15. Caí al suelo y se me cerraron los ojos

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AVISO IMPORTANTE : Este cacho de la historia, va a ser contado en primera persona por el personaje. El lector tendrá que adivinar que personaje es el que está hablando en cada momento. Habrá cosas propias de cada personaje y por si no queda claro, se dirá su nombre en alguna conversación. Habrá asteriscos cada vez que se cambie de personaje.

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Me desperté cansado, estaba en la iglesia de nuevo, pero ya no había nada a mi alrededor; ni trajes, ni espejos, ni nada. Las puertas de la iglesia estaban abiertas dejando entrar un brillante reflejo de luz que iluminaba mi cara. Me caían lagrimas saladas de los ojos, de alguna manera no podía contenerlas. En aquel momento solo tenia ganas de irme a casa, y tirarme en la cama y dormirme de por vida ero me temo que es imposible.

Salí aterrorizado de la iglesia, seguía sangrando mucho de los nudillos y tenia que curar eso antes de que se infectara. Camine poco a poco hacia a la puerta, me tape los ojos con el brazo ya que la brillante luz de el sol me cegaba, cosa que era normal ya que había pasado todo este rato en sitios poco iluminados.

De verdad que no sabia cuanto tiempo había estado en ese infierno. Y allí estaba Anne, le caían lagrimas de los ojos. Fui corriendo y la abrazé. Parecía que era el fin de el mundo, pero para mí lo era y lo sería de allí en adelante.

Nos montamos en la bici y pedalee lo mas rápido que pude hasta casa. Anne no entendía nada pero una cosa tenia clara, esto no se lo contaría a nadie ni loco. Solo quería llegar a casa y olvidar todo, cuando digo todo, es todo desde que empezó el verano.

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Decido ir a casa de Gina, ya que me aburro y me apetece estar con ella. Así que cojo la bici y pongo rumbo a su casa.Por el camino me empiezo a agobiar ya que noto como una presencia detrás de mi peor cada vez que me giro no hay nadie detrás. No le doy mucha importancia y sigo el camino hasta que llego a la casa.

Toco varias veces la puerta pero no abre nadie. Cuando me doy la vuelta para irme alguien abre la puerta. Al volverme a girar, me doy cuenta de que es Marcos.

- Hey ¿que pasa Anne?- dice el.

Yo me quedo alucinada, está en calzones y lleva una bata medio abierta, se le marcan todos los músculos, tengo que admitir que tiene un físico excelente.

- Hey, venía a buscar a Gina.

- Pues me ha dicho que se había ido hace un rato a tu casa.

Por la espalda de Marcos veo como se asoman unos ojos que me resultan familiares.

-¿Sue?- pregunto yo confundida- espera, no, dime qué no estabais...

Marcos se mantiene tranquilo y con una sonrisa en la boca y entonces Sue intenta cambiar de tema.

- Que buen día se ha quedado hoy...- dice Sue.

- Si, lo estábamos haciendo.- dice Marcos sonriente.

Sue le pega una coñeja a Marcos y adentra en la casa.

- Yo, lo siento no quería interrumpir...

- No interrumpes de echo nos vendría bien alguien más...- dice el en tono sexy.

- No, no, ni hablar. Yo mejor me voy a buscar a Gina...- digo incomoda.

Marcos está tranquilo y suelta risitas, parece que no le parece incómodo todo este tema.

La verdad es que me tranquilizo y lo veo como un tema libre y norma.

Mientras me voy alejando, Marcos y yo continuamos hablando.

The Last SummerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora