•CAPITULO 1•

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-¡CRISTIAN! ¡TE DIJE QUE NO DEJES TODO TIRADO!-

-¡NO LO DEJE TIRADO! LO DEJE APOYADO EN EL PISO- Grito hacia mi en el sillón mientras reía.

Rodé los ojos y suspire. Así es,Cristián y yo nos habíamos mudado juntos hace 1 año y medio. Luego de que él me sacara de la clínica psiquiátrica y se hiciera cargo de mi decidimos mudarnos juntos a un departamento mas cerca de nuestro trabajo,es decir,la bombonera. No voy a mentirles, es difícil convivir con Kichan. Es bastante desordenado. Pero nada que no se pueda solucionar.

Tome toda la ropa de él que se encontraba regada por todo el piso y fui hasta el living donde se encontraba Kichan mirando fútbol. Tome el canasto con su ropa,lo levante y deje caer todo encima de él.

-Sos una...-

-ssshhhh- lo interrumpi- limpie su ropa señorito. Yo no soy su sirvienta- dije volviendo al dormitorio.

-¡Pero estoy cansado!- se quejo.

-¡Yo también estoy cansada! Sin embargo sigo ordenando y limpiando Cristian- respondí algo enojada. A veces él era algo egoísta. Yo entendía que ser jugador de fútbol profesional era agotador,pero yo también trabajaba y también me cansada sin embargo tenia que llegar a casa a seguir limpiando su desorden.

Escuche unos pies arrastrarse por el piso y reí en silencio. Estaba doblando ropa en la cama y vi a Cristián ganarse a mi lado y con toda la ropa que yo le había tirado anteriormente y empezar a doblarla y separar la sucia de la limpia. Sorei triunfante y segui con mi trabajo.

-Estoy tan cansado- se quejo Cristian haciéndome reír.

-Pobree- comente mientras seguida ordenando.

-Que mala persona que sos- volvió a quejarse.

-La peor- reí.

-Mala-

-Vago-

-explotadora-

-Tarado-

-Linda-

-Lindo-

-Te re doy- dijo haciéndome soltar una ruidosa carcajada.

Me di vuelta y lo mire. Vi como Sonreí de costado, sabiendo lo que yo quería.

-Estoy ordenando no me molestes- susurro riendo. Lo abrace por la cintura y me coloque delante de él.

-Pero podes seguir ordenando- susurré mientras comenzaba a besar su mejilla. Dejaba delicados y pequeños besos en su rostro una y otra vez. Luego me desldice hacia su cuello y comenzó a besar este de la misma forma. Metí mis manos bajo su remera y comenze a acariciar su espalda.

-Emma...- advirtió en susurro,pero lo ignore y seguí con mi trabajo.

-No estoy haciendo nada malo- susurré con fingida inocencia y él río bajando su mirada hacia mi.
-Provocadora-
-Desordenado- susurre haciendo que una sonora carcajada saliera de él,en verdad amaba muchisimo a este hombre.

-Critian-

Vivir con Emma no era malo. Pero tampoco voy a decir que era facil. A veces era demaciado mandona pero nada que no pudiera tolerar. Luego de la muerte de Ezequiel la vida de Emma habia quedado destrozada. Su madre y los cómplices hacían sido juzgados y encarcelados con una pena de 30 años por homicidio culposo y secuestro. A pesar de eso,Emma no se sintió mejor. El hecho de que se haya hecho justicia era bueno. Pero eso no le devolvería a su padre.
Es triste decir que por un lapso algo largo de tiempo,la Emma que yo conocí se había esfumado por completo. No comía,no reia,incluso no dormía. El susto mas grande surgió cuando me llamaron a una concentración diciendo que Emma había intentado suicidarse,recuerdo que al principio no creía que era ella. No creía que mi Emma fuera que capaz de hacer algo así.
Cuando llegue al hospital y la vi,fue como si me hubieses pateado en el pecho. El dolor era insoportable. Verla ahí,conectada a miles de cables,haciedole transfusiones de sangre por la cantidad que había perdido gracias los cortes en sus muñecas,es algo que jamas quisiera volver a ver.
Gracias a Dios,hoy se podía decir que ambos habíamos alcanzado cierta estabilidad emocional,y estabamos bien.

-Ya termine- dije de mala gana.
-Ahora al ropero esa ropa-
-Si ama- respondí rodando mis ojos. Lleve la ropa hacia mi armario y la acomode y la ropa sucia la deje en el canasto.
-Bien,ahora haceme masajes en los pies- dijo Emma. La mire y alce una ceja.
-Asique estas viva hoy- dije caminando lentamente hacia ella. Vi como en su rostro se forma esa gran sonrisa que tanto amaba. Cuando sonreía asi,se veía como una niña pequeña.

-Mentira mi amor- dijo mientras me tiraba besitos de lejos.

-¿Esos besitos son una especie de perdón?- pregunte riendo y la vi asentir con la cabeza.

-Veni a dármelos-dije abriendo mis brazos hacia ella. Emma sonrió y corrió hacia mi aferrándose a mi cuerpo con fuerzas.

-Te amo-susurro con la cara enterrada en mi pecho. Sonreí y bese su cabeza.

-Te amo también mi amor- susurré besando su cabeza.

-¿mañana tenés que entrenar?- pregunto.

-Y si gorda,obvio-respondi y la mire mientras ella hacia un leve puchero-¿Que querías hacer?- pregunte.

-Hacer algo. Estoy cansada de estar acá encerrada- se quejó.

-Bueno,cuando salga de entrenar hacemos algo,¿querés?-

-Bueno- respondió y ambos caminamos hacia el living. A mitad de camino escuchamos el timbre.

-¿Esperabas a alguien?-pregunte.

-Nop,¿vos?-

-Tampoco-respondi

-Yo voy-dijo ella.

-Emma-

Me dirigí hacia la puerta y al abrirla,me encontré con una gran sorpresa.

-¿Dan?- pregunte. -¿Dan estas bien?- susurré viendo a mi amiga en la puerta llorado a mas no poder.

-Me engaño Emma- susurro y solo eso basto para abrazarla fuerte.

-Tranquila,ya esta,estas acá y él no puede hacerte mas daño- dije mientras sobaba su espalda.-Veni pasa- la invite mientras la ayudaba con sus valijas. A penas llegamos al sillón, Cristián se paro cuando vio a Dan llorar.

-¿A quien tengo que matar?- fue lo primero que salio de su boca. Dan sonrió apenas un poco y Cristián se hacerco a abrazarla.
Por lo que sabia,ellos se habían hecho muy unidos cuando lo de mi padre y mi inestabilidad emocional sucedió. Se habían dado apoyo mutuo y siempre se turnaban para cuidarme. Y mentiría si dijera que me molestaba. Amaba que ellos fueran amigos.

-Mauro me engaño- susurro Dan al separarse de Kichan.

-A no yo lo mato- dijo Cristián algo enojado. Miro hacia mi y yo alce una ceja en advertencia hacia él. Lo menos que necesitaba mi amiga ahora,era esa clase de comentarios. Ella decidiría cuando hablar sobre el tema.

-Veni Dan. Vamos a ordenar tu habitación- dije y mi novio en dos segundos estaba con las valijas en las manos. Los tres nos dirigimos hacia la habitación de invitados y comenzamos a ordenar. Este iba a a ser un dia largo.


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Holaaa! Volvió🤗
Perdón si el cap no es lo que esperaban,pero prometo que voy a actualizar mas seguido y los capítulos que vienen se van a ir poniendo mas interesantes. Besitos

Meel.

Destiny (kichan Pavón)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora