[Narra Jessica]
La luz del sol que entraba por la ventana y el irritante sonido del despertador hicieron que mis ojos se abrieran. Miré a mi alrededor tratando de recordar lo que había pasado anoche, pero lo único que encontré fue un espacio vacio al lado mío, donde se suponía que tendría que estar Elizabeth.
- ¿Elizabeth?- Pregunté en vano, esperando una respuesta que sabía que no sería dada.
Pero aunque sabía perfectamente de que ya era demasiado tarde, mi corazón se negaba profundamente a aceptar que Elizabeth se había ido.
Me levanté bruscamente de la cama, y desesperada comencé a buscar a Elizabeth por la casa. Y aunque gritase su nombre esperando respuesta por parte de ella, no la tenía.
Al no obtener respuesta, comenzaba a angustiarme cada vez más; pero aún así, seguía insistiendo en que Elizabeth debía estar cerca. Pensaba en que seguramente se había ido a tomar aire o a comer algo.
De repente se me ocurrió la idea de llamarla, y así hice.
Corrí de prisa a por mi celular y marqué su número para llamarla.
- ¡Mierda, contesta Elizabeth!- Me mandaba al buzón.
Al ver que llamaba y no contestaba, enojada, tiré el celular estampándolo contra el suelo.
Angustiada, fui hacia mi habitación y me cambie de ropa lo más rápido que pude. Me acomodé un poco el cabello, bajé las escaleras hasta la puerta de mi casa y corrí hasta la casa de Elizabeth.
Toqué la puerta de su casa, esperanzada a que ella abriera la puerta. Pero no. Las esperanzas son para los idiotas ilusos y enamorados... como yo.
Una señora de unos 60 años aproximadamente, me recibió.
- Hola joven, ¿Qué andas buscando por aquí?- Habló la señora recibiéndome amablemente.
- Hola... vengo a buscar a Elizabeth, ¿Se encontraría aquí?- Pregunté tratando de parecer lo más cordial posible, y no parecer angustiada o nerviosa.
- Oh, joven. ¿Eres su amiga?- Asentí.- Lo siento demasiado, ella no está. Digo, ya no vivirá más aquí. Quizás si hubieras venido unos 5 minutos antes podrías haberla visto. Ahora está en el aeropuerto... o en un avión seguramente, yendo a los Estados Unidos.
- Q-¿Qué?- Quedé hecha piedra. Elizabeth se había ido y sin despedirse de mí.
Asentí y le agradecí a la señora y segundos más tarde me retiré de allí.
Llegué a mi casa, y aunque suene ridículo, lo único que quería hacer -y de hecho hice- era llorar. Tantos años estando junto a Elizabeth para que, incluso después de lo que pasó anoche, se fuera sin despedirse, sin dejar una nota o un mensaje. Se fue sin más. Tal vez estuve engañándome a mi misma todo este tiempo, y en realidad jamás le importé. Se fue sin despedirse, como si nos fuéramos a ver pronto; como si a mí no me importase que se fuera, como si todo lo que pasó entre nosotras anoche y estos tres años ella lo hubiera olvidado. Me dejó como una basura que poco a poco se irá descomponiendo y pudriendo hasta que con el tiempo llegue a ser parte de la nada misma... Maldita sea, Elizabeth.
[...]
"Elizabeth... Elizabeth... EliZABETH... ELIZABETH... ¡ELIZABETH!"
Su nombre recorría cada rincón de mis pensamientos día tras día. En mi casa, en el parque y lugar al que fuese.
Cada día era más prolongado que el anterior. Todos los días eran exactamente iguales. Se resumían en embriagarme mientras escuchaba música, dormir, leer y volver a embriagarme. Cada día se me hacía tan jodidamente repetitivo, que lo único que anhelaba era dormir y no volver a despertar...
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No soy Lesbiana [GirlxGirl]
RomanceElizabeth es una chica la cual siempre, y toda su vida fue criada bajo una familia homofobica, su familia siempre le enseñó que una mujer tiene que amar al hombre, y el hombre a la mujer y que aquellos que amen a una persona de su mismo sexo son per...