Me encontraba en la plaza esperándola, estaba contento había conseguido lo que quería y esa misma noche hablaría con mi padre de varias cosas que dijo que me interesarían saber. De repente la vi iba muy guapa ¡Que hago pensando en eso! Me saludo con la mano y yo hice lo mismo.
-¡Hola! - Me saludo con alegría ¿Se había maquillado? y lo más importante ¿Para mí?
- Hola...- Dije aturdido.
- ¿Que tal tu primer día?- Pregunto.
- Bien - Reí.
- ¿Te divertiste acosándome? - Pregunto.
- Psss...No -Dije serio.
- Yo pensé que si, ¿A dónde vamos?
- Vamos a comer algo - Dije sin dudar.
- De acuerdo.
Nos dirigimos a un restaurante de comida rápida, elegimos nuestros asientos y miramos el menú.
- Buenas tardes ¿Que desean tomar?- Pregunto el camarero.
- Yo quiero una hamburguesa con queso y unas patatas fritas - Dijo ella.
- Pues yo lo mismo - Dije yo, esperamos hasta que nos trajeron la comida, lo que me pareció una eternidad, y mientras esperábamos ella me pregunto.
-¿Yo te gusto?
- Eeeh? - ¿No podía vocalizar?
Ella estaba sonriendo ¡es increíble! ¿Como podía pesar que yo... que a mí me gustaba?
-¡No! - Dije enojado.
- Vale... pero si te picas es porque ajos comes.-Dijo riendo.
- A mi no me pica nada, solo quiero que seas mi amiga.
- Si, si - En ese momento el camarero trajo la comida y la comimos en silencio.
- Bueno ¿estaba muy rica no? - Dije pagando la cuenta.
- Si ¿Vamos a comer algo?
- ¿Mas? - Dije sorprendido.
- Si, es que nos falta el postre.- Dijo sonrojándose.
- Esta bien - Dije yo.
- Esto lo pago yo - Dijo ella.
- No hace falta - Dije.
Cuando nos levantamos de la mesa tras comerse su postre, salimos del restaurante y nos sentamos en un banco de la plaza, a ver comer a las palomas. Yo estaba tranquilo cuando ella dijo:
- James - Su voz me dio escalofríos.
- ¿Qué? - Conteste suavemente.
- En serio puedo confiar en ti, quiero decir ¿Solo amigos?
- Si, solo amigos - Dije inseguro.
- Pues vale, pero no cambies de opinión - Dijo riendo.
- Prometido - Dije acercándome y dándole un dulce beso en la mejilla.
- Bueno son las nueve, debería volver a casa.- Dijo ella.
- Si, yo también - Dije levantándome, había hecho una tontería no debería haberle dado un beso además había quedado con mi padre a las nueve y media y me iba a retrasar si alargábamos la cita.
- Bueno nos vemos mañana.
- Si, hasta mañana.
Me dirigí hacia mi casa, cuando llegue eran las nueve y cuarto, prepare las cosas para vernos por hologramas y mi padre apareció frente a mí.
- Hola James - Dijo mi padre.
- Hola padre.
- Bueno he programado esta llamada para contarte un poco, como elegiste a la chica y los problemas que puedes tener.
- ¿Que elegí que? - Dije asombrado.
- Sí, bueno, en la escuela hacemos unas pruebas para saber que chica es la mejor para ustedes.
- ¿Para nosotros?
- Si, tú tienes que conseguir que ella se enamore de una persona para entonces poder volver a casa.
- Vale, eso ya lo sabía.
- Si, pero esta vez cometimos un error con las pruebas y escogimos las que no deberíamos de elegir.
- ¿Y en que me afecta eso?
- Pues en todo, porque ella es...
-¿Qué?
- Es la mujer perfecta para ti, te hemos puesto a ayudar a tu alma gemela terrestre.
-¿Que han hecho que?
- En pocas palabras, tienes que intentar no enamorarte de ella.
-¿Qué?, Pero es posible?
- Me temo que si, hijo, solo te pido que cumplas tu misión y vuelvas a casa.
- Lo hare padre.
- No lo afirmes tan rápido, esto puede ser un gran problema para ti.
- En realidad no me parece tan grave - Dije yo.
- Hijo, te lo diré en otras palabras, estas destinado a estar con ella - Dijo seriamente.
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Los Celestians
RomanceJames es un extraterrestre que vive en un planeta llamado celestians convive feliz con su familia, hasta que un día, su padre el general. le obliga a viajar a la tierra para que cumpla su misión, ayudar a una chica humana a encontrar a su amor verda...