15 años esperando por ti - Winx Club

°24°

- Ya despertó. - Con tan solo esa frase, Jacob saltó de su asiento.

Entró rápidamente y le vio. Bueno, casi despierta.

Bloom estaba a su costado acariciándole el pelo mientras ella solo sostenía un pañuelo contra su nariz, que seguía sangrando. Tenía a su costado varios pañuelos ya manchados. Arissa entró detrás de él con una hoja doblada entre sus dedos. 

- ¡Sophie! - la pequeña entró saludando efusiva.

- Arissa, me alegra que estés bien. - dijo en un susurro.

- ¿Te encuentras mejor linda? - Jacob preguntó acariciando su mejilla.

- Es un sangrado abundante, se pondrá bien. - Bloom habló. - ¿Y cómo fue su aventura?

- ¡Me rescataron! - ella chillaba emocionada.

- No debieron haber salido sin permiso. - Entró Sky seguido de Karina y Faragonda.

- Teníamos que rescatarla. - dijo Sophie suavemente - No iba a quedarme sin hacer nada.

- Tampoco debiste arriesgarte así. - Faragonda habló.

- Lo sé. - quitó el pañuelo de su nariz - pero soy fuerte. Hice el hechizo. Ya paso. 

- Sophie, eso fue muy imprudente. ¿Que hubiera pasado si pasaba algo? 

- Pero no pasó, papá. 

- Muchas gracias Faragonda. - Karina habló -  por Sophie y más aún por Jacob.

- ¿Qué paso, Karina? - Bloom preguntó.

- Jacob asistirá a Fontana roja. Tendrá la beca completa.

- ¿Enserio? - Jacob lucía emocionado.

- Estoy muy feliz por ti. - Sophie le abrazó.

- Ustedes dos son muy imprudentes. Pero valientes y audaces. Sophie, tienes corazón, coraje y fuerza. Eres poderosa, pero no debiste arriesgarte así. - Sky dijo. - Jacob, tienes un corazón enorme. Y tienes fuerza. Pero ambos deben comenzar a entender los riesgos que pueden correr.

- Lo sabemos papá. No lo haremos más. - Sophie le miró. 

- No. No lo harán. Jacob comenzará a ir a Fontana Roja y tú estudiarás en casa. No irás a Alfea por un tiempo.

 - Pe...

- Nada. Y no quiero una palabra más de nadie aquí. - El rey salió dando un portazo.

Las 4 presentes con el chico se quedaron calladas. 

- ¡¡Agh!! No entiendo porque reacciona así. - Sophie se molestó.

- Él es un padre preocupado. Estando en su posición lo entiendo. No creo que te deje ir a Alfea por unos cuantos días, y lo acepto. - se resignó la directora de Alfea.

- Pero no tuvo que decir eso. ¡No hice nada malo! - la mirada de ambas adultas le dijeron lo contrario - Bueno.... ustedes entienden. 

- Bueno, Sophie, tengo que irme con Arissa. Prefiero que con Faragonda hablen ustedes dos. Con permiso.

La castaña se despidió y salió con la pequeña. 

- ¿Porqué le pasa eso? - Jacob comenzó a preguntar.

- ¿A Sophie? - este asintió - La magia es vital en el cuerpo de un hada. Es como su fuerza vital. Cuando uno abusa de su fuerza, en casos normales, le comenzaría a doler el cuerpo o una parte de este. Pero en este caso, como es la primera vez que usa su magia con tal magnitud, lo que ha pasado es que el sangrado ha sido mucho más fuerte. Normalmente, cuando las hadas comienzan con esos hechizos por primera vez, les pasa, pero suavemente. No como lo de ahora.-  terminó de explicar mirando a Sophie, que había agarrado un pañuelo para su nariz.