Preparando la Navidad - Parte 2

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Era de noche y estaba finalmente en frente de él, mi corazón se estaba acelerando y los nervios me estaban invadiendo, pero ya no lo podía aguantar más y con todo el valor que pude reunir mis labios se movieron formando las palabras que quería y temía decir.

¡Te a-amo! - me quede en silencio, pero parece que todo a mi alrededor también lo hizo.

El solo abrió los ojos sorprendido por lo que dije y a los pocos segundos respondió.

Yo... Teru - sabía lo que diría, llena tano de tristeza por ser rechazada, como también de esperanza a que él acepte mis sentimientos cerré tanto mis ojos y manos con fuerza esperando su respuesta. Los nervios se estaban haciendo presentes con más intensidad a medida que pasaba el tiempo, el miedo se apodera de mí, quiero llorar, quiero huir, pero no podía hacer eso, no quiero ser una cobarde, pero ¿Por qué no dice nada? ¿Por qué no hace nada? Mi respiración se agita y siento como si me asfixiara de verdad, me falta el aire.

De repente siento como sus brazos pasan por debajo de los míos abrazándome.

Yo también te amo, Teru.

Al escuchar esas palabras mi cuerpo se tranquiliza y abro los ojos encontrándome con los suyos, pero, aunque supiera su respuesta aún siento como me quedaba sin aire; su rostro se acerca al mío cerrando sus ojos ¿Acaso querrá darme... un beso? Me quedo inmóvil en el lugar mientras que siento como nuestras narices se rozan, pero antes del tan esperado momento mi cuerpo ya no puede más y se tumba al suelo, el golpe fue duro, me llevo las manos al cuello luchando por respirar y tomo una bocanada de aire, pero todo se va y solo que la oscuridad, sentía que mis ojos estaban cerrados, los abro y una fuere luz molesta mi vista, pero poco a poco mi vista se acostumbra a la luz revelando que solo eran los rayos del sol.

Me encuentro en el piso con las sábanas y la almohada también, me pongo de rodillas y veo hacia la cama, Mark no está.

¿Mark? ¿acaso todo fue... un sueño?

Al parecer si - dijo Eliza quien estaba apoyada sobre la puerta.

Que mal, justo cuando reúno el valor suficiente para confesarle lo que yo siento por él y resulta que todo fue un sueño - era raro decir eso con total tranquilidad y calma acepando ese duro golpe de realidad.

¿Así que tus sentimientos eh?

¡O-olvida lo que dije, no lo quería decir en ese sentido! yo... yo.... Esto... - mierda no sé que decir ¡¿Por qué lo dije en voz alta?!

Hey tranquila no le diré nada.

¿En serio?

Sep

¡Ahh gracias Eliza! - me estaba empezando a calmar, la cague, pero al parecer no tanto.

Además, esto me hace feliz ya que al fin tendré nietos.

¡¿NIETOS?! - me llevo las manos a la cara toda avergonzada, mi cabeza se estaba calentando, mi cara comenzó a quemar y noto como de mis orejas y de mi boca sale vapor con tan solo penar que Mark y yo haremos esas cosas pervertidas y luego tener a sus hijos.

Tranquila solo usen protección y no quedaras embarazada.

¡Oh sí! Protección, como no se me ocurrió antes, pero no puedo usar movimientos como los pokémon.

Llámalo y dile que compre condones entonces.

Tienes razón le llamaré.

Oh que tierna me revela su secreto no tan secreto y ya piensa en tener sexo con mi hijo.

¿eh?... ¡AHHHHH SON LOS NERVIOS! ¡¿OK?!

Ya ya, tranquila solo quería divertirme un poco.

Pokefilia: Oscura Creación (Paro por tomar unas vacaciones, pero volveré)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora