acompañaba a Madame Bonnet, aquel ángel, logró salvarla. Desde entonces, se me dio la orden y misión de cuidar de la señorita. He estado cuidándola desde que nació, pues es muy débil.
– Ya veo... –pensó un momento.– Madame Bonnet, ¿De qué falleció?
– Una enfermedad muy grave. Tuberculosis. Ella siempre fue una mujer de salud débil, propensa siempre a enfermarse, por eso sus padres, y más tarde el Duque Dahl, cuidaron mucho de ella, teniendo cuidado de a dónde salía y demás.
– Tuberculosis, ah.
– La peste blanca. Sus últimos días fueron horribles. Tosía sangre, una tos frecuente, tenía escalofríos, sudor nocturno, fiebre, fatiga, casi no comía... –tragó saliva.– La señorita Tn sufrió mucho al ver tan mal a su madre. Y, lamentablemente, falleció el día de su cumpleaños.
– ¿Y qué hay de Matthew?
– Él era el hermano mayor de la señorita Tn, ella lo llamaba su "caballero blanco", pues él siempre la cuidaba y protegía de todo.
– ¿Cómo falleció? ¿Qué pasó ese día?
– Madame Bonnet empeoró, tosía mucho y su dolor en el pecho había aumentado. El joven Matthew estaba en clases cuando ocurrió...La señorita Tn llamó a la escuela llorando, pidiendo hablar con él, y cuando lo comunicaron al teléfono, ella le contó lo que ocurría. El joven Matthew salió rápidamente de la escuela, su mayordomo había ido a buscarlo, y en el camino le ordenó al conductor ir más rápido. Estaba lloviendo mucho ese día, y las calles no eran seguras –hizo una pausa.– El carruaje se salió del camino y chocó, matando a todos, el conductor, el mayordomo, y al joven Matthew. Scottland Yard no tardó en llegar a la escena y dar la noticia a la familia, noticia que Madame Bonnet escuchó, pues había salido de su habitación en cuanto escuchó la voz del jefe de la policía, y...bueno, la noticia le causó un ataque.
– ...
– Mi señorita...se culpó desde entonces de lo que ocurrió. Es más, esa noche, tras el funeral, intentó suicidarse. Afortunadamente, pude salvarla. Su padre estaba destruido, y le pidió que por favor no volviese a intentarlo.
– ...Comprendo –hizo una pausa.– Entonces su madre y su hermano fallecieron el mismo día.
– Mi señorita aún se culpa de ello. Es por eso que no habla de Madame Bonnet o del joven Matthew, ni de su cumpleaños.
– Entonces es por eso que no quiere festejar su cumpleaños, ¿No?
– Exactamente. Ese día...iba a realizarse una fiesta de cumpleaños para ella, todo estaba listo, pero...bueno, Madame Bonnet tuvo un ataque. Mi señorita sufrió mucho ese día, un día que debía ser de festejo y alegría.
– Entiendo –suspiró.– Creo saber entonces el por qué ella cree ser de cristal. Ella enfermó de esto ese día, ¿Verdad?
– Esa noche, sí.
– Ya veo.
– ¿Algo más?
– ...No. Por ahora no.
– Bien.
– Puedes retirarte.
– Con permiso.
La maid hizo una reverencia y salió, cerrando la puerta tras de sí y regresando al cuarto de su ama.
Ciel quedó pensativo, en pleno silencio. Ya ni siquiera recordaba el por qué hacía esto por aquella chica, pero terminaría.
[Día siguiente]
La primera semana había pasado, quedaba una más. Tn había decidido no salir de su cuarto ese día, se negó rotundamente a las insistencias de su maid y el Conde, así que desayunó y almorzó ahí dentro; además de eso, no había hablado mucho desde que había despertado, sólo había dicho lo justo y necesario, y nada más, mucho menos palabras de las que decía antes.
– Señorita, ¿No quiere que abra la ventana? Para que entre algo de aire y-
– No –negó seria.
– ¿Y si vamos a la biblioteca?
– No.
– Señorita, debería-
– Cállate –ordenó.
– ...Lo siento.
Tn abrazó su muñeca y siguió dibujando. Estaba sería, más seria que de costumbre. Juliette suspiró y se limitó a quedarse ahí, de pie a un lado.
De pronto, se oyó música venir del piso de abajo. La chica levantó la cabeza de su libreta con curiosidad, reconocía aquella dulce melodía.– Silence... –murmuró.
En efecto, aquella música que resonaba por toda la mansión era "Silence" de Beethoven. Pensó en ignorar aquello, pero tenía una debilidad por la música, así que se levantó con cuidado de la cama y se envolvió con la sábana que siempre llevaba, sujetándola con fuerza y abrazando a su muñeca.
– ¿Irá a ver? –preguntó la maid.
– ...Sí.
La mujer asintió y se acercó a la puerta, para quitarle la llave y abrirla; cuando la joven salió, ella la siguió y volvió a cerrar la puerta con seguro. Ambas bajaron con tranquilidad, hasta llegar al lugar de donde provenía la música: el salón principal de la mansión. Tn se detuvo en el umbral y examinó todo, viendo aquella sala con sus paredes azules y sus muebles de madera lustrada, sobre uno de estos se encontraba el gramófono, el cual estaba encendido y de donde provenía la dulce melodía de "Silence", de aquel compositor que a ella tanto le gustaba: Beethoven.
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Glass Delusion 💎 Ciel Phantomhive
Fanfic❝Ilusión de Cristal: manifestación externa de un desorden psiquiátrico en el que las personas creen que son de vidrio y, por lo tanto, son susceptibles de romperse.❞ Tn es una joven de 13 años perteneciente a la alta burguesía inglesa. Tras aconteci...