Mi Vecino Mi Perdición

Capítulo 3

Después de pasar todo el día tomando sol y admirando las hermosas olas que nos brindaba el mar, ahora nos encontrábamos camino a casa... Ya llevamos más de media hora de viaje, lo cual significaba que llegaríamos dentro de poco.
Pero aún así, tenía una gran duda que me quería volver loca... Conozco a la perfección a esa chica que se hace llamar mi mejor amiga.

-Brook... - hablo

-¿Qué pasa? - pregunta, sin quitar su mirada de la carretera.

-¿Por qué mencionaste a Noah?- pregunto, quitando mi mirada de la ventana del auto para posarla sobre ella.

Tenía esa maldita intriga de saber el por que lo mencionaba, se supone que ella lo detestaba hace tan solo semanas.

-¿Por qué quieres hablar de él ahora? ¿No me dijiste que no lo vuelva a mencionar? - pregunta seriamente sin quitar la mirada de la carretera.

-Lo sé, pero es porque tú lo mencionaste. - respondo, pero en cierto tono calmado, intentando ocultar mi curiosidad.

-Solo lo mencioné porque se me vino a la mente, eso es todo.

-¿Segura? - voltea a verme por unos segundos - Te conozco muy bien, y es muy raro alguien se te venga a la mente solo porque sí.

-Camila... - suspira - Lo mencioné solamente porque al parecer volvió de Canadá, y se va a quedar por un tiempo. - mis ojos al instante se abrieron como platos.

-¡¿Volvió quién?!

Esto no podía estar pasándome de nuevo...

-Noah... Noah, volvió. - afirma - Lo que significa que vas a verlo en la escuela.

-¡Que maldito karma! - exclamo.

Pensé que él no volvería de aquel viaje, mierda, pensé que no tendría que toparme con su mirada de nuevo.

-¿Cómo sabes que va volver de Canadá? ¿Quién te lo dijo? -pregunté.

-Camila, mejor te cuento todo con detalles cuando lleguemos a casa... Capaz en el camino nos choquemos y terminemos en un hospital. - volteó a verme por un segundo.

-Quiero detalles de todo. - asiente.

Era inevitable no querer aquella respuesta ahora, pero esta vez Brook tenía razón; ella estaba conduciendo y no quería distraerla.

..........

Al final de todo, no pude lograr mi objetivo. Brook quedó en que me contaría mañana con lujos y detalles... Sólo me tocó aceptar, al parecer estaba cansada; fue un viaje un poco largo.

-¡Nos vemos mañana! - gritó desde su auto.

-¡No vayas tan rápido! - le grité desde la puerta de mi casa, mientras le mandaba en beso.

Luego que su auto desapareció de mi vista, saqué las llaves de mi mochila y entré a la casa. Al sacar el teléfono del bolsillo de mi pantalón me di cuenta que ya era un poco tarde. Al entrar me topé con mi madre, la cual se encontraba sentada en el sofá viendo televisión. Me acerqué para saludarla y sentarme justo a su lado.

-¿Qué tal el día en la playa? - pregunta dándome una sonrisa.

-Estuvo genial, fue un gran día... - un suspiro sale de mí - ¿Fuiste al salón?

-No... Tuve que organizar algunas cosas sobre una casa. - dijo mi madre.

-¿Una casa? - pregunto confundida.

-Sí, como lo escuchas. Una compañera que trabaja en la sede de Texas, se mudara para acá con su familia. La trasladaron y me pidió ayuda para conseguir una casa.

-¿En dónde le conseguirás la casa?

-Al lado de la nuestra... - dijo como si nada.

-¡¿La casa de la señora Copper?!- me sorprendió demasiado, desde que conocí a esa señora jamás la he visto irse de su hogar. Podría asegurar que pensé que moriria ahí.

-Esa misma. Llegará dentro de unos días con sus hijos...

¿Cómo es posible que la señora Copper venda su casa? Ella la adora.

-¿Cuánto tiempo se quedará tu amiga? - pregunté.

-Más o menos todo un año. - dijo con simpleza.

Ya me había quedado sin preguntas, y siendo sincera, tantas horas de viaje y tanto sol hizo que mi cuerpo me rogara descanso.

-Bueno, mamá. Iré a descansar, ha sido un día largo... - dije y ella asintió.

Me levanté del sofá y le dí un beso en la frente deseándole una linda noche.
Subí a mi habitación, y al instante me coloqué mi pijama, para luego tirarme sobre la cama llevando mis ojos el techo... Y allí mi mente comenzó a volar. Las preguntas comenzaron a llegar, lo cual significaba que hoy sería una larga noche.

¿Por qué Noah volvió?

Y sobre todo... ¿Por qué la señora Copper vendió su casa?

Las miles de preguntas comenzaron a inundar mi mente..

Para ser un pequeño resumen, Noah Stanly, fue mi novio durante 8 meses, y justo en ese tiempo mi vida estaba cambiando por completo.
Era tan insegura e indecisa conmigo, que al pasar los meses fui alejándome poco a poco de todos lo que me rodeaban; me alejé de mi madre, de Brook y de muchos de mis amigos de la escuela, ¿Por que? Porque me empeñe tanto en ser perfecta para él que no me importaba mi alrededor... Pensé que aún me faltaba mucho para estar a la misma altura que mi gran ser amado: solo quería estar con él, que él se enamorara de mí como yo lo estaba de él. Quería que sintiera que sin mí no podía vivir como yo aveces lo sentía, pero nunca lo logré. Aunque ahora me doy cuenta que fui yo quien lo colocó en un trono... Al final, fui yo la que se fue enamorando como una niña pequeña.

Para él solo fuí una de sus otras novias que ha tenido en toda su vida. Pero aún así, sigo sin entender su maldito juego de hacerme sentir querida... Recuerdo a la perfección cuando me decía que me amaba con todo su ser, y que como yo no iba a encontrar ninguna.

Pero aquella relación, sólo trajo uno de mis peores recuerdos, el cual fue el día en que nos peleamos como nunca... Siempre me echaba las culpas encima, por eso yo era la única que corría a buscarlo para solucionar los problemas. Ese día, fui a su casa, su madre me abrió muy sonriente y me dijo que el estaba en su habitación. Con tanta ilusión de que todo se arreglara entre nosotros, me dirigí a aquel lugar; pero cuando abrí aquella maldita puerta... Mi mundo se vino abajo, ví la peor escena de toda mi vida, esa escena que hizo que sintiera un dolor inmenso en el pecho y que los ojos se me cristalizaran por completo. Era él, con una chica que en algún momento consideré mi amiga.

Recuerdo que salí de ahí corriendo como una tonta esperando que él me detuviera, pero jamás lo hizo, y creo que eso, fue lo que más me dolió.

Pasaron los días y él nunca llamó, ni siquiera me mandó un mensaje.

Cuando fui a clases me encontré con una hermosa sorpresa en el estacionamiento. Ya estaba con la misma chica besándose, en ese momento mi corazón se partió en diez mil pedazos y llegué a sentirme como el peor trapo viejo que nadie quería.

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G'M🌹