Capítulo 16: viejas conexiones

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Terminamos de preparar la cena con Denise y ayudé a aprontar la mesa, mientras Niall y Greg seguían hablando en el living, recordando historias de pequeños, con Denise las escuchábamos desde la cocina y nos reíamos de ellos, de lo que hacían hace años, eran chicos populares y traviesos, nunca me hubiera imaginado a Niall tirando el café de una profesora solamente porque él insistía en que una parte de un examen estaba correcto y ella decía lo contrario. Es muy calmado ahora a comparación de eso. 

-La comida está pronta! - Denise gritó desde aquí para que ellos escucharan y vinieran, al igual que los niños

Llegaron todos a la cocina y se sentaron al rededor de la mesa, comenzaron a servirse cada uno en su plato, mientras yo me encargaba de ayudar a James, y luego le corté su carne en trocitos.

-Si me disculpan creo que iré a descansar un rato - dije algo apenada, no quería estar ahí, en la misma mesa que Niall luego de todo, no me sentía cómoda.

-Te sientes bien? - Greg soltó luego de que todos me quedaran viendo con el ceño fruncido

-Sí, sí, solo no tengo apetito, que disfruten la comida - les dije con una sonrisa mientras caminaba hacia la puerta - James - llamé y él me miró - si necesitas algo llámame, si? - le sonreí y él con su boca llena asintió, lo amaba.

Mientas me retiraba quedé pensando en la reacción de Niall recién, solo me quedó mirando neutro, no soltó emociones, me duele verlo así, ver que no le importo, sé que aún tengo ese sentimiento de amor por él y aumenta cada vez que vuelvo a mirar sus ojos, no podía estar allí, no puedo permitirme estar cerca de él, entre el sentimiento de culpa que revivió hoy y el amor, logra hacerme sentir muy mal.

Llegué a mi habitación y me tiré en la cama, mirando el techo y pensando en muchas cosas, pensando en como actuar con respecto a Niall y James, él solo vino de visita un par de días, cuando sea el momento que se vaya, qué pasará? se lo querrá llevar? lo hará de mala manera o hablaremos? porque sé que no se va a quedar de brazos cruzados e irse como si nada, no después de ver lo que le importa e importó desde el primer momento...maldición, todo estaba tan bien!

-Mami...mami...- sentí que unas pequeñas manos tocaban mi cara y sentía un peso sobre mi estómago, abrí mis ojos y me encontré con los ojos más lindos que vi en mi vida. Me quedé dormida sin quererlo.

-Hey - medio sonreí mientras me sentaba en la cama, tomando a James en mi falda para que no se cayera - pasó algo?

-Quiero dormir - soltó haciendo una mueca de frustración

-Y no puedes dormir? - reí al ver su carita

-Hay mucho ruido - dijo con sus ojos aguados y en ese momento sentí como un trueno sonaba y se adueñaba de mis oídos por un segundo

-Ven - lo agarré y acosté en la cama, dormíamos juntos, ya que era una cama grande. Lo tapé a causa del frío que hacía - descansa, me quedaré aquí hasta que duermas, si? - asintió acurrucándose entre las frazadas - buenas noches mi bebé, que sueñes con los angelitos - dije con una sonrisa, acariciando su pelo, y dándole un beso en la frente, como de costumbre cada noche, hacía un par de meses que había descubierto que él no se dormía sin eso, no sabía exactamente porque, pero era lindo por una parte, un lazo que nos unía.

Esperé un rato acariciándolo y observando el hijo tan bonito que tenía, hasta que pude notar que cayó en un sueño pesado, luego de estar jugando casi todo el día, era obvio, siempre terminaba rendido. 

Sentí un poco de hambre, por lo tanto, decidí ir a la cocina para ver que podía comer, eran casi las doce de la noche, ya estaba toda la casa oscura y silenciosa, excepto por la lluvia que caía a cántaro, todos estaban durmiendo de seguro.

Fui hacia la heladera y encontré algunos refuerzos ya hechos, siempre había, era una linda costumbre de la casa. Estaba comiendo tranquilamente hasta que un relámpago, de repente, iluminó todo el patio trasero de la casa, y con ello, pude ver una figura parada en el medio de la lluvia

-Mierda - solté pegando un salto en el lugar, lo primero que vino a mi mente fue una persona que intentaba robar la casa, tenía el corazón latiendo muy rápido, pero muy rápido, nunca tuve una experiencia así, no sabía que hacer. Lo primero que se me ocurrió fue ir al cajón y tomar un cuchillo, sabía que no lo usaría porque nunca le haría daño a alguien, pero...era algo. Corrí hacia las llaves de la luz y encendí la de afuera.

Y sentí como me paralizaba por una milésima de segundo hasta que la respiración volvió a mí, el aire a mis pulmones, mi corazón a su lugar con sus latidos calmándose muy lentamente, con ello lo tembloroso de mis manos. Porque la persona que estaba parada allí afuera, era Niall.

-Mierda - lo mataría, qué hacía allí?, abrí el ventanal que impedía el pase al patio y caminé hacia él, acompañándolo en su locura de meterse bajo toda esta torrencial tormenta - que rayos estás haciendo aquí? - pregunté un poco a gritos, para que me pueda escuchar

No obtuve respuesta, su mirada estaba perdida, estaba absolutamente cubierto de agua y solo llevaba puesta una remera y un pantalón de chándal

-Acaso estás loco? vamos adentro, ya - tomé su mano sin darme cuenta y en ese mismo momento sentí una corriente recorrer mi brazo hacia mi pecho, hacía tiempo que no pasaba eso. Pude notar como él también sintió lo mismo, ya que sin pensarlo miró nuestras manos y luego su mirada buscó mis ojos, hasta que los encontró.

-Mía... - susurró con tristeza en sus ojos, pude ver como su expresión cambiaba con ganas de derramar lágrimas, pero no iba a permitir que eso pase, no por mi.

-Hey, no llores - volví unos pasos atrás y me coloqué frente a él, mientras situaba mi mano libre en su pecho, no había soltado su mano aún - vamos adentro y charlamos, si? - traté de convencer, aquí afuera íbamos a enfermarnos con este frío y lluvia.

-Quiero...pensar con el sonido de la lluvia - contestó, mirando mis ojos, este hombre iba a matarme

-Estás loco? te vas a enfermar, tonto - solté con tono lógico. No obtuve respuesta sonora, pero sí tuve respuesta cuando se acercó más a mi, y colocó su frente junto a la mía por un par de segundos, hasta que habló

-Te sigo importando - no fue pregunta

-Obvio que me sigues importando, por qué no sería así?

-No lo sé...tal vez ya había alguien más en tu vida, tal vez James ya tenía un padre mejor que yo, muchas cosas pueden haber pasado - su voz era cortada, podía sentir que tenía un nudo en su garganta al pronunciar esas cosas

-No - lo miré a los ojos con firmeza - no hubo absolutamente nadie en mi vida después de ti

Pude ver como su cara cambiaba, como sus ojos se abrían con un poco de sorpresa, como logró respirar hondo luego de bastante rato sin hacerlo, me tomó de sorpresa y en un parpadeo sus labios estaban encima de los míos, enganchándose perfectamente. Me tomó un segundo procesarlo, miles de sentimientos pasaron por mi pecho, pero solo sabía una cosa, seguiría ese beso como si fuera lo último que haga en mi vida.

Todo fue un errorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora