La diferencia entre tú y yo (SUPERCORP +AGENTREIGN) TERMINADA

18. Una excusa

Kara

-Espera, Kara. Tengo que hablar contigo.

Mi corazón se aceleró al escuchar pronunciar aquellas palabras. Iba a irme, para volver a verla al día siguiente, al momento de convertirme en su cuñada.

Le sonreí esperanzada de lo que quisiera decirme. Sin embargo, su madre la mandó entrar en la casa, y aunque se rebeló en un primer momento, obedeció.

La miré y las lágrimas acudieron a mis ojos, pero a ella no le importó. No iba a luchar por nosotras, así que yo tampoco lo haría. Sólo iba a hacer lo que se suponía como mi deber, protegerla. En este caso, de las malas (y acertadas) lenguas.

Huí de allí para poder llorar en la soledad de mi hogar, donde había vivido hasta que me nombraron caballero.

.

No logré dormir en toda la noche. Sólo estaba centrada en ella. ¿Ya no volvería a tocarla? ¿Querrían que no siguiera siendo su guardiana? ¿Me convertirían en una dama de adorno de su marido?

No deseaba eso. Quería estar con ella día y noche. Cuidarla y que ella velara por mí. Pero para Lena era más importante el qué dirán que nosotras. Se avergonzaba de mí. Amarme era un motivo de humillación, una mancha en su alma, cuando para mí significaba la mayor de las dichas.

Alex y la reina vinieron a buscarme para ir a la iglesia. Trajeron un vestido como regalo de ambas. Yo pensaba casarme vestida con armadura, pero acepté. ¿Qué importaba?

-Estás preciosa, Kara- me dijo mi hermana- Mamá estaría orgullosa.

-Gracias- contesté llena de pesar-.

-¿Por qué tus ojos están tristes? Deberías estar feliz.

-No voy a recordar esto como el mejor día de mi vida, te lo aseguro- confesé-.

-¿Y por qué lo haces? ¡Si no estás segura no te cases!

-¿Tiene que ver con Lena y con los rumores que hablan de vosotras?- intervino la reina-.

-¿Qué rumores?- preguntó mi hermana-.

-Dicen que están juntas.

-¡Kara! - exclamó mi hermana- ¡Qué importa! Que digan lo que quieran.

-A mí no me importa, Alex... Yo quería confirmarle al mundo que la amo. No me importa lo que digan, sólo me importa ella.

-¿Y entonces?

-A Lena sí le importa- dijo Sam- Le importa todo lo que la haga peor hija.

-¿Vas a casarte por ella? ¿Te lo pidió?

-¡No! Jamás haría eso.

-¿Ella también te quiere?

-Sí. Pero no lo suficiente para arriesgarse por mí.

.

Llegamos a la iglesia, y Lex y sus padres ya me esperaban. Había algunos invitados, todos familiares de los Luthor. Busqué a Lena. ¿Dónde estaba? Quería hablar con ella. Le iba a decir que si se veía con fuerzas, si tan sólo me prometía plantearse confesarlo poco a poco al mundo, dejaría la estupidez que estaba haciendo.

No podía imaginarme en la cama con Lex. No porque fuera un hombre, a mí nunca me habían disgustado. Simplemente porque no era ella. Daría igual cuántas mujeres hermosas o cuantos hombres atractivos vinieran a mí, yo sólo quería besarla a ella, tocarla a ella, acostarme con ella...

-¿Y vuestra hermana?- pregunté a Lex-.

-Parece que ha decidido no venir. Ya sabes, es una niña caprichosa. No asistir a la boda de su único hermano... - dijo fastidiado-.