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Madison's POV:

Mi mirada estaba puesta en el cuerpo de Rebecca quien lucía demasiado molesta e indignada. Mientras que yo no sabía que decir.

¿Seattle?

¿Qué iba a pasar con Louis? ¿O con su relación?

Sentí como poco a poco mi garganta se fue apretando con cada minuto que pasaba. Muy en el fondo de mí sabía cuáles eran los pensamientos de Louis y no los quería aceptar.

Aunque otra parte, sabía que él sería incapaz de dejar Nueva York para mudarse a una ciudad que estaba a casi cuarenta y ocho horas de distancia.

Él me había dicho lo mucho que me extrañó, viviendo incluso al frente mío. ¿Cómo se supone que pueda soportar la idea de estemos tan separados?

—Y-yo creo que es algo que ustedes tienen que conversar— dije como pude mientras dejaba la escoba de lado.

Salí de ahí como pude en dirección a mi departamento. No hice nada más que tomar una ducha de agua caliente para tratar de callar todos los pensamientos en relación a lo que había pasado en las últimas tres horas y tomar una dulce taza de café para pasar el sabor amargo de mi boca.

Me había acostado con Louis. Nuevamente.

Y se había sentido increíble.

Una hora más tarde, la puerta de mi departamento  suena por lo que instantáneamente saco la manta de mis piernas y me pongo de pie.

Louis se veía con la mirada perdida, supe entonces que tenía algo que explicarme y la verdad de las cosas era que no tenía ganas de escuchar nada. Si fuera por mi, me hubiese quedado desnuda a su lado mientras besaba cada uno de sus tatuajes.

—Rebecca se acaba de ir— me informa cuando lo hago pasar a mi departamento.

—¿Cuánto te enteraste de esto?

—Hace tres días— susurró casi inaudible— Madie, de verdad que odio decir esto pero... Lo que hicimos estuvo mal.

—Cuenta una novedad— dije rodando los ojos, un tanto molesta por toda esta situación— Estoy cansada de que vengas a decirme esto a mi, eres tú el que tiene novia, eres tú el que fue infiel.

Él sólo guardó silencio porque sabía que yo estaba en lo correcto.

—Así que no me vengas a decir que lo que hicimos estuvo mal porque lo sé perfectamente. Pero para mi se sintió increíble, Louis, y ni siquiera Rebecca me va a hacer cambiar de opinión esta vez.

—Tampoco estoy diciendo que se haya sentido mal porque ambos sabemos que no fue así— me dijo— Pero, mierda, las cosas estaban saliendo bien entre ella y yo...

—¿Siquiera puedo saber cual es tu puto derecho para reclamarme a mi?— contracté— ¡Eres tú el que tiene que autocontrarle porque que eres tú el que está en una relación! ¡Así que no me vengas a reclamar que lo hicimos estuvo mal, habla por ti, Louis!

Sentí como poco a poco mis ojos comenzaron a aguarse y me odie por eso. Odiaba completamente sentirme débil.

—¿Sabes que más? Quizás después de todo la única solución sea cortar esto de raíz, Madison— dijo él ahora acercándose a mi— Quizás la única opción sea alejarme de ti si no quiero tropezar con la misma piedra.

—¿¡Si quiera te estás escuchando a ti mismo!? ¡La única opción es escuchar lo que realmente quieres, Louis!

—¡Ella no se merece esto, Madison!

Into You » L.T (#1) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora