YoonGi repitió el mismo proceso que el día anterior, en 29 días, contando hoy, el contrato se acabaría- recuerda YoonGi, el dinero- Dijo dándose aliento a el mismo para seguir con ese tedioso contrato.
Llegando a la clínica se topó con JiMin, quién lo saludo atentamente.
-Hola YoonGi hyung, estaba yendo a que me dieran una inyectada, pero ya salí ¿Vamos?- hizo ademán con su mano dirigiéndose al pasillo por el cual se llegaba a su habitación.
-Si, como sea mocoso- dijo dándole una bolsa con un regalo que le habían obligado a comprarle.
-G-gracias YoonGi- dijo dándole una reverencia con su rostro sonrojado.
Ese día fue menos tedioso para YoonGi, ya que aunque el fuera el ser menos voluntario del mundo, JiMin lo complementaba a la perfección, dando todo de sí para que el contrario no se aburriera.
-¿Sabes YoonGi? Desde los doce años, no habíamos pasado tanto tiempo juntos como ahora- con una sonrisa acarició el rostro del peliazul con una sonrisa, la cual de inmediato fue quitada cuando YoonGi con notable desprecio la quito de su rostro bruscamente, quitándole el habla a JiMin, y en su lugar darle una sensación de vacío.
YoonGi al percatarse, instintivamente agarró a JiMin del codo, pero en ese momento soltó un gemido lastimero de dolor.
-¿Que te sucede enano?- preguntó fingiendo despreocupación, pero se alarmó al percibir que el aroma dulce de JiMin se transformó en uno ácido, viendo cómo sostenía su codo con lágrimas gruesas brotando de sus ojos e inaudibles sollozos.
YoonGi levantó la bata de el, y noto como su pliegue del brazo tenía varios hematomas, moretones y decenas de marcas de agujas-yo... Lo siento- dijo para dar fin a la reunión en su habitación e irse a su casa.
Ya en ella, YoonGi comió un como de ramen instantáneo, dirigiéndose a su cama para al fin dormir. Luego de intentarlo por horas, le fue imposible, su lobo le gritaba que dejara de ser tan estúpido.
-¿¡YoonGi cuando dejaras de ser tan imbécil!?- regañaba su lobo interior-¿Cuándo irás por tu Omega?- Y oh... Ese apodo lo desbarató.
-¿MI OMEGA? ¡CLARO QUE NO ES MÍ OMEGA- Se encontraba gritando en su cama.
-¡Silencio, hay gente que quiere dormir!- se escuchó desde el departamento de al lado, petición que ignoro con un "educado" "al carajo" no fue eso lo que le sorprendió, si no el darse cuenta de que se encontraba en pijama en su auto, dirigiéndose a la clínica.-estúpido lobo- Fue lo único que pudo pensar, sabía que si oponía resistencia a su lobo este podría hacerlo enfurecer más.
Su lobo estaba tomando control de la situación, al darse cuenta que roncos gruñidos salían furiosos regañando su lado humano, la fuerza gutural que salía de el, al darse cuenta que podría en cualquier momento romper el volante, y obvio, su aroma más potente que hace mucho tiempo, inundando el auto de olor a coco y café.
Para cuando llegó, la clínica estaba fuera de servicio, solo emergencias estaba abierto, asique entro por ahi. Aunque solo estuvo 3 días en la clínica, ya sabía de memoria el camino hacia la habitación de JiMin, a la cual corrió agitado.
Al llegar se dio cuenta que no podía irrumpir la paz de JiMin así, por lo que abrió la puerta delicadamente aún agitado, el televisor se encontraba encendido en un volúmen bajo, JiMin acostado, durmiendo, en la cama para dos personas justo en el centro, y una pequeña lámpara azul iluminado junto a la TV.
Sin poder controlarse, su cuerpo por sí solo desprendió la cobija de la cama hasta dejarla en la orilla, dejando sorprendido y sobresaltado a JiMin. El mismo hizo el ademán de levantarse pero en ese mismo momento YoonGi se acostó a su lado, no dejando que ni una partícula de aire pasará entre ellos. Agarró la cobija entre sus manos y las puso de nuevo en su lugar, esta vez tapándose el mismo también.
-H-hyung- trato de hablar, pero en ese momento YoonGi se apegó más a el, rodeándolo protectora mente con sus brazos, llevando su nariz al cuello del menor, aspirando su aroma acaramelado de mango, haciendo que gruñera, llevando la vibración de su pecho a la espalda de JiMin.
-¿Vez que tengo buenas ideas? YoonGi idiota- Se burlaba de el su lobo.
-Cállate- susurró por lo bajo, más aún así JiMin lo escucho.
-¿Que pasó hyung?-preguntó al no entender bien lo que dijo dándose la vuelta, quedándose demasiado cerca del rostro de YoonGi, a causa del pequeño espacio que había puesto entre los dos este.
-Nada bebé, durmamos- dijo, luego besando la pequeña nariz de JiMin. Aunque ahora podía dormir sin problema junto a su Omega, el lobo se YoonGi decidió que necesitaba más de su Omega. De un momento a otro YoonGi coló su rostro en el cuello de JiMin, extasiado por el atrayente aroma, y sin previo aviso coló su lengua entre sus labios, lamiendo gustoso el lugar donde supone iría la mordida. De repente las lamidas pasaron a chupones, dejando marcas y chupones violáceos en el fino cuello.
JiMin por otro lado se encontraba ahogado sus jadeos entre sus voluptuosos labios, frotando su rostro en el poco tonificado pecho de su alfa para calmar sus nervios, también encantado con la cantidad de feromonas que este soltaba. Tenía miles de preguntas, como porque YoonGi de la nada llegó a su cuarto a las tres de la mañana, o porque de repente se encontraba tan territorial. En vez de tratar de encontrar respuestas a eso, solo se dejó hacer, disfrutando las suaves caricias en su espalda baja, y la especial atención que estaba recibiendo su cuello.
Luego de aproximadamente media hora, JiMin cayó rendido, duermiendo entre los brazos de su alfa con sus dedos amarrados suavemente del cabello de YoonGi, mientras que YoonGi se encontraba abrazado firmemente de la cadera de su Omega, y su nariz en su cuello, así logrando después de muchos años dormir en paz y tranquilidad, y con una sensación de amor en su pecho, ambos con una débil sonrisa en sus labios.
ESTÁS LEYENDO
Cáncer ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ ©
Fanfiction◈ ━━━━━━━━━ ⸙ ━━━━━━━━━ ◈ JiMin era un omega con cáncer terminal, estaba enamorado de YoonGi, un alfa, desde los doce años, el cual sólo lo ignoraba. En el hospital donde estaba internado JiMin, le cumplen su "último deseo" a sus pacientes, JiMin...