Los mas deseados

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Una semana paso desde los acontecimientos, Wei Ying o su ahora maestro, había reunido a los omegas más deseados  en el mundo de la cultivación, solo para que le pudieran enseñar a ser un Omega de élite y digno de ser llamado Lan. Hoy iniciaba sus tan anheladas clases (ironía), vivir en aquella habitación algo alejada de sus antiguos compañeros era bueno y a la vez malo, bueno porque tenía una vista maravillosa, e incluso habitaciones de sobra en donde serían sus clases privadas con sus maestros, junto con un jardín bellísimo, que solo podían ir los omegas (por seguridad a que nadie se sobrepase con el). Y era malo porque a veces extrañaba a sus mejores amigos, a sus compañeros y demás.
Además solo podía salir en compañía de un mayor, o de alguno de los omegas, hasta que esté aprendiera a controlar a su lobo, y así no emitir feromonas sin querer. Y así comprendió que ser Omega era realmente inquietante...

- Jingyi, no te desanimes, es hora de ir a clases para ser un respetado Omega y dejar en alto el apellido Lan -golpeo con suavidad sus mejillas-

Primero estaba Jiang Chen, el 3ero más deseado, quien actualmente estaba comprometido con el líder de la secta de Gusulan, este le enseñaría valor, etiqueta, y diplomacia, puntos muy importantes a la hora de estar en alguna reunión con los líderes, si es que su pareja llegase a ser un alfa de rango superior o líder de alguna secta, debía estar preparado para todo.

El Omega no era muy paciente, sin embargo, este había aceptado en ayudar a ser el número 1 porque al igual que el resto de las personas, sabían de lo sucedido con la pareja destinada del joven, y el hecho que su propio sobrino se comportara de esa manera con el joven hizo que en su ser hubiera rabia y hasta vergüenza.

Así que se podría decir que acepto ser el maestro de Jingyi también porque en cierta forma le agradaba, no es que fuera el Omega más finísimo, ni el estudiante más apegado a las normas de Gusulan, pero tenía un alma traviesa. Pero lo realmente especial es como puede enfrentar a sus miedos aún cuando le teme a los fantasmas, el como no teme dejarlo todo por la felicidad ajena, y aquello para Jiang Cheng era muy importante, era admirable, y por eso se sentía orgulloso de ser su maestro, aún si su sobrino le reclamará. No lo malentiendan, el ama a su sobrino, pero también le agarro cariño al joven que ahora era su estudiante.

- Nada mal -comentó cuando el joven pudo dar una charla tranquila sobre las sectas. - Antes no podías responder ni 3 pequeñas frases, y ahora sí quiera puedes tener una charla casi decente -sonrió - Sin embargo debes seguir leyendo y preparándote, no solo trataremos tratados de paz, si no anuncios de guerras, etc, así que ve a la biblioteca y lee cada acto político que veas, y mañana me traerá tu opinión sobre ello. - Acarició su cabeza y alejo su mano avergonzado - P-Puedes irte - Le dio la espalda.

Jingyi se quedó sorprendido por el acto de cariño de su maestro, a lo cual sonrió como niño pequeño para abrazarlo por la espalda y decirle un gracias para salir corriendo como alma que lleva el diablo por el miedo a que el mayor sacará su látigo y le golpeara.

Al llegar a una de las habitaciones especiales, se encontró con Nie Huaisang, aquel hermoso Omega que siempre negaba todo, líder de su secta, actualmente se hallaba en el 1er lugar de los omegas más deseados, y cómo no, comprometido, aunque realmente se desconocía con quién. Este mismo había obtenido ese lugar por su claro desempeño en dominar a los alfas con un par de movimientos, el hecho de cómo podía con un simple abanico hacer que los alfas perdieran la cabeza completamente por el, o el hecho que sabia sobre comercios que lograban posicionar a su secta como uno de los más ricos. Un claro ejemplo de un Omega predilecto.

- Hola Jingyi, siéntate y toma esto - le otorgó uno de sus muchos abanicos - hoy día aprenderás el lenguaje secreto del abanico -sonrió con alegría infinita.

- ¿Lenguaje? - le miro atónito

- Si, verás, los alfas tienen cierta ventaja sobre los omegas en cuestión de fuerza, e incluso pueden doblegarnos con su voz si es que lo desean, pero aquello solo nos quitaría el habla por el miedo - Su mirada se puso seria - Aquí es donde entra el dominio del idioma del abanico, este objeto te ayudará no solo en el arte de la seducción, si no también es un claro ejemplo de comunicación y poder sobre ti mismo - abrió su abanico a lo cual el pequeño Omega lo miro atento - tus ojos ya están en mi y solo abrí el abanico - se rió sin malicia - es por el color, el color del abanico generalmente es llamativo, pero en si son los dibujos lo que te llaman la atención, digamos, cuando un alfa te invita a salir pero no quieres, simplemente tomas el abanico entre tu mano izquierda, y lo pasas por la mejilla izquierda de tu mejilla, aquello significa que no, y los demás omegas estarán atentos por qué la mayoría domina los conceptos básicos - Hizo la demostración - Sin embargo, si deseas decir que si, la acción debe ser contraria, usa tu mano y mejilla derecha, al final sonríe levemente, aquello invitara al alfa a que te invite a salir con más gracia, y sin duda alguna serás uno de los omegas que en su cabeza jamás saldrá - abrió su abanico dándose un poco de aire.

- Eso es sorprende - murmuro embelesado Jingyi.

- Nada mal Huaisang, no por nada eres el más deseado - hablo Wei Ying

- Definitivamente no puedo refutar contra esa lógica - acotó Jiang Cheng quien venía con el otro Omega.

El del abanico solo se sonrojo, ocultando aquel manto rojo de su rostro debajo del abanico.

- También es importante el dominio de este instrumento porque puedes ocultar un pequeño arma en el mango -comentó Wei Wuxian

- Aún recuerdo cuando nuestro pequeño niegalo todo saco una pequeña arma para defender a un Omega que recién había entrado en celo, y cuando le preguntaron sobre el incidente, porque cabe recalcar que el alfa quedo lastimado, este los convenció a todos con una mirada llorosa diciendo no se, mientras se escondía debajo de su abanico - Hablo Jiang Cheng sonriendo. - La actuación te ayudará a librarte de muchas cosas Jingyi, sobre todo situaciones peligrosas e incomodas.

- Por eso el número 1 te enseñará todo ello -dijo emocionado Wei Ying

- Chicos me avergüenzan - hablo bajito Nie Huaisang - Cierto. ¿ Wei Ying que le enseñas al jovencito Jingyi? -pregunto curioso

- Arte, tiro al blanco, tal vez una danza que aprendí cuando aún era el temible Patriarca,  defensa personal, amor y respeto - acotó sonriendo - confianza y alguna que otra cosa, como el manejo con espadas - revolvió los cabellos de Jingyi, el cual intentaba en vano abrir de manera correcta el abanico.

- No hagas eso Wei Ying, que sabes que la apariencia de un omega también es importante, aunque eres bueno peleando sin despeinarte -hizo un puchero - creo que sí peleó quedó mínimo con todo el cabello revuelto como cuervo - ante lo dicho los presentes rieron.

- Bueno, Jiang Cheng es muy bueno en conversación política, e incluso resalta aún cuando hay tanto Alfa -menciono orgulloso de su hermano de juegos - Es todo un orgullo, siempre resalto en los estudios -lo abrazo.

-Bueno, me lo tenía que tomar en serio mientras ciertos amigos míos estaban jugando o intentando copiar en pleno examen - achicó la mirada para después reírse fuertemente.

- ¡LO HICE! - Exclamó emocionado el menor al ver que pudo abrir el abanico por fin.

- Bien, aún te falta abrirlo más delicadamente, pero son pequeñeces que te iré puliendo a lo largo de las clases, recuerda prácticar para que te salga más natural, practica en el reflejo de tu espejo.

- Oye, dijiste algo sobre una danza, nos enseñarás sí o sí - Dijo Jiang Cheng, pensando en una manera de sorprender a su prometido, a lo cual Nie Huaisang asintió emocionado.

-Bueno, tal vez más adelante, primero Jingyi debe aprender lo básico de ser Omega, cuando la dificultad suba, les enseñare la danza aunque advierto que romperemos muchas reglas en Gusulan -se rió -Aunque si que les encantara a nuestros alfas -movio con coquetería sus cejas.

- Entonces Maestro~ enseñenos -acoto mientras sacudía su abanico cubriendo suavemente su rostro, el cual estaba ligeramente inclinado, dejando ver sus hermosos ojos coquetos Nie Huaisang.

-Sera interesante de ver -sonrió de medio lado Jiang Cheng, con un aire de coquetería.

-Yo también quiero aprender -sonrió dulcemente Jingyi, a lo cual aquella atmósfera de coquetería bajo por la inocencia del menor.

-Bueno, vamos Jingyi, debo enseñarte a pelear - se lo llevó a rastras al menor, para ir al patio de los conejitos seguido de los mayores -estos hermosos bebés que son tus hermanitos serán tus oponentes -les señaló.
- ¿Eh? - se mostró sorprendido el menor.

Los conejitos de la nada empezaron a saltar encima del Omega menor cubriéndolo por completo.

-¿Que sucede aquí? -preguntó Lan Wanji al ver a sus adorados conejitos amontonados.

-Lan Zhan, estoy enseñando a pelear a Jingyi -se mostró tan feliz que se abalanzó a su alfa, quien lo recibió con gusto entre sus brazos -Y los conejitos le enseñaran a moverse con más cuidado, ya sabes, las pisadas suenan, y que mejor que los conejitos para que me enseñen a ser sigiloso ¿Verdad? -le dio un pico.

-um! - asintió el alfa para bajar con cuidado a su Omega, quien chasqueo los dedos haciendo que los conejitos se bajarán del menor, quien tomaba grandes bocanadas de aire.

-Casi veo la luz -dijo exagerado.

Y así fue como iniciaron las clases del pequeño Jingyi con sus maestros hacia el camino a ser el Omega más deseado de todos...

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Holii


OMEGA CODICIADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora