"Compartiendo Casa con Conocidos & Desconocidos"

Extra 3

4 meses después del fin del Reality

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Harley bajó su taza luego de darle un sorbo a su té.-Entonces.-Miró al hombre frente a él.-¿Me dirás porque me hiciste venir a Nueva York? 

-¿Qué no puedo decirle a mi amigo que venga a verme?

-Si puedes hacerlo, pero considerando que sabes que paso los fines de semana con mi novio y que no me gusta cambiar eso, me siento intrigado porque cuando te dije que no vendría, decidiste decirme que esto era de vida o muerte. Así que estoy esperando.

Stephen no respondió, solo tomó un sorbo de su té. Harley suspiró y le dio una patada por debajo de la mesa.

-¿Qué... ¿Por qué fue eso?

-Habla.

-Bien. Quiero pedirle a Everett que seamos oficialmente una pareja.

-¿Qué?-Gritó el menor sin importarle si alguien lo escuchaba.-Tú...-Lo apuntó.-Me hiciste venir aquí, dejar a mi novio con mi madre que es probable que lo esté amenazando cada cinco segundos aunque lo ama, hiciste eso sólo porque quieres pedirle a Everett ser tu pareja ¿Es en serio?

El pelinegro miró a su alrededor, notó que algunos los miraban confundidos.-Necesitaba ayuda, eres una de las personas en quien más confío, Harley.

-Lo sé, Stephen, pero pudiste ser honesto conmigo.-El menor se rió un poco.-Aún no entiendo de que te sirve mi presencia aquí.

-No sé como hacerlo. Él es quien siempre da los primeros pasos, él fue quien me besó primero, sabes eso.

Harley asintió, sonrió un poco.-¿Ya tuvieron sexo?

-No.

-¿Qué?

-No queríamos tomarnos las cosas demasiado rápido, sé que sabes de eso. Hace dos meses recién te acostaste con Peter.

-Comprendo, es una lástima que Everett aún no sepa lo caliente que eres en la cama aunque él no verá lo mismo que yo porque en lo nuestro fuiste el de arriba y con él irás abajo.-Harley se rió.-Lindo.

Stephen rodó los ojos.-¿Por qué crees que iré abajo? Te lo demostré a ti, voy arriba.

-Mira conmigo no cuenta porque si o si tenías que ser el de arriba, así que...-Se encogió de hombros.-Llámame cuando te follen.

-Lo que sea, Harley. Ahora, ¿Me ayudas?

-Bien. ¿Qué haz pensando?

-Nada. Es sólo que he pensado lo que todos hacen, una cena, una estúpida confesión en un parque, no lo sé, Harley, lo que hace todo el mundo.

Harley negó con una leve sonrisa, le dirigía una mirada dulce.-Ese no eres tú. Sé que quieres a Everett, pero no puedes pedirle ser tu pareja con algo que no te identifica.

-¿Estás seguro?

-Pienso en esto. Peter y yo, él me pidió ser su novio mientras bailábamos una canción que él ama y fue ridículamente cursi, me consiguió esto.-Dijo mostrándole el collar con su dije de girasol.-Esto es algo que él sabe que amo. Eso fue totalmente perfecto para nosotros. Busca eso para ti y Everett. Piensa en algo que él amaría.

-Cadáveres.

Harley se rió.-Algo más.

-Yo...

-Te diré algo.-Harley sonrió.-Él ama cuando tú eres solo tú, ya sabes, el verdadero tú sin ego o estupidez. Piensa en algo con eso.

Stephen sonrió.-Gracias por venir aquí.

-Me necesitabas. ¿Dónde más estaría? Ahora, ¿Me puedo ir?

-¿No te quedarás?

El menor negó.-Ya hice lo que tenía que hacer aquí y por mucho que disfrute tu compañía, Stephen, tengo a alguien esperándome en Tennessee.

-Si que estás enamorado.

Harley sonrió.-Lo sé.

*********

Stephen miró a Everett entrar a su departamento, era un trato que tenían, los fines de semana la pasaban juntos en su departamento o en el de Everett, eso no importaba mientras estuvieran los dos juntos.

-Te ves cansado.

-Estuve horas interrogado un idiota.-Everett dejó caer en la mesa las 5 carpetas que llevaba, sabía que no tenía permitido revisar eso. Secretos del Gobierno y eso.-Al final dijo todo, pero hubiera preferido que lo hiciera antes de pasar 8 horas ahí encerrado.

-¿Café?

-Muy cargado.

-De inmediato.

Everett se sentó en el sillón cerrando los ojos, sólo quería descansar un momento, se habría ido a dormir, pero no ha visto al mayor desde una semana.

-Aquí está.-Abrió los ojos recibiendo la taza de café. Stephen se sentó a su lado.-Pensé que Harley estaría contigo. Dijiste que venía para acá.-Tomó un sorbo del café y estaba tal como le gustaba.-¿Qué pasó?

-Bueno, resulta que sólo se quedó un momento porque resolví mi problema y decidió irse con Quill, ya sabes, esos dos no pueden estar lejos por demasiado tiempo.

-Entiendo. ¿Cuál era ese gran problema que tenías entonces?

Stephen se sonrojó lo cual lo extrañó además el pelinegro no lo miraba directamente.-Yo... ¿Puedo preguntarte algo? Sé honesto.-Asintió.-¿Hay algo de mí que te gustaría cambiar o que no te guste tanto?

-No, no hay nada.

-Everett.

-Stephen, no soy quien para juzgarte, todo eso que haces, que dices, todo eso te hace tú y si no hicieras algo de eso dejarías de ser tú.-Everett bebió más de su café.-Ahora, ¿Por qué me preguntas eso?

-No quiero que decidas acabar con esto.-Los apuntó a ambos.-por algo que pueda cambiar o que no te guste de mí.

Everett suspiró dejando la taza en la mesa de centro.-Stephen estamos juntos desde hace unos meses y antes de eso fuimos una especie de amigos, jamás me molestó algo de ti, te lo dije, no pienso diferente o mal por las cosas que haces o haz hecho. Eres tú.

-Everett, ¿Tú serías mi novio? Mira, si no quieres lo voy a entender y no te exig...

-Si.

-Y... Espera ¿Qué?

-Dije que sí.

El pelinegro empezó a sonreír.-¿Hablas en serio? ¿Quieres ser mi novio? ¿Fue un buen momento para preguntar esto?

-El mejor momento. –Everett tomó su mano.-¿Qué mejor que tú queriendo saber otra vez si no pienso mal de ti y nervioso? El Stephen que conozco.

Stephen sonrió al parecer si pudo hacer una propuesta siendo él mismo.-Sé que quizá no sientas esto o quizá si, pero...-Negó.-Everett, te quiero.

-También te quiero.

-¿Lo...

-Si. Es verdad.-Everett llevó su mano desocupada a la mejilla del pelinegro.-¿Sabes que Christine va a enloquecer con esto?

-Lo sé.-Su ex novia había estado insistiendo demasiado para que ambos de una vez se pusieran de novios.-Yo se lo diré cuando la vea.

-Perfecto.-Stephen sonrió y se tiró a besarlo suavemente, sintiendo como Everett hacia el beso más rápido y más exigente.

Stephen terminó sentado en el regazo del otro aún besándose. Nunca antes se había sentido de esta manera, nunca antes se había sentido tan correcto estar con alguien.-¿Por qué estás sonriendo?

-Sólo estoy feliz.-Respondió el pelinegro.-Sólo eso, Everett.

*********

Solo un aviso.

El nuevo Reality está subido ya, por si quieren leerlo.

Mucho Amor.