El primer encuentro.

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                             ACTUALIDAD.

Soy una joven de 19 años que va en la universidad, tengo cabello largo rizado, negro, piel blanca ojos cafés miel, mido 1:65 Y con un cuerpo delgado. Scott Swinton un chico de 21 años mide 1:75 pelo corto color negro, piel blanca ojos color grises, tiene una pequeña cicatriz en su ceja derecho, delgado y con muy buen cuerpo. Ese es mi mejor amigo Scott Swinton.

Iba caminado con Scott y Javier entrando a la Universidad cuando un chico en una moto apareció. Llevaba una cazadora negra, lentes del mismo color. Sinceramente era atractivo, pero nunca antes lo había visto acaso era nuevo? Esa moto se miraba nueva, tenía un porte muy distinguió ese chico, paro la moto enfrente de nosotros haciendo que nos paráramos repentinamente, se quitó los lentes de sol y me miro directamente a  los ojos, una línea curveo sus labios

-          ¿Hey eres nuevo?- pregunto Javier. El chico sonrió, como si esa pregunta le hubiera ofendido

-          ¿no me habías visto antes?—sonrió sin dejar de mirarme, su tono era un poco arrogante

-          Puff.-

Desde ese momento supe que ese chico iba a traerme problemas, muchos problemas, y con ese tono de voz arrogante supe que era un completo engreído. Tome a Scott y a Javier, seguí  caminando, Scott me hizo una  gesto refiriendo a que me alcanzaría, asentí y ellos ganaron para la derecha y yo seguí recto. El chico me siguió hasta puerta de la universidad

-          ¿Se te perdió algo?- pregunte, fulminándolo con la mirada

-          Me he perdido… en tus ojos.- sonrió.—a pesar de que me fulminas eso es… sexy.—era un patán.

-          Que gracioso.—dije con una mueca de disgusto

-          Claro mira te ruborizaste.

Claro que no lo aria, nunca me ruborizaría para un idiota como el que tenía enfrente, ni siquiera me conoce y ya está diciendo esa estupidez que… que o por Dios que engreído.

-          No lo he hecho, solo me dio escalos fríos- me puse nerviosa

-          ¿Porque me viste?—seguí sonriendo, se puso a unos cuantos centímetros de mí.

-           Idiota.—me aleje, abrí la puerta del edificio e ingrese.

-          ¿Qué?  ¿ya nos llevamos así?- él seguí con su estúpida sonrisa, dio unos cuantos pasitos rápidos para quedar alado mío-- y entonces ¿es porque me viste cierto?—añadió, sin quitar esa sonrisa.

-          Claro porque te vi y dije “mira pero que chico tal más desagradable” por cierto… fue sarcasmo.—dije meneando la cabeza como dije sarcásticamente.

-          Ni siquiera me conoces porque dices que soy desagradable.

-          Con solo verte.- dije sin preocupación. Encogiendo me de hombros, lo más natural que pude.

-          ¿Te ruborizas?—dijo nuevamente, que yo no me ruborizo por algo tal estúpido como eso, claro que no. Carajo quien era este tipo, porque me molesta a mí y no se va a joderle la vida a otra chica que en verdad quiera.

-          Si claro. Porque no vas a joderle la existencia a alguien más.—le dije, el me ignoro y seguimos caminado.

-          Oyes sabes dónde queda el salón 24,37 - suspire de mala gana.

A pesar de que me había ignorado, ahora resultaba que ese bastardo hijo de puta iba estar en el salón 24,37B? esto sinceramente no me podía estar pasando a mí, con Scott y Javier me bastaba para tener otro chico engreído y patán, en mi salón, a pesar de que no me llevara con muchos de mis compañeros les hablaba bien pero generalmente estaba con Scott, o con Becca, pero ahora resulta que un idiota como el que tenía enfrente iba a estar conmigo, me iba a ruinar mi existencia desde ahora en adelante.

-          Por Dios santo dime que no estarás  en el salón 24,37.- sonrió

-          Hey ¡ aparte de linda inteligente--lo vi, en serio como puedes hacer que una persona te odie tan pronto como lo has conocido, sea como sea este chico lo ha logrado, lo odio.

-          Hey aparte de idiota estúpido.—dije frunciendo el ceño

Sonrió.

-          ¿y ahora que te hice? – odiaba que preguntaran esa pregunta cuando sabían perfectamente era lo que hizo,

-          Hablarme… no lo hagas.- seguimos caminado

-          ¿Porque?—dijo, tomo algo de del bolcillo  de su pantalón  y se lo llevo a la boca, una paleta.

-          Porque odio a los chicos como…- me interrumpió y apunto hacia arriba.

Ya habíamos llegado al salón, donde me tocaba la primera clase, generalmente cambiamos de salón, pero aquí era el digamos oficial, donde generalmente daban las clases menos importantes.

-          Mira es ahí el salón 2437.

Entramos al salón y todas las chicas lo miraban como si fuera el único, digo que diablos le ven a ese chico, que aún no se su nombre ese es un tonto mira ya está coqueteando con las chicas ¿por qué no me sorprende? Mire entrar a Scott.

-          Scott- le grite.

-          Que pasa- él sonrió viniendo hacia mi

-          ¿qué aras mañana?- pregunte.

-          Pues no tengo nada que hacer ¿Por qué?

-          Quería ir al parque de diversiones, no pude ir en las vacaciones.

-          Pues vamos.- sonrió.- y así me ligo a una chica

-          Ligarte una chica que paso con Amber

-          ¿Amber? ¿Quien es esa?- sonrió

-          Eres un descarado.- sonreímos.

-          ¿Entonces vamos?- voltee hacia atrás y ese chico estaba sentado en el lugar del profesor me miraba cuando nos encontramos con la mirada sonrió, sus manos las tenía tras su nuca y los pies sobre el escritorio.

LECTORES, PARA LOS QUE LO HAN LEIDO MUCHAS GRACIAS, ESPERO QUE LES GUSTE, Y ESPEREN Y QUIERAN SEGUIR MAS. ESPEREN POR MAS, GRACIAS, :D

¿morirías... por amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora